very bien | starco [fin]

new year, new me

— No director, no entiendo.

— Chico, se supone que tú eres uno de los más inteligentes en esta universidad. ¿Enserio debo repetirlo?

— ¡No, no, no! Pero debe comprender que es extraño, Tom ha sido mi compañero de cuarto por... — contó con sus dedos — ¡4 años! ¿Por qué quiere cambiarlo tan repentinamente? Y encima colocarlo con Janna, pobrecito.

— Marco, mi niño, una excelente estudiante vendrá de intercambio, como mínimo por un año, si es que no decide quedarse. Pensé que sería bueno para ella estar con uno de los mejores de la clase, y bueno para ti socializar con alguien que no sea ese chico Tom y la señorita Ordonia.

— ¿Extranjera?

— ¡Oh sí, sí! Viene de Estados Unidos, y aún está aprendiendo a manejar correctamente su español. Llegará en un par de minutos, y espero que seas gentil con ella.

Marco suspiró y se dejó caer en el respaldo de la silla.

Este sería un largo año.

—————

La rubia miraba asombrada el edificio frente a ella, a través de las puertas de cristal en la entrada podía ver a los universitarios, tal como era ella, hablando los unos con los otros.

— New year, new me (*) — dijo en voz baja, y tomando una gran bocanada de aire, procedió a abrir la puerta de vidrio.

Ups, primer problema del año. Por más que intentara, la puerta no cedía, la pobre chica hacía lo posible, empujando con todas sus fuerzas, pero no parecía querer abrirse.

— ¿Necesitas ayuda con eso? — una chica de cabello blanco, y una mecha de color turquesa, se acercó a ella. Un skate, un casco y un collar con una caracola anaranjada, que a la rubia le pareció "cool", adornaban la figura de la recién llegada.

"Nice style (*)" pensó.

— Si, si, problema es que no puedo abrir puerta — dijo en un acento demasiado marcado. Estaba nerviosa, muy nerviosa.

Era una universidad nueva, con personas nuevas y lo peor de todo, en un país nuevo, lo cual incluía, obviamente, un idioma nuevo. Un idioma que aun no manejaba bien.

— Eres extranjera, ¿No? — la skater le sonrió, logrando que un gran peso cayera de sus hombros — Jackie, Jackie Lynn Thomas — le extendió la mano, la cual la rubia estrechó gustosa en forma de saludo — You know, I was an exchange student once, but I kinda got used to Spanish and stayed here, it won't take you long, don't worry, I've only been here for about 2 years and look at me (*) — se señaló a si misma — ahora soy toda una experta en el arte de hablar español — la rubia solo rio.

— ¿Tú nombre? — ladeo la cabeza, dando a entender que no comprendía a que venía su pregunta — Nunca me diste tu nombre — sonrió nuevamente y, de golpe, la rubia entendió.

— Star, Star Butterfly.

— Star... Nombre peculiar — dijo Jackie, saboreando el nombre — me gusta — dijo finalizando — ¿Entramos?

La rubia asintió y siguió a Jackie por detrás mientras ésta tiraba la puerta contra si misma, abriéndola para ella y para Star.

Se golpeó la cabeza mentalmente y pensó: "God... I didn't have to push the freaking door to the end of the world, I just had to pull it! (*)".