23/Diciembre/2017

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Ya no me gusta el alcohol ni el cigarro, ahora sólo deseo café, lo supe cuando caminaba a casa después de haber fumado un cigarro; yo estaba sudando y no se si hacía calor pero toque mi piel y estaba fría, luego me sentí aplastada, no quería escribirlo. Pero ya lo hice.
La gente piensa que para ser alguien debes ser algo, los nuevos críticos critican la nueva poesía en base a la vieja, yo admiro las copas de los árboles y sé que eso es arte, somos jóvenes y las estrellas son tan viejas, he intentado leer y no he podido yo podría escribir hasta llegar a su edad; si sólo tuviera el tiempo.
Me sentí aplastada por el mundo; porque es tan grande y mis ojos son tan pequeños, porque quisiera ver la luces de cada ciudad y escuchar una canción en cada estación. Recordé a mi abuela que esta muerta y a mi madre que quiere morir, y a mí. Y no es que yo no tenga ganas de vivir, pero si todo lo contrario. Porque esto de estar viva con los muertos de verdad me está matando, me angustia y me desespera, ellos están esperando que haga algo pero no lo haré. Quiero vivir y vivir para mi no significa hacer. Me siento aturdida, y sí; los días pasan pero no desperdicie el atardecer otra vez, me aterroriza la frivolidad de algunos. Ya no voy a fiestas y ya no tengo amigos porque me hacían sentir más sola. No sé como sea el mundo y la vida a través de sus ojos, pero yo lo veo así: Que el viento atize mis sueños y que la lluvia moje mi conciencia, eso es lo hermoso de vivir, que el silencio se rompa con una carcajada por un comentario estúpido, que no sepa que voy a hacer mañana y que al contrario de desear que no amanezca, tenga la ilusión de ver el sol, dejar de odiar los lunes y dejar esperar una fiesta el viernes, caminar por las calles mientras escucho mi canción favorita. Imaginar que la vida es como la quiero y dejar de querer ser alguien porque ya lo soy. Que me voy a enamorar de verdad de esa persona que este loca como me llaman a mí. Por esa persona no debe tener miedo de ser, hacer o deshacer, y que sonría cada que escuche esa canción, que disfrute de la sencillez. Que considere arte la libertad y aunque no la pueda ver la sepa admirar.
Apesar de que el mundo es grande y mis ojos son pequeños voy a verlo todo, porque aunque parece que no tengo nada, tengo más que muchas personas.

De la cafeína y el silencio.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora