Capítulo 1

3.3K 195 25
                                    

Han pasado tres años desde mi partida, nunca pensé que el tiempo estuviese tan lento a mi favor pero por fin llegó el día, el día en el cual volveré a Konoha y ya podré quedarme y disfrutar a mi pequeño hermanito Konohamaru, mi tío Asuma y mi querido abuelo.

Mis padres eran excelentes ninjas, aunque ellos hayan muerto unos días antes de mi graduación como Jonin a mis 17 años recién cumplidos, fue un golpe duro para mi pero debía seguir sin importar nada, ya que tenía que estar bien por Konohamaru, fue difícil explicarle todo pero creo que medianamente había entendido que nuestros padres estaban en un lugar mejor, entonces ambos nos volvimos más unidos aunque no paso mucho tiempo y me fue asignada mi primera misión de rango S, la cual se trataba de espionaje.

Mi abuelo me había dicho que no era necesario que fuese pero acepté la misión ya que no quería que la gente pensará que era una niña mimada por ser la nieta del Hokage, además de muchos rumores que siempre rodearon mi vida desde pequeña.

Siempre decían que cada ascenso como ninja se debía a que mi abuelo intervenía, siempre me trataron con respeto pero también con repudio.

En fin, antes de irme a dicha misión con un grupo de ninjas, me había despedido de mi pequeño hermano que tan sólo tenía 5 años, él dormía, me dolió en el alma tener que irme pero sólo así podría marcar la diferencia, como mi tío Asuma. Así que me fui, con todo el pesar en mi corazón.

Hoy con 20 años, estoy volviendo a mi aldea natal, en todo este tiempo jamás he dejado de pensar en mi hermano, en cuanto lo amaba y como desea darle un fuerte abrazo y decirle que siempre estaremos juntos, aunque mi único miedo era de que él me haya olvidado o peor aún que me odie por haberme ido.

Como muchos nervios en mi interior decidí cruzar el umbral de la entrada, puse mi mirada al frente y con decisión, empecé a caminar, que me puse atrás de mis compañeros para no llamar la atención.

Dos chicos que eran los guardianes de la puerta nos recibieron.

-¡Al fin regresaron!- dijo el chico castaño que tenía un ojo cubierto, ese era Izumo.
-¡Si, realmente pensamos que se tardarían más pero cumplieron en tiempo y forma- dijo el otro que tenía casi todo el rostro vendado, Kotetsu.
-En fin, si nos disculpan, tenemos que entregar los detalles de la misión al Hokage- le respondió el líder del grupo pero antes Izumo y Kotetsu preguntaron.

-Oigan ¿acaso no falta alguien más?- seguramente se referían a mi, así que salí de atrás de mis dos compañeros para hacerme presente.
-Si hablan de mi, aquí estoy- dije con un tono de cansancio.

Ambos me quedaron mirando de arriba a bajo, yo levanté una ceja y pregunté.

-¿Sucede algo?- con un tono de seriedad, ambos tragaron saliva para luego Izumo hablar.
-Estas... diferente...- tenía una cara de idiota.
-Estas más linda...- dijo Kotetsu, suspire por escuchar sus palabras.
-Supongo que ¿gracias?- luego le hice una seña a mi grupo y nos fuimos al despacho de mi abuelo.

Uno de mis compañero me da un codazo.
-No hacer más que llegar a Konoha y ya estás robando corazones jajaja, tan típico de ______- me empecé reír por su comentario y le di un golpe en el hombro.
-¡Callate tonto! Tampoco que fuese la gran cosa jajaja-

....

Estabamos en la puerta del despacho, yo estaba tan feliz que no se si me aguantaría de abrazar a mi abuelo, suspire hondo y toque la puerta, escuché que nos habían dado permiso y nos adentramos.

La oficina seguía igual que siempre, y allí estaba mi querido abuelo, de inmediato que hicimos contacto visual, mis ojos se cristalizaron y no pude evitar ir abrazarlo.

Él me recibió con sus brazos abiertos y pude sentir que él también estaba llorando de la emoción.
-Viste abuelo, volví, sana y salva como te dije- me aparte de él y le dediqué una sonrisa.
-Eres mi mayor orgullo,mi querida niña- acarició mi cabello.

De inmediato tome mi lugar junto a mi tropa, allí, Hayimoto nuestro líder le entregó todo el informe detallado de la misión de espionaje y algunos pergaminos que pudimos confiscar.

Luego de terminar de dar el informe, ellos se retiraron y yo me quedé en la oficina un poco más para poder hablar con mi abuelo.

-No puedo creer que ya hayan pasado tres años desde tu partida, y pensar que eras una Jonin recién recibida pero ahora por lo que veo estas hecha una mujer- me sonrió.
-Créeme que no fue fácil todo este tiempo y más cuando no podía tener contacto con ya sabes quien- dije un poco triste.
-Él jamás se olvidó de ti, incluso desde tu partido le he puesto un tutor para que pudiese entrenar y ser más fuerte, ya que le dije que cuando tú regreses, estarás ansiosa por ver que tan genial se ha vuelto- dijo mientras fumaba.

Un alivio invadió mi ser, así que me levanté del asiento y me dirigí a la ventana.

-¡Voy a buscarlo!- dije despidiendome.
-______ ¿CUANTAS VECES TE HE DICHO QUE NO SALTES POR LA VENTANA?- escuché el grito de mi abuelo.
-¡Yo también te quiero abuelito!- salí corriendo a toda prisa al bosque, ese era el lugar más seguro donde mi pequeño hermanito estaría entrenando.

No he visto hasta ahora ninguna historia sobre el pervertido del closet xD pero si la hay digan :3, espero que les guste. ❤❤❤❤❤

P.d: se que prometí subir historia por medio de una votación la cual esta vigente pero no me aguanté y subí esta xD, igual no se preocupen que pueden seguir votando 😙😄😄😄😄

Enamorada de un pervertido [Ebisu y tu] Historia Finalizada✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora