[06/Enero/5017]🔳Parte 02🔳

32 4 0
                                    

Viajamos sobre una maquina de dos ruedas. Ellos lo llaman "motocicleta" , lo cual es completamente nuevo para mi, nunca me habían transportado de esta manera, todos en la ciudad lo hacíamos caminando. Actualmente no existe maquinas de vapor, de vuelo o incluso de aceite o bueno, eso es lo que pensaba hasta que me subí en esta chatarra.

Había dos de esas motocicletas. Supuse que uno era para el gigantón y la otra para la pelirroja de cabello corto. Al ver solamente dos rápido deduje que tenia que compartir en uno. La desición ya estaba hecha en mi mente.

Me sujetaba firmemente de la cintura de la pequeña mujer. No me quería sentar atras  con el sujeto que tenia aspecto de haber asesinado a alguien . Su barba  y el cabello despeinado lo hacían parecer un chico rudo ademas de la vestimenta que traía puesto no ayudaba mucho. Tiene unos enormes agujeros en las rodillas de su pantalon azul oscuro pero su camisa negra de manga corta pareciera estar  intacta, libre de hoyos. No lleva nada para cubrirse de la fría noche a diferencia de sus compañeras. La pelirroja alta lleva una chaqueta encima, vistiendo todo de negro y la pequeña lleva un gran suéter gris encima, no se si así era el estilo de la prenda o le quedaba grande ya que le llegaba hasta la mitad de sus muslos .Lleva un pantalon rojo ajustado que hacia resaltar su silueta pero el sueter no le favorecía mucho haciéndola parecer pequeña.

Algo caracteristico que me llamo mi atención fueron  sus aretes. El de nombre Lexia solo tiene uno en la oreja izquierda , el sujeto llamado Rino tiene una pero entre la ceja del lado izquierdo también, La pequeña de ojos azules  lo tiene en la nariz. Los tres aretes brillan de una tonalidad rojiza, no tan intenso si no de una manera leve que pudieras percatar la presencia de dicho brillo.

Analizo todo eso en el transcurso .

Un poco nervioso por el viaje, me pregunto por donde entraríamos para llegar a la ciudad. La maquina produce mucho ruido  al avanzar y humo que se podría ver a kilometros de distancia, revelando nuestro paradero. Si seguíamos así, a las personas que ellos temen nos podrían localizar pronto. Ese era mi preocupación hasta que el panorama de desierto en padimentación  fue cambiado a un entorno oscuro y metalico, con olor insoportable. Llevando una mano a mi boca, trato de tolerar el peculiar olor. La de ojos azules voltea a ver un poco tal vez al sentir que había aflojado mi agarre. Ella se ríe y me explica que ya estamos adentro de la ciudad , solo que abajo, en el alcantarillado. Lo cual me parecia bien la idea en vista de las circunstancias que nos encontrabamos.

------------------------------------------------

Dos horas fue el tiempo que tuve que soportar la "situación". Al parar la moto, rápido me bajo de ella. Mi estomago comenzaba a sentirse inquieto, solo que esta vez sabia lo que me pasaba.

Hicieron lo mismo la pequeña y el tipo rudo, al bajarse de su "vehículo" .

---Hasta aquí termina el camino--- Dice Rino con una voz ronca y fastidiada.
No entiendo lo que me dice hasta que me lo muestra. Aun estábamos en las sucias alcantarillas , pero arriba de nosotros se encontraba la salida y entrada de la ciudad.

---No te trajimos exactamente a tu hogar--- Dice la pelirroja , encogiéndose de hombros. --- Pero al menos has de reconocer las calles que te dirigen a ella. Es todo lo que pudimos hacer, lo siento.

Trato de dedicarle una sonrisa a la chica por su amable cooperación, ha diferencia de la alta  que se quedo atras y agradezco que no nos acompaño .

---Gracias --- Fue todo lo que tenia que decir.

Subo por las escaleras que hay allí para poder salir al mundo exterior. Cuando empujo el pesado fierro que es usado como una manera de tapar el gran hoyo del alcantarillado, rápido persibo el olor a limpio, fresco y al mismo tiempo el amanecer.

Cuando por fin reconozco mis dominios, bajo la mirada para ver que tan mal se veía mi ropa al estar completamente fuera del oscuro lugar. Como era de esperarse, el blanco en su totalidad ya no estaba. El saco estaba manchado con colores cafés y rojos. Cafés por la mugre que me encontraba y rojos por me había lastimado la bestia por los hombros que aun sigo sin hallarle forma. Mi pantalón también estaba igual de sucio.

Coloco en su sitio el pedazo circular de metal. Aun tenia que ser sigiloso y no queria dejar ninguna evidencia que estuve alli. Me quito el saco para luego sostenerlo en mi antebrazo. Era una opción que tuve que tomar ya que la camisa de abajo no estaba tan mal estado como lo estaba el saco.

Comienzo a caminar primero a casa para después correr. Las calles estaban solas lo cual aprovecho porque no me queria encontrar a ninguna persona.

Al llegar a casa, trato de no hacer algún ruido incluso camino de puntitas. La casa esta oscuras, aun mi madre no se levanta y eso para mi es una buena señal o lo era hasta que las luces se encienden de golpe.

---¿ Y que son estas horas de llegar?--- Escucho el tono de mi madre molesta. --- O mejor dicho ¡¿En donde has estado en estos dos días?!.

---Técnicamente fue un día y medio y ...

--- ¡Aun así! Desapareciste ¿Sabes lo preocupada que estaba?.

Nunca vi a mi madre así.  Siempre ha sido una mujer que guardaba sus emociones pero ahora estaban saliendo a flote. Me fui tentado a decirle la verdad, que desapareci  porque fui atacado por una bestia pero fui salvado por una chica de cabello rojo. Despues recorde que no debía, asi que tenia que mentir. Me odie a mi mismo al saber el significado de esa palabra, "mentir" era una de muchas palabras que habían desaparecido en el vocabulario de la gente y eso era porque habían dejado de hacerlo.

---Yo... lo siento mamá--- Agacho la cabeza para que me fuera facil inventar una excusa. --- Ehud... me invito a una de sus fiestas que organiza su padre después de haber terminado de hacer la encuesta. Yo acepte porque me convenció que lo tomara como una clase de celebración  por haber conseguido por fin un lugar para realizar dicha encuesta. Estando allí tome unas copas demás y me quede a dormir en la casa de Ehud.

Siento la mirada de mi madre, aun sin verla se que lo estaba haciendo. Observando cada gesto o movimiento que hago o digo.

--- ¿Y porque tanto tiempo? Y si realmente fuiste a quedarte a la casa de la familia Beckenflow ¿porque tu ropa se ve de tan mal aspecto?

Trato de reprimir un gesto de sorpresa , eso me delataría en mi mentira. También trato de pensar en una explicación para eso, creo que fue una mala idea en decir que estuve con Ehud, mi madre sabe que por su clase social no permiten que alguien de su casa anden en estas fachas que yo tengo, aunque fuera invitado de honor era imperdonable para el padre de Ehud.

---Bueno... tomé tanto que desperté muy tarde y tenia un dolor de cabeza tan fuerte que no me permitía salir porque ... me molestaba el ruido y el sol.--- Quiero sonar normal sin querer atragantarme con mi propia saliva --- Y sobre lo otro... bueno... ya conoces a Ehud con sus bromas pesadas. Me hizo una, embarrando  de carne cruda sobre mi ropa, tuve que esperar hasta el día siguiente para que su padre no lo notará. Así que... madrugue  para poder llegar a casa y así sin que me dijera nada.

Levanto el rostro esperando que me creyese.
Sostenemos la mirada mi madre y yo. Desafiandome que le diga la verdad pero me trato de convencer que esa es la verdad aunque no lo era. Al final suspira.

--- Para la próxima llama. No te cuesta nada en avisar.

Fatigada, mi madre se da la vuelta para subir al segundo piso e irse a su habitación a descansar. Apenas noto que lleva la bata puesta, debió quedarse toda la noche en la sala esperando mi regreso y eso me deja un gran remordimiento.

Después subo yo también dirigiéndome a mi habitación. En mi caso no era para descansar, lo habia hecho un día y medio por lo que el cansancio no estaba presente . Fue bueno por que me dio el tiempo de asimilarlo todo y escribirlo en una hoja de papel lo que había pasado. Cosa que estoy haciendo justamente ahora.  

White.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora