TWO WEEKS- OneShot-Louis Tomlinson-TERMINADO-

Parte04.

-Narrador Omnisciente-

Después de haber ido a dejar a Emma y su prometido, Louis se encontraba en el Yayo´s Bar, en la espera de su amigo Harry, su confidente, su hermano de alma desde el jardín de niños. Necesitaba desahogarse con respecto a cierto tema, o más bien de ciertas emociones hacia cierta persona.

No sabía cómo podía haber pasado tan rápido. Cómo pudo haber estado tan equivocado, pensando que lo que tenía con Eleanor era amor; con ella nunca se sintió de la manera que se sentía con Emma, seguro, contento, completo. Era increíble que en tan solo en una semana y media hubiera caído de tal forma ante ella; fácilmente podría hacer con él lo que se le antojara, había caído y desde lo más alto por ella, como una adolescente. Pero, no podía ser suya, había llegado tarde a su vida, y se sentía un tremendo estúpido por ello, por haberla perdido sin haberla tenido siquiera.

-Hola amor-dijo el rizado mientras tomaba asiento a su lado, haciéndole ojitos-

-Hola corazón, ¿todo bien con los niños?- preguntó siguiéndole el juego, con una sonrisa-

-Claro, todo perfecto, Darcy ha estado caprichosa, pero bien-su amigo era un completo idiota, no tenía duda de ello-¿qué cuentas?-

-Nada, solo…-no sabía cómo empezar-solo-suspiró-necesito que me digas que hacer-

-¿Es a cerca de la chica del sábado?- preguntó a sabiendas de ello, Kaitlin, quien había conocido esa misma noche le contó de la relación de su amiga con Louis, dejándole saber que estaba preocupada por el cercano matrimonio de su amiga-

-Sí, es ridículo, lo sé, pero…no quiero que salga de mi vida-

-Bueno no tiene que hacerlo- dijo encogiéndose de hombre. Pero es que no entendía, no era solo eso, sino que la quería para él, quería que mandara al tal Kevin al carajo, quería ser elegido sobre de él. Quería que fuera suya solo suya.

-Es que no la quiero con ese imbécil-gruño-

-¿Tan malo es?, ¿realmente es un idiota?- preguntó. Mier*da y es que no lo era, era un buen tipo, a pesar de que no me agradara, era solo que era a él a quien Emma pertenecía, pensó Louis-

-No, no lo es-soltó de mala gana con un suspiro-

{...}

La mañana del lunes Emma había despertado con un humor de perros, Kevin había salido desde temprano de la ciudad para asistir a su conferencia, la razón de su terrible humor era desconocida para ella, simplemente era uno de esos días donde no quería saber de la existencia de nadie. Pero para su mala suerte el timbre de su departamento sonó, haciéndola refunfuñar por lo bajo.

Encaminándose a la puerta encontró una pequeña nota con un esfuerzo de letra decente, era de Kevin, diciéndole cuanto había disfrutado la noche anterior y lo mucho que la amaba, ojalá ella pudiera decir lo mismo.

El timbre sonó nuevamente y lanzó una fuerte patada a la puerta, maldijo debido al daño que se había hecho en el dedo del pie. Abriendo lentamente la puerta descubrió quien se encontraba del otro lado, poniéndola nerviosa de los pies a la cabeza al recordar que aún se encontraba en “ropa de dormir”, que en realidad constaba de una larga playera y unas bragas por debajo.

Vio como los ojos de este se agrandaban ante su vestimenta, sus mejillas tomaron un sutil color carmín, para que después alejara la vista de su cuerpo semidesnudo.

-Lo lamento, no creí encontrarte de esta manera-balbuceó aún nervioso. Si esta delicada mujer causaba cosas estando vestida, lo que le causaba al estar en ese estado en aquel momento era indescriptible. Y no era solo atracción física lo que había allí, sino sentimientos no revelados-