Capítulo 3

68 1 1
                                    

—¿Xavier? ¿Isabella?—dijo mirándolos. —¡No puedo creer lo que ven mis ojos! ¡Están vivos!

Draco y Hermione se miraron impresionados, aun sin comprender que estaba sucediendo.

—Claro que estamos vivos— dijo Malfoy con la actitud de superioridad que lo caracterizaba— solo que yo no me llamo Xavier.

—Ni yo me llamo Isabella— dijo Hermione confundida. —Mi nombre es Hermione, Hermione Granger.

El extraño hombre miró a su alrededor y lo comprendió todo al instante.

—Claro. Han pasado muchos años desde entonces— dijo mirando al suelo. —Entonces ustedes deben ser sus descendientes...

—¿Qué? —dijo Draco enarcando una ceja. —Será mejor que cerremos el libro, no tiene sentido.

Sin embargo, Hermione negó con la cabeza y lo miró con aprensión.

—Mejor escuchemos que es lo que tiene que decirnos— dijo la castaña. —Un libro con holograma es algo fascinante.

Draco puso los ojos en blanco como evidente muestra de fastidio.

—No me gusta repetir las cosas dos veces: mira hacia abajo cada vez que me dirijas la palabra— dijo con voz amenazante.

—Antes muerta— contestó ella.

—Entonces tendré que matarte— respondió el rubio con los ojos ardiendo de ira.

Su discusión fue interrumpida por la repentina risa del misterioso «holograma», como Hermione lo llamó.

—¡Decís no ser Xavier e Isabella!¡Pero si siguen peleando como siempre! Ah, por cierto, no soy un holograma. Soy un recuerdo— dijo el personaje del libro.

—¿Qué? ¿Cómo es posible? — dijo Hermione, mientras sus ojos miraban fijamente al «recuerdo» y la confusión cruzaba su rostro.

—Así es. Puedo entender su confusión. Creé esto hace ya mucho tiempo, casi no tenía esperanza de que alguien lo abriera— rio irónicamente mientras señalaba al viejo libro que yacía, casi en ruinas, en el suelo de la biblioteca. —Quién me iba a decir que justamente ustedes, los descendientes de mis dos mejores amigos, serían los que iban a descubrir mi invento.

—Este libro fue creado para que, cuando alguien lo abriera, pudiera cambiar el pasado. — dijo mientras se arreglaba su traje de época. —Cambiar el pasado acaso ¿no es también tener la posibilidad de cambiar el destino?

Draco y Hermione lo miraban sin decir nada, con una mezcla de incredulidad y asombro cruzando sus caras.

—Muy bien, creo que lo mejor será comenzar desde el principio. — dijo el hombre. —Mi nombre es William de Castilla y nací a mediados del siglo XVII, pertenezco a la clase media-alta adinerada de mi tiempo. Mi mejor amigo es Xavier Pirandello, lo conocí cuando éramos niños, y fui amigo de Isabella Shawn cuando se casó con Xavier.

—¿¡Qué?! — gritó Draco —¿Estás diciendo que un antepasado mío estuvo casado con una sangre sucia?

Hermione, sin poder evitarlo, se lanzó contra Draco con la intención de golpearle con todas sus fuerzas. Sin embargo, el rubio era más fuerte y pudo empujarla lejos de él.

—Te lo he advertido. Te dije que no volvieras a poner tus sucias manos sobre mí— dijo con odio.

—Y yo te advierto ahora. Si vuelves a dirigirte a mí así, te prometo que con mis SUCIAS manos voy a arrancarte la lengua.

—Aún puedo ver la llama de la pasión encendida en vuestros cuerpos. Siempre habéis sido el uno para el otro— dijo William riendo.

Hermione miró fijamente los ojos oscuros de William con la boca abierta, sin poder creer lo que había dicho.

—Ahora sí, hay que cerrar el libro. — dijo Hermione mientras gateaba hasta éste, dispuesta a cerrarlo.

—¡NO! He estado esperando muchos siglos para que alguien me abriera y comprobar mi invento— dijo William aterrado.

—¿Invento? ¿Esto es un invento suyo? — preguntó Draco asombrado.

—Por supuesto. Lo creé para poder cambiar el pasado, como ya os he dicho. Pensé en usarlo para cambiar otras cosas de mi vida, pero cuando Xavier e Isabella murieron supe que debía de cambiar el destino. Desgraciadamente, cuando acabé mi creación era demasiado anciano y morí antes de poder usarlo y sin revelar a nadie la existencia de éste. Dentro de este libro, conservé mi recuerdo de juventud para poder guiar a quienes estaban destinados a cambiar el pasado de Xavier e Isabella. Es decir, ustedes.

—Dices que...—preguntó Draco. —¿Pretendes que nosotros hagamos que tus amigos no mueran y evitemos su muerte cambiando lo que sucedió, retrocediendo en el tiempo por medio de tu invento, o sea, este libro?

—Exacto— afirmó William.

—Estás loco si piensas que voy a desperdiciar mi tiempo salvándome la vida hace tantos siglos. Si debo morir en aquella época, será por algo— dijo Draco.

—Respeto tu decisión, muchacho— dijo William. —Lo único que debes saber es que en esa época, mueres a los 19 años, lo que significa que en esta vida morirás a esa misma edad. A menos que cambies el pasado...

—¿QUÉ? — Draco no cabía en sí del asombro. El silencio invadió el lugar.

Ya no era solo Hermione quien tenía la boca abierta. Pasaron unos segundos hasta que alguno de los dos pudiera reaccionar y decir algo coherente.

—No sé tú Malfoy, pero yo no pienso morir a los 19 años si puedo cambiarlo—dijo Hermione dispuesta a lo que fuese.

—Yo tampoco pienso hacerlo—dijo Draco y mirando a William le dijo: — ¿Qué es lo que debemos hacer?

—Excelente. Genial. Maravilloso. No os arrepentiréis, os lo aseguro. Mi invento puede hacerles volver en el tiempo y cambiarlo todo—dijo William entusiasmado

—De acuerdo, pero ¿cómo sabremos qué hacer? —dijo Hermione preocupada.

—Aquí viene la parte más complicada. Deberán revivir lo que sucedió, desde el momento en el que Xavier e Isabella se conocieron e investigar sus muertes, averiguar cómo murieron y qué lo causó, y así cambiar lo sucedido. ¿Queda claro? —explicó William.

—Pero es una historia muy larga y solo podemos estar aquí esta noche—dijo Hermione con cara de preocupación. 

—Pues tendrán que arreglárselas para venir todas las noches, hasta que vean cómo murieron sus antepasados. Una vez que lo hagan, retrocederé el tiempo una hora en el pasado, una hora antes de la muerte de Xavier e Isabella, y deberán cambiar lo sucedido.

Draco y Hermione se miraron. Todo parecía tan irreal que no sabían si era verdad o estaban en un sueño, o en una pesadilla.

—Haz lo que tengas que hacer— dijo Draco.

—Sí, vamos a hacerlo—afirmó Hermione.

—Perfecto. Tendrán que aprender a llevarse mejor, porque pasarán mucho tiempo juntos— dijo William con una sonrisa de oreja a oreja. —Esto será como una película de las que existen ahora, solo que ustedes la vivirán desde dentro. Acérquense...

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jul 11, 2017 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Cambiando el pasadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora