Cuando Peter murió era tan fuerte la rabia que no nos dimos cuenta de que perdimos el vínculo que nos unía , el mismo que nos diferenciaba de cualquier par de gemelas.
Y , esque , en esos momentos de angustia , no pensamos en palabras anteriores de Peter.
"Pase lo que pase , estar siempre juntas , luchar juntas , nunca por separado".
Nos sentimos unas niñas idiotas y desobedientes. Cuando empezamos a culparnos la una a la otra, por el extremo de la habitación apareció padre, con dos colgantes
entre sus manos.
Ya frente a nosotras nos los entregó y apresuradamente leímos la etiqueta:
Julie : "Unidas hasta..."
Anne: "...El fin."
Nos abrazamos, y cada una abrimos el colgante. En mi colgante se podía observar una fotografía de Anne , y , en el de Anne había una foto mía .
Nos miramos y sonreímos. A partir de ese regalo inútil , pero a la vez de mucho valor , nos tomamos el día más felizmente.
Recordamos que Peter deseaba llegar a otra dimensión donde todo el mundo se amará , y no existieran guerras , ni nada por el estilo.
Peter se había ido a un lugar mejor , y deberíamos estar contentas por él. Su sueño se había hecho realidad.
Dejamos una maceta de bonitas petunias junto a la lápida y pronunciamos estas palabras :
-Las petunias significan obstáculos , porque en el camino siempre tropezarás con muchos , pero siempre hay que esquivarlos.
Eso has hecho a lo largo de tu vida , aunque hayas tropezado ahora , levántate y sigue tu camino.
A continuación rezamos y volvimos a casa. Guardamos los colgantes en un cofre de "tesoros" donde guardábamos múltiples recuerdos .
De ese día ya no puedo recordar nada más.
Ahora que ya sabéis de mi pasado , volvamos al presente. Ya han pasado cuatro meses y seguimos sin saber nada de Anne , lo cual
nos deprime. Pero nunca nos vamos a rendir .
Esta mañana estaba ordenando la casa , cuando divisé entre polvillo el cofre de "tesoros", pensábamos que se había perdido con la
mudanza , pero no.
Me dispuse a abrir el cofre. Entre fotos de la boda de mis padres , el vestido de boda de mi abuela , el reloj de Peter y
varios CD's de música clásica encontré mi colgante , el mismo que me había regalado Peter. Pero no encontré el otro , el de Anne.
Me lo colgué en el cuello después de limpiarlo y miré la foto que se hallaba en su interior.
No pude contenerme y solté varias lágrimas , besé la foto mil veces y miré al cielo diciendo :
-Dios , tengo esperanza , siempre la tendré pero ... -miré su foto- prométeme que volverás.