Eres todo lo que necesito

Capitulo 1

Todos los días me pregunto ¿qué hice para merecer esta vida?
Estoy harta de que todos los días se ha lo mismo, siempre levantarme a las 7:00 de la mañana ¿para qué? Para "trabajar"- o así es como lo llama Rosie-, este maldito "trabajo", yo no quiero esto para mí.
Esta vida de mierda pero aún recuerdo las palabras de mi abuelita " siempre agradece lo que tienes aunque sea poco porque otras personas no tienen nada", sabias palabras,  es cierto.

-vamos Anabel, despierta- siento que me sacuden.

-ya va, solo 5 minutos- dije adormilada.

- nada de 5 minutos, levántate- dijo Rosie.

-está bien, está bien- dije mientras me sacaba la cobija sucia que tenía encima.

- ahora sí apúrate- dijo mientras sonreía y salió de la habitación, la cual compartíamos.

Me senté sobre la cama y observe la habitación en simples palabras era un asco todo estaba regado,aunque intentáramos tenerla lo más ordenada posible ya que siempre llegaba Matt a revisar si no habíamos robado algo del dinero que ganábamos al día.
Me levante y camine hacia el ropero en el cual tenía muy pocas prendas, cogio un short y una blusa de tirantes; me di una ducha rápida, me cambie y peine.
Al salir me encontré a Rosie y a las demás chicas limpiando el lugar en el que "trabajábamos", tome una funda y comencé a recoger vasos y botellas que estaban en el suelo, cuando estaba por la tarima principal me encontré un billete de 20 dólares.
Dios, para nosotras eso es oro ya que en este lugar no puedes tener más dinero del que Jessica nos da.
Lo recogí y guarde en el bolsillo derecho de mi short pero eso sí, tenía que estar precavida ya que si me veían con un billete de esos me lo quitarían.
Cuando regrese a tomar la funda sentí que alguien me jalaba el cabello.

-dame el billete Anabel- esa la asquerosa voz de Matt.

- de que billete hablas- dije mientras seguía guardando vasos en la funda.

- no te hagas la tonta, acabo de ver cómo lo guardabas en tu bolsillo- dijo mientras me miraba.

-claro que no- dije tranquila

-no mientas, dámelo ahora o le diré a Jessica y sabes que será peor.

- para que quieres que te lo de? Acaso es para gastarlo en tus porquerías- dije molesta, siempre era así.

-eso no es de tu incumbencia- dijo con enojo.

-tienes razón, no me incumbe- dije mientras sacaba el billete del bolsillo de mi short.

Se lo entregue y lo recibió con una gran sonrisa, se fue y continúe recogiendo vasos. En cuanto terminamos de limpiar mire la hora y eran las 10:00 de la mañana, me apure y salí a comprar las bebidas ya que era mi turno de surtir la despensa para los clientes.
Fui a una pequeña tienda en la cual Jessica hace los pedidos, retire las bebidas y camine con 4 fundas llenas de botellas- eran muy pesadas, basta con decir que una funda se rompió de lo pesada que estaba, antes que no se dañaron las botellas- camine lo más rápido posible y llegue a la "bodega", así era como le decíamos a donde vivíamos pero los clientes lo conocían como " Desire", este lugar nos había acogido.
No tengo muy claro como llegue a este lugar pero sí que recuerdo a mi abuela y mi tía, ellas se hicieron cargo de mí cuando mi madre murió.
Mi padre, ni siquiera lo conocí pero hasta donde se mi madre era su amante lo sé, sonara malo pero el mundo es así, que le puedo hacer yo además después de todo ella era mi madre; recuerdo que cuando tenía 5 años mi madre me llevó a un parque en el cual había muchos niños corriendo y jugando, yo estaba súper feliz pero mi madre parecía no estarlo ya que discutía con un hombre que ...

-Anabel- dijo Rosie pasando una mano por mi rostro.

-si- dije mientras fijaba mi vista en ella.

- en que piensas?

-nada, mira ya fui por las bebidas- dije mientras le enseñaba las fundas.

- que bien- dijo mientras agarraba las fundas para ponerlas sobre la barra.