Por primera vez, soy feliz.

Día 7: Momento Familiar.

9 meses después...

-Nuestro hijo es hermoso... -susurró el albino para no despertar a la pequeña criatura que ese día era bienvenida al mundo.

-Es igual a ti, Atsushi-kun -dijo el castaño con una gran sonrisa.

Por segunda vez en su vida se sentía completo, feliz, realmente feliz, todo eso se lo debía al albino. Observó la hermosa escena, su recién nacido haciendo pucheros, mientras Nakajima sonreía divertido.

"No sólo salvaste mi vida aquella vez en el río, me salvaste de mí mismo.", pensó.

5 años después...

-Papá... -el pequeño niño con su mismo tipo de cabello, gracias a su padre, albino; tironeaba enérgicamente de la gabardina de Dazai.

- ¿Qué ocurre Natsuo-kun? -preguntó tomando a su hijo entre sus brazos.

-Quiero un helado, ¿Puedo comer uno? -pidió.

Un brillo en sus ojos resaltó, recordándole a su amado esposo, que en ese momento se ocupaba de las compras, mientras él cuidaba de su hijo fuera del súper mercado.

-Vayamos por uno. -asintió sin poder negarse a esos adorables ojos bicolor.