Battlefield

Promesas y Origamis

Juno subió todas las escaleras que llevaban desde las Mazmorras hacia el gran comedor lo más  de prisa que sus piernas pudieron con cuidado de no tropezar en  el intento.
Se había  despertado tarde por culpa de una noche en vela hablando  con Lily a través de ese pergamino encantado que habían creado la pelirroja y ella para comunicarse cada que estuvieran separadas y ya que tenía una habitación  para sí  sola, nadie se había molestado en despertarla para variar, el abrigo que llevaba iba cayendose por los hombros y en un intento de ponerlo en su lugar chocó con un chico Ravenclaw que pasaba por allí, por suerte este la sostuvo de los hombros antes de que impactara contra frío suelo.
Lo reconoció como Quirinius Quirrell, el chico un poco aturdido la soltó de los hombros inmediatamente al reconocer de quien se trataba, la peliblanca le sonrió amistosente.
-Gracias, Quirrell... Si me disculpas, voy corriendo al Gran Comedor antes de que lo traguen todo-
Sonrió otra vez como despedida y el chico simplemente asintió aturdido antes de que Juno lo perdiera de vista doblando por el pasillo.
Llegó jadeando hasta el umbral de las grandes puertas y observó como todos hablaban animadamente y otros cabeceaban sobre su desayuno en un intento de no dormirse, otros comian apresurados para llegar a tiempo a clase.
Divisó a James, Sirius y Remus entre el grupo de los que  hablaban animadamente y se acercó a paso más tranquilo intentando regular su respiración, saludó con la mano a los de la mesa Slytherin que la miraban antes de hacerse espacio entre ambos amigos.
-Buenos días- saludó a los tres merodeadores y cogiendo una de las pocas tostadas frías que quedaban para luego tomar un cuchillo y comenzar a untar mermelada de frambuesa  encima. Dos de ellos le devolvieron  el saludo con una sonrisa.
-Vaya, Juno. No estas en tu mejor momento, dulzura- Comentó Sirius, a lo que Juno puso los ojos en blanco.
-La idea es que me desees buenos días tambien, chucho- Comentó la peliblanca concentrada en comer rapidamente su desayuno.
El chico se encogió de hombros con una sonrisa ladina antes de besar su mejilla.
-Ya sabes que conmigo  se rompe el molde, dulzura-
Juno volvió a blanquear los ojos y empezó a buscar a Lily con la mirada, al no encontrarla le quito importancia imaginando que estaría bajando la torre Gryffindor tan apresuradamemte como ella había subido hasta el lugar donde se encontraba ahora.
Los chicos habían retomado la conversación al notar que habían perdido su atención.
Logró captar las frases: Vacaciones, va a ser increible, ya verás como te diviertes, Canuto.
Antes de hacer la pregunta que se había armado en su cabeza con el ceño fruncido.
-¿De qué hablan?
Loa tres se quedaron en silencio, tensos en sus lugares antes de Sirius sonriera con inocencia y pasara  su brazo izquierdo por  sobre el hombro dela chica ocacionando que esta lo mirara con sospecha entrecerrando sus ojos y mirando a los otros dos que sonreían de la misma forma en que el moreno lo hacía, como si fuera a caer un rayo sobre ellos en cualquier momento.
-Juno...- comenzó el muchacho - ¿Sabes que eres mi amiga favorita en todo este universo , no?
-¿Qué es lo que traman?- Preguntó en seguida como si de un reflejo se tratara.
Ante eso el moreno comenzó a acariciar sus hombros intentando que se tomara la noticia lo mejor posible
-Verás, dulzura. La madre de Cornamenta, nos ha invitado a que... Bueno... En realidad no es la gran cosa, jeje... Pero, bueno... Amm ¿Que sabes  acerca de los Mundiales de Quidditch?

Entonces ante la simple  mención del evento todo se aclaró en la mente de la peliblanca, abrió más los ojos y miró al moreno sintiéndose  traicionada por su mejor amigo de la peor manera.
Comenzó a negar con la cabeza lentamente mientras veía a los otros dos chicos con los labios entreabiertos .
De pronto, tomó una bocanada de aire y sonrió tranquila, los tres chicos alrededor de ella la miraron asustados por el cambio de expresión tan repentino y se quedaron estáticos en su lugares esperando a que estallara una bomba.
-¡Eso es genial! ¿Cuándo iremos?- preguntó animada
Esta vez fue James quien respondió luego  de  que los tres tragaran duro.
-Ammmh... JJaja mira... Este... Verás, a mis padres solo les alcanzo para... Cinco entradas y son para... Emm... Canuto... Lunático... Colagusano... Papá... Y yo- respondió con una sonrisa suplicante esperando a que lo perdonara, se podía ver una pequeña gota de sudor cayendo de su frente por la tensión.
Juno los miró un momento con la sonrisa aún en sus labios.
-Oh... Supongo que será para la próxima, pero cuando termine el partido regresaras a Grimmauld Place ¿No, dulzura?- preguntó al moreno a su lado imitando el  apodo que el usaba constantemente para ella.
-Pues... La verdad es que nos ha invitado tambien a pasar... El resto de la vacaciones en casa de Cornamenta- contesto lo más apresurado que pudo a lo que la sonrisa de Juno se borró casi al instante cambiándola por una mueca de indignación hacia los tres.
-¡¿Me vas a abandonar?!- exclamó más alto de lo que pretendía llamando la atención de los estudiantes a su alrededor.
-Yo no lo pondría así, dulzura. Sólo es uuun pequeño tiempo separados
-¡Y una mierda, Sirius Black! ¡Me abandonaras con la loca de tu madre! ¡Sabes perfectamente que estas vacaciones no las pasaré con Lily! ¡Porque viajara con sus padres a la jodida Rusia!
-¿Estan hablando de mi?  Escuché mi nombre-