"Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas."
Mateo 6:33 Muchos de nosotros hemos pedido a Dios un milagro y a veces, no ocurre al tiempo que queremos y pensamos que Dios no nos escucha o que no va a hacer el milagro y la verdad es que el milagro ocurre en el momento exacto, ni temprano ni tarde, en el momento exacto cuando Dios quiere. Muchas veces nos desesperamos y dejamos de orar y de buscar de Dios, o simplemente queremos un milagro sin ni siquiera orar por eso que esperamos y ese es un error que la mayoría de nosotros cometemos. Cuando obedecemos a Dios y lo ponemos en primer lugar, Él nos concede ese milagro que tanto esperamos si está en su voluntad y si a Él le place. Nunca dejemos de orar, que mientras pase el tiempo, más te conectes con Dios para que ese milagro que tanto esperas pueda llegar. Dios es un Dios real y todo lo que se alinea a su perfecta voluntad Él lo hará.
Aveces tenemos que dejar amistades que no nos acercan a Dios y puede parecer que no tengamos amigos, pero la realidad es que lo que Dios tiene para nosotros es tan grande, que cuando Él quita algo de nuestro camino, Él pone algo mejor y eso es lo que quiero que entiendas, yo he tenido que dejar muchas amistades que me alejaban de Dios, me he sentido solo, pero en un momento, Dios me juntó con personas que más que amigos, son mis hermanos y son una bendición. Por eso debemos esperar en Él y buscar cada vez más de Él.
En mi niñez, fuí víctima de bulliyng, y para evitar que siguieran molestandome, comenzé a escuchar música que no me enseñaba nada bueno, comenzé a decir malas palabras, y me junté con personas que me molestaban y que hoy no están ni estudiando, sin embargo, nunca pude dejar de ser víctima de bulliyng.. Pero Dios llegó y me rescató a tiempo, no lo encontré a Él porqué siempre estuvo ahí, sino que le permití entrar a mi vida y por su gracia fui libre del bulliyng y ahora predico de su amor y su misericordia. Tengo mejores amistades de las que tenía en el pasado y eso es una muestra de que Dios me quito cosas que no me hacían bien y puso cosas maravillosas a mi vida. Todo esto por poner a Dios en primer lugar en mi vida.
Por eso pongamos a Dios primero en todo y Él nos llevará de gloria en gloria, de bendición en bendición. Así que, ¿cómo podemos poner a Dios primero en todo?, ¡muy facil!, podemos poner a Dios en primer lugar en nuestra vida orando antes de un exámen, orando por los que lnos persiguen, orando por su familia, orando por su pareja, orando por todo, siempre teniendo intimidad con el Padre, hablando con Él en un sitio donde nadie te interrumpa, por qué ese tiempo con Él no es negociable. Pidamos a Dios que nos llene de su presencia, ¡que nos falte todo menos Él y no dé más fé y sabiduría de la que tenemos! Sin Él no somos nada. No importa quién seas ni los errores que hayas cometido, Él te ama y está esperandote con los brazos abiertos para que Él pueda manifestarse en nuestra vida plenamente.
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¡Nunca Digas No Puedo!
SpiritualEn este libro encontrarás un mensaje de fe y esperanza para jóvenes. Espero que les llegue al corazón y sean ministrados en el nombre de Jesús.