8.7.2017
Aquí me encuentro, como todas las noches, mis labios rosan el sucio tabaco mientras en una noche oscura miro las estrellas, aun así ya opacadas por la gran ciudad, una noche fría de un invierno triste y húmedo. No creo haber podido enamorarme de la soledad, tal vez un tercio de lo que ame a aquella mujer sutil, en todos sus sentidos, de labios delgados y cabellera rubia, casi tan dorada como un lingote de oro puro. Sus manos delicadas que todas las noches acariciaban mi pecho para poder descansar. En una noche igual a la que vivo hoy, entre brisas de melancolía. En un estado fúnebre entiendo el porque no estoy triste; sino vacío, un tanto frívolo. Me compenetro en su mente casi tan inhabitada de alegría como la mía. no estoy triste por el simple echo de que sabia que algún día lo que tanto temí se volvería realidad, y hoy lo padezco tanto como pocas personas padecen una parálisis del sueño.
Mi alma esta de luto, pero no por tu recuerdo, sino por la sensación en la cual me sentía amado, por poco creí ser un niño y no faltó mucho para que consuma el falso estereotipo del amor, el amor perfecto que tu me oponías y yo negaba con tanta firmeza. Eramos... Eramos como dos mundos colisionando, destruyéndonos una y otra vez, hasta terminar enredados en besos y palabras tristes, tan triste como la humanidad, como nuestras mentes, como yo en este momento. Me confundí al creer en nuestro amor, en la obsesión que compartimos por tanto tiempo. Porque siendo sincero nunca creí en tu gran mentira, solo la acepte para sentirme amado. Y si, me siento mediocre hasta el día de hoy por rebajarme a tus pies; putrefacto, corrompido y sucio me dejaste como a un niño sin uso de razón. desamparado en esta tortura, en esta capital inundada en suciedad, de prejuicios e injusticias.
No se responder si te amo, por el motivo de que hoy siento que te odio con la misma pasión con la que siempre intente quererte. No te amo porque me destruiste haciendo que yo me odie a mi mismo, así como tu me aborreciste en todo este tiempo. Sigo esperando las disculpas que nunca llegarán, nunca llegarán porque estas tan introducida en tu propia falsedad que no puedes ver con claridad, no puedes entender como yo entendí en algún momento, como yo te abrí los ojos. Pero a pesar de todo hoy te extraño, te extraño tanto que siento que me desvanezco por dentro, y me contradigo, lo sé, pero a pesar de lo que siento en este corazón apenado, admito que me diste paz, la cual necesito y no creo encontrar en un largo tiempo. Necesito perdonarme por todo lo que me lastime por ti. Hoy renuncio a todo lo que creí que eras, porque finalmente entiendo que nunca nos amamos así como se amaron Romeo y Julieta.
9.7.2017
Llueve, un diluvio triste, sin fuerzas que no demuestra nada, demuestra paz como si estuviera limpiando las calles de pecados. No es una lluvia feroz, es un tanto sutil... Como ella, intento pero me cuesta sacarme de la cabeza ese rostro consumido por su desgracia, tomando un café con el ruido de la lluvia discreta, mi mente piensa obligándome a castigar mi propio ser, no puedo evitar recapacitar sobre lo que paso, echándome la culpa de que tu amor se ausentase justo cuando yo te amaba con locura, con imprudencia, con manía. La luz un tanto cobriza que alumbra mi rostro con carencia de incitación. se esta sintiendo, mientras mas pienso mas salvaje se pone el cielo, largando estruendos tenebrosos, avisando que la paz se termino que la limpieza de las calles acabo y que ahora, ahora, ahora empieza el castigo. Mi castigo ya empezó hace semanas, lluvia sutil de mi debes limpiar las calles de mi conciencia, porque me culpo de que hoy me encuentro solo, sombrío, negativo. Por culpa de una mujer, linda a la vista pero desagradable para el corazón, pero hoy dudo, tal vez la culpa fue mía pero me miento para hacer sentir a mi pensamiento limpio, como una vajilla del palacio real, brillante y esplendorosa.
Un domingo libre de responsabilidades, deseo que este desconsuelo termine de una vez, haciéndome sentir pura indiferencia por aquella perversa de ojos miel. Era un afortunado en papel de niño que creía que el agua bendita servia para algo. Pero me hiciste golpear con la realidad, el agua sigue siendo agua por mas que la hayan bendecido con las palabras de un profanador. Nunca critique a la iglesia, vos captaste lo que querías creer, yo siempre hable con la verdad sobre los labios, siempre que pude, porque soy un mentiroso, cobarde, pero lo hice por vos, todo lo que sos fue gracias a nuestro querer, y no quiero sonar egocéntrico pero yo te hice ver la realidad que rondaba por las mentes de los menospreciados. Y acepto que vos me enseñaste lo que era la inocencia, la pureza, la sencillez de una mujer ahogada en una gran mentira, en la que yo estuve antes.
Es feo no sentirse deseado, anhelado. es feo saber que el final llega y no hay marcha atrás, es como posponer la alarma cada vez que suena, de una manera u otra nos vamos a levantar para seguir la rutina tétrica que nos inunda de cansancio y muerte. las calles son cementerios, o al menos así los veo después de desplomarme en lo que estaba pasando entre nuestra relación tan desgastada como mis zapatos golpeados y sucios. Un jazz afligido suena y rebota en las paredes de la habitación donde nos odiábamos con tanto amor. las colillas de cigarrillos en el suelo que marcaban nuestros errores tan evidentes como las ganas de irnos lejos, donde nadie descubra que ya no me querías mas, en donde no se notase que yo creía no poder estar sin vos. en donde podamos bailar todas nuestras canciones preferidas sin sentirnos avergonzados de nuestros pasos, esos paso errados. hoy la música es una condena para mi sentir, y no le encuentro sentido a esos versos alegres que decía que todo iba a salir bien, todos sabíamos que se iba a desmoronar todo lo que construimos en tanto tiempo, porque nadie me aviso que me iba a quedar sin nada, con menos de lo que creí tener.
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lo triste del amor
RomanceUn joven con una perspectiva distinta a la sociedad y a la vida sufre una ruptura amorosa que lo lleva a una reflexión diaria. Abierta a criticas constructivas. Texto en proceso.