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Kai miro alrededor, sintiendo una gran presión en su pecho. Sabia que algo no andaba bien. Al mirar hacia su pequeño D.O se percato que este intercambiaba miradas con aquel chico detrás del mostrador. Trato de controlar sus celos, no soportaba esta química que había entre ambos. Pero su poca cordura se vio afectada no cuando este sonrió, sino cuando Soo correspondió su sonrisa. Nunca lo había visto siendo amigable con nadie. En ese momento deseo ser aquel chico. Que no daría el por recibir esa sonrisa.

-Soo, vamos a casa.-Dijo el moreno, mientras lo rodeaba con sus brazos.

-Eh.

-Vamos a casa, no encontré nada interesante. Tal vez vuelva luego.

-Mmm, ah..eh.. Esta bien- Expreso apartando la mirada, rompiendo esa mágica conexión con el apuesto chico de resplandecientes ojos cafés.

...

Chanyeol, se sintió estúpido. El era muy guapo, estaba claro que tendría novio. Se cacheteo mentalmente, el era mucho mas guapo que su novio. Ademas, cualquiera daría lo que fuera por salir con el. Decidió olvidar aquella decepción al ver los brazos del moreno rodeando su pequeño cuerpo y atender a aquella chica que llevaba horas frente al mostrador. Al parecer no le importo esperar a que saliera de su trance. Tal vez fue porque tenia otras intenciones a las de comprar un disco. Su numero venia escrito en un pequeño papel, escondido en el pago del CD.

A pesar de querer olvidar la escena de hace un rato, le fue imposible. Aquellos hermosos ojos seguían presentes en su mente. Como era posible que sin una palabra, solo con un gesto. El pudiera robar toda su atención. No importaron sus esfuerzos. Dormir resultaba una tarea sumamente difícil. Se decidió por escuchar un poco de música. Se coloco los cascos y coldplay comenzó a sonar a todo volumen.

A la mañana siguiente, el despertador sonó interrumpiendo el sueño que apenas había logrado conciliar. Al parecer el buen humor no seria su compañero hoy. Tomo una pequeña ducha y en menos de 30 minutos ya estaba listo para irse a la escuela. Resultaba molesto que siendo vacaciones todavía tenían que asistir a las actividades de sus clubs. Cogió su maleta con todas sus cosas y salio de casa.

Cuando llego, se arrepintió inmediatamente. Penso que hubiera sido mejor fingir un refriado y librarse de los duros entrenamientos de Park Yoo Chun. Amaba el fútbol americano pero en esta ocasión prefería estar inscrito en el club de arte o cualquier otro que no lo obligara a correr o siquiera mover un musculo a tal grado de terminar exhausto. Luego de un largo entrenamiento, tomo una ducha. Para su mala suerte el entrenador le pidió entregar unos papeles al parecer importantes al encargado del club de cinematografía, no sabia siquiera que existía tal club. Es lógico razonar que desconocía la ubicación de este. Se dejo guiar por su instinto y tomo un camino desconocido. Se dirigía por un amplio pasillo que parecía no tener fin. Necesitaba una siesta. Estaba agotado y hambriento ademas de perdido. El tener que trabajar hoy le resultaba una mala pasada. Apunto de rendirse e irse, escucho una dulce voz. Era mágica e hipnotizante. No pudo evitar que sus pies siguieran ese camino imaginario. Aquella persona tarareaba una hermosa melodía. Estaba seguro de haberla escuchado antes. Llego a una enorme puerta entre abierta. Y ahí los vio. Esos enormes y preciosos ojos que no se iban de su mente. Accidentalmente, deslizo la puerta hasta que se abrió totalmente. El chico levanto la mirada y lo escaneo por unos largos segundos. Luego solamente alzo una ceja en su dirección. Su cara no expresaba sorpresa. En cambio Chanyeol se encontraba nervioso. No quería que pensara lo peor de el. Que pensara que era una acosador o algo por el estilo.

Sin embargo el solo rió. Y Chanyeol descubrió que le encantaba el sonido de su risa.

...

Es un tonto. Fue el primer pensamiento de D.O al ver a aquel chico con el nerviosismo evidente en su cara. Quien diría que mientras editaba partes que podría usar en su película. Un chico con pequeños ojos cafés entraría irrumpiendo en su pequeño mundo. Trato de ser indiferente pero una grata carcajada salio de su garganta.

-Ehh.. Yo, este.. Estaba buscando.. El club de cinematografía.-Logro formular el chico, mientras rascaba con nerviosismo su nuca.

-Te encuentras en ella.

-Oh.

-...

-Ah si, este..Toma- Tartamudeo mientras le entrego los papeles que llevaba en su mano. Accidentalmente sus dedos tuvieron un pequeño roce. Una descarga eléctrica que recorre todo el cuerpo se hizo presente en ambos.

-Gracias.-Fue lo único que pudo decir.

El solo asintió mientras se encaminaba a la puerta. Cuando estaba a punto de marcharse, se giro hacia al pequeño.

-Por cierto, bonita canción. Ed Sheeran es genial.

Esas palabras provocaron que el calor recorriera las mejillas de D.O. Y sus labios formaran una brillante sonrisa.


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