Quinta alma

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Un profesor:

Hoy habría una feria en la ciudad y una firma de autógrafos y Samanta, una vieja amiga de la universidad me invito con ella y su familia para despedirme ya que me iría junto a otros profesores a unos cursos de evaluación.

Me iría para el medio día, así que eso me daba tiempo de acompañarlos al cine y a la firma de autógrafos, me emocionaba la idea de volver a verla y conocer a su esposo e hijo.

Llegue al cine y estaba esperándolos en una banca cuando una mujer se me acerco.

- ¿Samanta?

Me levante y nos abrazamos.

- Cuanto tiempo. Erick, te presento a mi esposo Jonatán y mi hijo Daniel.

- Oh, es un placer.

- Igual.

Él y yo nos dimos un apretón de mano y luego me agache a la altura del pequeño niño.

- Hola, Daniel. Tu mamá me ha dicho que eres un buen niño.

Parecía tímido.

- Y dime ¿Qué película quieres ver?

Daniel voltio a ver la cartelera y después de verla un rato señalo a una de ellas.

- Buena elección, también tengo ganas de verla.

Fuimos a la taquilla a comprar los boletos mientras Samanta y yo hablábamos de lo que ha pasado estos días hicimos tiempo para que la película empezara.

- Entonces, ¿Por cuánto tiempo te irás?

- Uno o dos meses, eso depende, hay ocasiones que los grupos que dan las conferencias se retrasan.

- Bien, entonces volverás a tiempo.

- ¿A tiempo? ¿Para qué?

- El cumpleaños de Daniel, tenemos planeado invitar a todos los conocidos de Jonatán y míos le ayudara mucho ya que es tímido. Quizá el ver caras nuevas le ayude cuando entre a la escuela.

- Ya veo, le servirá de mucho, créeme te lo digo como amigo y profesor.

Una vez terminada la película, nos dirigimos a la firma de autógrafos. Jonatán parecía muy emocionado con uno de los autores, tanto que hizo una enorme fila. Mi teléfono sonó indicando que debería estar de camino a la estación. Me despedí de Samanta y de su familia.

- Fue un placer, Jonatán, Daniel.

- El placer fue mío, Erick. Espero verle de nuevo.

Daniel se despidió de mí con la mano aun con algo de timidez, le dedique una sonrisa antes de irme.

Llegue a la estación a tiempo, puesto que fui el ultimo en subirme. Ya estaba oscureciendo y supuse que la feria ya habría iniciado.

Ya habíamos partido. Pasamos las afueras de la ciudad y todo estaba tranquilo hasta que una camioneta apareció, no la habíamos visto hasta que estuvo frente a nosotros, no traía luces y venia directo a nosotros, el conductor intento frenar pero la camioneta no disminuyo la velocidad, en un intento de esquivarla hizo un movimiento brusco provocando que el camión perdiera el control y se saliera del camino hacia una cuesta volcándose. Mientras, la camioneta logro seguir sin detenerse.

Lo último que vi fue la camioneta alejarse y después todo se torno oscuro.

Al despertar me encontraba en la entrada de una casa, desconocía todo. Escuche a personas que preguntaban donde estaban y como habían llegado, algo que yo también me preguntaba.

- ¿Qué paso?

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