Prologo

3 0 0
                                    

"Ya han pasado 10 años desde ese entonces...... 10 años desde que mi hermana no despierta......"

Era una tarde cualquiera como todas las demás, se veía una silueta caminar por la calle con una mochila cargando en su hombro y vistiendo un uniforme escolar. Todo estaba tranquilo por la calle esa tarde, la silueta se detuvo enfrente de una casa y abrió la reja con unas llaves que se encontraban en uno de sus bolsillos. Cerró la reja detrás de ella y pudo escuchar unos pasos corriendo hacia su dirección, bajo su mochila y espero a ver qué era lo que se dirigía hacia ella con una sonrisa.

La puerta de la casa de abrió de golpe y de ella aparecieron un niño, de unos 6 o 7 años de edad, y un perro de tamaño mediano corriendo detrás del niño. La silueta se arrodillo alzando los brazos en dirección hacia el niño esperando que este llegara hasta ella.

-¡Hermana regresaste ya de la escuela!- dijo el niño abrazando a su hermana lo más fuerte que pudo –Monic y yo estábamos sintiéndonos solos ya sin ti

-Lo siento Brandon, me tarde un poco el día de hoy en llegar- dijo ella correspondiendo al abrazo con una gran sonrisa

-¿Dónde estabas Rubí?- dijo el niño lleno de curiosidad

-Estaba con Alejandro, Enrique y Antonio, ya sabes que siempre estoy con ellos- dijo Rubí levantándose y tomando su mochila- hoy...... saldré a casa de Enrique, tenemos que hacer un proyecto urgente para mañana y si no voy ahorita nunca acabaran ellos

-¡Pero acabas de llegar!- dijo el niño haciendo leves rabietas con las manos

-Lo sé, pero sabes que no puedo hacer nada para evitarlo...... solo vine a despedirme de mama para que no se preocupe

-¿Y tu celular? Para eso lo compraron mama y papa

-Este.... –dijo ella en tono tímida y avergonzado –digamos que......

-Se te volvió a olvidar en casa, ¿verdad?- dijo una señora parada enfrente de la puerta de la casa con una expresión un poco seria

-¡Mama! Hola.... no sabía que estabas allí y mucho menos que entraras a mi cuarto- volvió a decir Rubí un poco avergonzada

-Tenía que buscar algo...... -camino hacia Rubí y le entrego algo en las manos, en tono serio le dijo mirándola a los ojos –Si se te vuelve a olvidar en casa te lo confisco otra vez

-Lo siento.... no volverá a pasar mama –dijo Rubí tomando el celular –Bien...... será mejor que me vaya ya o si no se me hará tarde.... –dio media vuelta y cuando estaba a punto de irse sintió que algo la detuvo

-Espera...... yo quiero ir....... No quiero quedarme solo con mama –dijo Brandon abrazando a su hermana desde la parte de atrás

-¡Brandon! Sabes que no puedes ir cuando tu hermana tiene que trabajar en algo de escuela –dijo la mama en tono molesto

-Deja que vaya –dijo Rubí sonriendo –lo cuidare para que no se meta en problemas mama

-Pero Rubí.... –dijo la mama algo preocupada

-No pasa nada mama, yo lo cuidare

Mientras mama e hija platicaban sobre el asunto, no se dieron cuenta que el pequeño se había salido de la casa. No hubiera pasado nada si el niño se quedara afuera de la reja sin nada más que hacer, pero la distracción de algo brillante en medio de la calle le llamo la atención y tubo deseos de agarrarlo. Comenzó a cruzar la calle sin observar primero el tráfico de esta.

Un claxon sonó a lo lejos, Rubí y su mama volteó para ver que sucedía y cuando vieron la escena se sorprendieron tanto que casi no tuvieron tiempo para pensar que deberían hacer.

Un camión estaba a punto de atropellar a Brandon....... La mama solo grito horrorizado cuando lo vio, pero Rubí soltó todo lo que tenía y rápidamente corrió hacia la dirección de su hermano pequeño. Apenas pudo alcanzar a su hermano antes que el camión llegara a su destino, como pudo lo protegió de la mayoría del daño. Pero ella recibió la peor parte, los dos salieron volando de esa posición, Rubí nuca soltó a su hermano en esos momentos, cuando volvieron a tocar suelo todos los presentes fueron a ver qué pasaba.

La ambulancia llego unos minutos después, pero la situación era critica. Brandon solo tuvo unos cuantos rasguños...... pero Rubí tenía graves golpes por todo el cuerpo, hasta en su cabeza, y varias heridas sangraban sin control.

Llevaron a los pequeños al hospital y allí hicieron todo lo posible para parar las hemorragias en las heridas de Rubí. Aunque lo lograron...... ella nunca despertó.

Pasaron días, esos días se convirtieron en meses y luego en años...... Rubí nunca despertó después de ese día........ Y así pasaron 10 años

La Memoria de la Bella DurmienteWhere stories live. Discover now