Capítulo 23:¡Al fin una buena noticia!

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A amanecido, un nuevo día empieza y espero que algo bueno pase hoy...Valeria entró corriendo ha mi habitación.

-Valeria:¡Mari, despierta!Acaba de suceder algo importante.

-Mariana:¿Qué pasa? Le dije yo aún medio dormida

-Valeria:Es mamá, acaba de despertar, me acaban de llamar diciéndome que ella quiere vernos.

-Mariana:¡Es enserio lo que me estás diciendo! Que esperas ayúdame a cambiarme, muero por verla.

Después de un rato

-Valeria:Acabó de llamar a David, para que nos lleve al hospital

-Mariana:¡Enserio no podemos ir en taxi! Le dije con el ceño fruncido

-Valeria:Tú sabes que mamá no nos permite andar solas en taxis o cosas así por el peligro, y en el único en el que confía es en tu "amor platónico"

¡Pi, Pi,! Sonó el claxon del auto de David

Mi hermana me ayudó a salir en la silla de ruedas al jardín, ella se dio vuelta para cerrar con llave la puerta de la casa, mientras que  David se bajaba del auto para ayudarme, viene caminando hacia mi y no lo puedo negar se ve hermoso; ese caminando tan sensual, su cabello ondeando por el viento y sus labios, tan perfectos me muestran esa sonrisa tan hermosa que brota de ellos...

-David:Hola hermosa, menos amargada el día de hoy--me dijo sonriendo.

-Mariana:¡Oh pero mira quién llegó!¡Hasta que por fin te soltaron la correa!

-David:¡Jajaja! Muy gracioso tu comentario.

-Mariana:Evitame un disgusto y ayúdame  a subir al auto

-David:Ok como mandé la princesa

Nos subimos al auto, íbamos de camino ha encontrarnos con mamá, valla que deseaba llegar y darle un beso, después de un poco de tráfico y un par de madrasos que David le pego a otro conductor llegamos al hospital.

Ya en el estacionamiento

David me ayudó a bajar y no pude evitar mirar sus brazos musculosos, deberás que el GYM le estaba haciendo muy bien. Nos dirigimos al cuarto de mamá y cuando llegamos corrimos ha abrazarla y le dije:

-Valeria:Mamá te extrañamos tanto,¡Por Dios! que alegría verte tan bien dijo Valeria con sus ojos cristalinos.

-Mariana:Ma que bueno que estés mejorando, me hiciste tanta falta, mira siento mucho todo lo que dije en el aeropuerto, yo te amo y no se que hubiera hecho si ahorita no estuvieras con nosotras--dije con lágrimas recorriendo su mejilla

-Laurent:Mi niña eso ya no importa, lo bueno es que ya estoy con ustedes mis princesas  hermosas, sabes las escuché cuando me hablaban y luche por ustedes, porque sabía que no las podía dejar, las amó mucho--dijo con una sonrisa melancólica

En ese abrieron la puerta y por ella entra un doctor y les dijo:

-Doctor Martínez:Buenos días señoritas, les informó que la señora Contreras ya tiene la salida del hospital sólo se tiene que tomar los medicamentos y no hacer muchos esfuerzos, con su permiso me retiró.

Laurent:Doctor espere dónde está mi esposo.

Doctor Martínez:Señora lamentó informarle que su esposo murió en el accidente, con su permiso me retiró.

-Laurent:Valeria hija llévate a Mariana a casa ella ocupa descansar, adiós princesa cuídate.

-Laurent:Como que tú papa murió, eso no puede ser verdad...el estaba tan contento porque volvería con nosotros a casa y tenía tantos planes con todas nosotras.

-Valeria:Mamá tranquila, hablamos en la casa, no llores o el médico no te dejará salir de acá. Mariana ve por la ropa con  David, yo me quedo acá a cuidar de mamá.

-Laurent:No Valeria, Mariana tiene que reposar, deja que se valla a casa-dijo con lágrimas en sus mejillas.

Salimos del cuarto

Como David está afuera de la habitación apenas salimos lo vimos,el se levantó y Valeria le dijo:

-Valeria:David llévate a Mariana a casa ella necesita estar en reposo y tú me traes la ropa de mamá cuando vienes de ir a dejar a Mariana.

-David:Esta bien, nos vemos al rato.

Ya en el auto:

Vamos de camino a casa, no puedo creerlo pareciera que el mundo conspira en mi contra y que todo o todos se ponen de acuerdo para que yo y este experimento estemos solos, cuando de pronto siento que frenan de golpe el carro.

-Mariana:Oye imbécil ¿qué te pasa? ¿porqué freñas así?y según mamá me manda contigo para que este segura

-David:Deja de jugar conmigo y de una maldita vez dime que es lo que te he hecho para que te compartes así

Me le quedé mirando sin decirle una sola palabra.
Sabes que es lo que me pasa estoy podrida de que estés con ella por un simple polvo eso es lo que es, que no valoras ni tienes la pinche idea de lo que siento por ti y le dije:

-Mariana:No me pasa nada, puedes estar tranquilo ahora arranca que urge llevarle las cosas a mamá

-David:¡Así claro! No te creo sabes te estás comportando extraña, antes yo sentía la confianza de contarte mis problemas, de hablarte de la mujer que amó..

-Mariana:Mira mejor cállate y maneja, que tú no eres el único que tiene problemas y la verdad a tu novia me la pasó por el cul*.

David encendió el auto y me llevó furico hasta casa, en lo que restaba del camino no nos dirigimos la palabra, llegamos a casa me ayudó a bajarme del auto, pero aún así se veía furico conmigo, le dije dónde podía encontrar el maletín con la ropa de mamá y no me dijo ni gracias, prácticamente me tiró la puerta en la cara, tanto así que ni siquiera me ayudó a subir a mi habitación.

Le verdad me tiene sin cuidado que sea tan estúpido y tanto que babea por ella, hace que me hierva la sangre.

En la noche

Acaban de llegar del hospital con mamá; llegó muy cansada y aparte de cansada destrozada por la noticia de papá, Valeria me pregunto.

-Valeria:¿Porque David está tan furioso?

-Mariana:Oh mira que extraño ni cuenta me di que se había ido, no lo sé, seguramente se peleó con su mujercita.

-Valeria:¿Oh tú le has hecho algo?

-Mariana:Lo siento querida esta vez te equivocas, buenas noches estoy agotada me voy a dormir.

*No soy igual que las demás*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora