No sé ni tengo la mínima idea de cómo comenzar este libro, es más creo que será creado solo para la mera diversión de mi amiga Cony y que se ría del complot de anécdotas que me han ocurrido.
Me presento mi nombre es Paulette tengo 19 años y creo a mi percepción ( y la de todo el que me conoce), que la vida se arrimo en mala suerte conmigo. No tengo claro cuándo comenzó, quizás cuando chupé ese caparazón de tortuga a los 7 años o quizás cuando me caí en la bicicleta y mi "virginidad" se fue con ella, así es damas y caballeros perdí mi virginidad con una bicicleta, esa es una historia que contaré más tarde. Toda mi vida está basada en un sinfín de cosas que me suceden a diario, pero para familiarizarnos más y entrar en confianza. Todo empezó el día en que nací. Un 2 de Octubre del año 97, si no me equivoco fue jueves y estaba nublado o eso es lo que dice mi mamá, no sé cuanto pesé así que no me pregunten lo que si les puedo contar es que era tan fea que a mi madre le daba vergüenza mostrarme al mundo, algo así como un guaren o un ratón enorme peludo y negro para que se imaginen de lo que hablo. Me críe en su mayor parte por mis abuelos, los cuales me aman y apoyan en todo lo que hago incluso en los condoros que me mando (todo para que si llegan a leer esto digan: -"Que es linda"-) y dentro de todo fue una niñez normal o eso creo. Mis papas son separados, así que tengo los problemas que el 70% de hijos de padres separado tiene:
1.-Una pelea constante entre ellos por creerse lo mejor
2.-No saber que hacer porque siempre desaparece 1 cuando hay problemas, lo que quiere decir que a fin de cuentas estaba sola.
3.-No encajar en ningún sitio.
Quizás esto no sea tan relevante, pero quiero hacer memoria desde cuando comenzó mi mala suerte. Así que volviendo al tema de mi niñez y exceptuando lo de la bicicleta, creo que ha sido algo común.
Volviendo al día de hoy y para que sepan a lo que se pueden esperar si siguen leyendo esto es que vivo con mis tíos y mis primos en Concepción. Una ciudad maravillosa que me está alojando hasta que termine de estudiar y salga al mundo laboral a crear nuevas anécdotas, vivo con ellos por diferentes razones las cuales en su mayoría son tristes, pero a fin de cuentas creo que ya me agarraron cariño y me quieren (estoy en la etapa de: Te quiero como a una mascota), soy revoltosa y nunca estoy en silencio, soy como ese amigo que siempre tiene algo que decir pero es tan estúpido la forma en la que lo hace que todos piensan que esta bromeando, ese amigo que le pasan mil y una cosa y que a veces piensas si será verdad todo lo que habla, por que pareciera que se va en puras falacias (siempre quise decir eso). Bueno ese amigo en este caso amiga soy yo.
Soy originaria de Santiago, nací y crecí allí, pase la mayor parte de mi vida cambiándome de casa, porque al vivir solo con mi mamá (La cual después de un tiempo pensó que teníamos una vida aburrida así que se puso a darme hermanos como loca), se esforzaba por ser independiente y vivir sola. Hasta que se aburrió de mi encontró a una familia mejor me dejo botada y en una junta me dijeron: -¡Ándate de aquí ya no te queremos, no nos sirves!-. Es una broma no me lo dijeron de ese modo pero si algo parecido y me dolió aún más. No me quedó de otra que buscar otra familia que me quisiera y me recibiera hasta que llegué aquí con mi tía Cinthia, mi tío Lucho y sus dos hijos, el Nacho y el Seba. Pucha que son lindos al recibirme, yo estaba pensando en publicar un aviso en yapo para ver qué onda si alguien vendía una familia o quisieran recibirme, lo que pasara primero me servía.
Ahora que ya saben de dónde vengo y como soy, bueno eso me faltó, soy una chica de 1.64, tengo el pelo castaño claro y uso lentes los cuales nunca los traigo puestos porque no me gustan (Porfiada como mula), tengo la tez clara, me gusta el negro y los súper héroes, tengo 3 hermanos que son mi vida entera (Nicolás de 13, Maite de 6 y Agustín de 4), no hablo con mi mamá hace casi 3 meses y mi papá es de esos que tu nunca lo te lo imaginas como papá, sino más bien como ese primo idiota que por alguna razón pertenece a tu familia y que pese a todo igual le tienes cariño. Después de todo esto quiero contarles algunas historias que me han ocurrido a lo largo de mi vida y con ellas poder sacarles al menos una sonrisa y que sepan que siempre existe alguien peor que uno.
