Viernes

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El viernes comenzó como cualquier otro día, solo que ahora Kibum despertaba al lado del hombre de sus sueños.

—¿Te sientes bien? —Minho lo abrazó por la espalda dejando varios besos en su rostro.

—Mejor que nunca —Cuando se quiso incorporar un dolor horrible lo invadió— Olvídalo, necesito un doctor.

Minho se comenzó a reír y le dio otro beso antes de levantarse. Se dieron una ducha juntos y caminaron hasta la parada del autobús dónde se despidieron, pero no pasaron ni quince minutos cuando ya estaban con los celulares mandándose mensajes de lo mucho que se extrañaban, cuando Kibum llegó a la estética, sus empleadas corrieron a él pero se detuvieron unos metro antes de abrazarlo.

—Demonios... Sí que se impregno a ti —Minhee parpadeó impresionada.

—Pero no tiene ninguna marca —Qian fue veloz y examinaba a Kibum por todas partes.

—¿Cómo es posible que estén unidos sin un lazo? Yo puedo percibirlo de tan fuerte que es pero no veo nada.

Eso era cierto, Minho lo había querido morder en más de una ocasión pero él era bastante testarudo y no quería que una marca determinara su relación, de todas formas aunque lo quisiera obligar no podría, ya había superado a su naturaleza.

—Nosotros hemos evolucionado —fue lo único que se le ocurrió en el momento. Los tres se estuvieron carcajeando por un buen rato hasta que la puerta del local se abrió y Minho entró corriendo cómo loco buscando a Kibum, todos estaban en shock.

—Hay que quedarnos en casa, pedí el día libre y me lo dieron. En realidad no necesito pedirlo porque soy jefe pero...

Las chicas empujaron a Kibum hasta quedar a unos centímetros de Minho y asintió tomándole la mano.

—Podemos ver una película.

—No quiero hacer eso —entonces Minho se le acercó a la oreja para decir un secreto.

—¡No me esperen y cierren bien cuando se vayan!

Los dos corrieron sin decir otra palabra y atravesaron la calle tomados de la mano.

—¿Estás seguro de lo que dices? —Kibum movía sus piernas lo más rápido que pudo.

—¡Sí! Lo siento muy fuerte y cerca, no creo que el autobús pase a tiempo.

Minho se detuvo un momento y tragó saliva. le dio un beso a su pareja antes de seguir, podía suprimir un poco más su celo, solo el tiempo necesario para llegar al departamento.

—Voy a esposarte a la cama, seguramente te pondrás todo loco.

Kibum comenzó a reír y se dejó llevar por Minho que tenía muchísima prisa, ese día sería muy largo para los dos y así serían todos lo demás ya que ahora podían expresarse sin miedos.

—Lo que tú digas, alfa —el mayor le giñó el ojo. A Kibum le gustaba eso, el mundo debía enterarse de que él rompió los estándares de la sociedad y mandaba a su pareja. Bueno... podía mantenerse en secreto.

The end.

¡Hola!

Dije que no sería muy largo ;)

Pueeeeesssss ¡Gracias por leer! ¡Los amo! <3

Atentamente: blingangel_

No más sumisión - MinKeyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora