Ella Habia apostado mucho, debía ser igual.
Tome mi mochila, saqué un libro, sus ex audífonos y mi cupón.
Perfecto, ganaría cosas geniales.
Que ingenua, repartimos las cartas.
Bien, bien Michi, ganaremos.
Carta tras carta, noté que ella estaba perdida.
Sus ojos sin brillo miraban cada movimiento que daba.
Sonreí, la miré y puse mis cartas en la Mesa era imposible que ganará, solo me faltaban unas cartas para mis cartas fueran perfectas.
—Viciada, he ganado, el juego termino—reí con fuerza.
—El juego aún no acaba—Vi una sonrisa, salir de su rostro.
Tiro sus cartas sobre la mesa dejando ver unas cartas perfectas, eso solo ocurría cada 20 partidas.
Era imposible ella ni siquiera había repartido las cartas
—¡Maldita tramposa!—grité con fuerza.
Tomo mis cosas que gano, ¿Como lo hizo?
Recogió las cartas.
Me dedicó una sonrisa.
Se dirigió a el juego y se quedo allí
Estaba ardiendo en rabia.
La tome por la polera, unos niños nos miraron.
La levante y puse contra la pared.
Al levantarla por la polera se vio su abdomen lleno de cicatrices.
¿Que sucedía con ella?
La miré directamente a los ojos y solté un ''Mierda de viciada, juguemos de nuevo''
Me respondió con una Sonrisa con maldad.
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Coffee & Games
Teen FictionMichelle amaba el café y disfrutaba de ir a su cafetería favorita todos los días a pasar el rato. Antonia amaba Los videojuegos, era su forma de escapar de la realidad, iba a su zona de gaming todo los días. La Cafetería y La Zona de gaming estaban...
