Despedida.

513 27 2
                                    

Una vez el Shinigami menor hubo escuchado las razones de sus amigos de aquella improvisada salida, se dirigió a toda máquina a la ciudad que nunca duerme.
El viaje transcurrió en silencio y en menos de una hora ya se encontraban circulando por las calles levemente alumbradas por la luz crepuscular. No faltaba mucho para que anocheciera y poco a poco, los anuncios de neón empezaba a cobrar vida sobre la cabeza de cientos de personas que buscaban divertirse o apostar todo lo que trajeran encima.
- Vamos Kid, date prisa! - alentó Liz a su técnico.
- Ya oí, no te desesperes, llegaremos a tiempo - alegó el de ojos ambarinos mientras trataba de ubicarse entre las calles.
No tardaron mucho en localizar el famoso Coliseo ya que desde varias calles antes, se lograba vislumbrar el enorme anfiteatro.
Justo a un par de calles antes de llegar, se lograba ver también, la enorme cantidad de gente que salía del lugar, algunos en automóviles lujosos y la gran mayoría a pie, que se perdían entre las calles de la ciudad. Esto le preocupo tano al piloto, como a la copiloto, porque eso significaba que el espectáculo había terminado y, según las palabras de los comentaristas de la televisión, los hermanos Evans ellos se irían apenas acabará el concierto.
- Apresurate Kid - volvió a decir la rubia, esta vez más fuerte, llamando la atención de manera accidental, de todos los que estaban en la parte trasera del vehículo.
En ese momento, Black*Star, que se había encontrado viendo todo el "espectáculo" desde la ventana, donde había sacado la cabeza para admirar todo lo que pudiera, regreso su mirada hacia el piloto.
- Hey Kid, que no el de allá es donde está Soul? - preguntó, ignorante de lo que pensaban los dos que estaban en frente.
Efectivamente, frente a ellos ya se encontraba el famoso Coliseo cosa que alegró por unos instantes a los presentes hasta que miraron la cantidad de gente que había alrededor. Había muchos transeúntes que aparentemente se habían acercado a ver el espectáculo en las pantallas que se encontraban a las afueras de la construcción. De las salidas de este, se veía a bastante gente vestida de gala que probablemente había ido por los famosos hermanos Evans y finalmente, se podían distinguir a varios reporteros ubicados alrededor de todo el lugar, documentando todo lo que pasaba y esperando, probablemente que salieran los músicos albinos.
- Esto no es buena señal - comentó el ojiambar, poniendo palabras a las preocupaciones de los demás.
- Crees que ya se hayan ido hacia el aeropuerto? - comentó Tsubaki, aumentando la ansiedad de los presentes.
- Maka lo sabe - habló la menor de las Thompson con bastante seguridad.
- Como se supone que Maka lo sepa? - cuestiono su hermana volviéndose hacia la parte trasera del vehículo.
- Liz tiene razón - habló Tsubaki abrazando un poco más a la peliceniza que se encontraba observando a su vez a la pistola menor - Como se supone que Maka...
- Ella puede saberlo - interrumpió Chrona que se encontraba hecha un ovillo en el asiento contiguo al de Mala y Tsubaki.
- Como podría saberlo? - preguntó Tsubaki confusa.
- Con la resonancia.
_________________________________________________________________

- Vamos Soul - lo llamaba el mayor mientras jalaba una gran maleta con ruedas a su lado. De su espalda colgaba otra mochila a modo de morral.
- Primero el traje de pingüino y ahora me utilizas de burro de carga!? - se quejaba Soul jalando una maleta visiblemente más voluminosa que la de su hermano - Es que acaso no me tienes consideración?
- Por supuesto que la tengo - dijo Wes sin voltear y caminando de manera rápida entre las personas que circulaban por los pasillos del aeropuerto - Solo te estoy pidiendo un pequeño favor, después de que acabaste con la comida del hotel, de la recepción y con el dinero que te presté para apostar, el cual por cierto, no recuperaste.
El rostro del menor cambio a un gesto de disgusto, similar al que pusieron Black y Kid al conocer a Excalibur. Wes violin de reojo a su hermano y rió por lo bajo mientras seguía su andar.
- Además - continuó - Ni que fuera la gran cosa. Una simple maleta no debería ser nada para la próxima Death Scythe...
Soul miró con sorpresa a su hermano, no por el halago que pasó desapercibido, sino por el hecho de que supiera qué era una Death Scythe y que él estaba en proceso de serlo; antes de que dijera algo, el albino mayor se detuvo en seco, haciendo que Soul casi tropezara solo, por ir casi corriendo.
- Bien Soul - se dio la vuelta para mirar a su hermano quien se veía algo exhausto por la carrera que hicieron desde el Coliseo hasta el aeropuerto, esquivando a los fotógrafos y reporteros que ya los esperaban.
Tras ellos se encontraba un enorme ventanal que daba hacia la pista por la cual se veían los aviones despegar y aterrizar cada tanto; cerca de ellos, se encontraba un jet de menor tamaño el locual llevaba una "E" roja grabada en la aleta de la cola.
- Nos veremos en otra ocasión hermanito - dijo Wes extendiendo su mano libre hacia el menor, esperando a que la estrechara - Fue un gusto verte Soul, Espero que después vengas tú de visita.
El joven guadaña lo miro algo extrañado para después cambiar su expresión a una de fastidio y burla.
- Creí haberte dicho: nada de cursilerías ni despedidas sentimentales.
- Crucé los dedos - respondió Burlón el mayor mientras mostraba su mano con los dedos índice y medio cruzados para después soltar una carcajada.
- Idiota - dijo Soul con fastidio, metiendo sus manos en sus bolsillos - Adiós Wes - dijo alzando la voz, enfatizando la palabra "Adiós".
- Tranquilizate Soul. Aunque hablaba en serio. Algún día deberías venir a visitarnos.
Entrego la maleta a su hermano de mala manera, sin contestar a su ofrecimiento; Wes la tomó con algo de trabajo para después dirigirse a la puerta donde una azafata esperaba poder tomar su boleto. Antes de hacerlo, se volvió hacia su hermano nuevamente.
- Aun está en pie mi ofrecimiento Soul - el menor arqueó la ceja - Aún puedes venir conmigo. Sería agradable volver a tenerte en casa, al menos por una temporada.
Su vista estaba posada en el menor mientras que de su ropa sacaba un segundo boleto.
- Es tu elección Soul.
__________________________________________________________________

EscapeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora