Puede Un Fantasma Enamorarse...!?

Capítulo Dos: El Fantasma Es Un Teme

Mi nombre Uzumaki Naruto, era abogado en el bufet de mi padrino Jiraiya pero esa vida no me gustaba ni tantito mi sueño era ahorrar lo suficiente y largarme, asi lo hice cuando consegui lo necesario, me escape pese a que mi padrino movio cielo, mar y tierra para que no me fuera, me decia que jamás lograria hacer algo que no fuera ser abogado, que ese era mi único talento aparte de devorar 50 tazones de ramen en una sola sentada sin que me doliera el estomago, pero yo les probare que no es cierto que yo si puedo tener el mejor hotel de mundo, solo que no contaba con lo que me pasó

Llamada telefonica en la dirección de la escuela...

Señorita, por favor no puede ser que no me dijeran que este lugar tenia un fantasma -dije serio y enojado-

-Del otro lado-usted no nos dijo que no queria un fantasma ademas el edificio tiene todo lo que nos pidió y ya cobramos su cheque y usted firmo el contrato y en este dice que no hay rembolso lo siento mucho señor Uzumaki, pero no hay nada que se pueda hacer, con forme a la ley ya que usted es abogado sabe a que me refiero

Si lo se, esta bien muchas gracias, buenas tardes- colge y me puse en cuncliyas- no puede ser me deje llevar muy rápido por el encanto de este lugar en fin no hay nada mas que se pueda hacer-acomode una colchoneta inflable y me acoste tapando mi cara con la sabana y me dormí- en momento de la noche empecé a tener frio, y sentía la respiración de alguien no se si sea un sueño o era real solo sentí que después el calor regresaba a mi cuerpo y empezaba a escuchar el sonido de un piano, me levante con miedo pues pensé que serían ladrones pero luego recordé al fantasma y me incorpore para pedirle que me dejara dormir... encendí una lámpara y me dirigí al salón de musica que era donde estaba, con forme me acercaba escuchaba la tonada una melodía triste, llena de dolor y melancolía, me asome por la ranura de la puerta que estaba semi abierta, al asomarme me sorprendí por lo que vi....

Ya que en el banquillo, estaba un joven con uniforme escolar color negro, cabello alborotado de atrás y con  mechones en frente, su piel era color leche sus labios eran rosados y gruesos, ya sin poderme aguantar abrí la puerta

Al parecer lo sorprendi pues dejo de tocar

Oohh perdona, no fue mi intención es que estaba muy bonita la melodía que estabas tocando que no me pude resistir *le dije sonriendo a lo cual el solo me vio con cara de diablo, eh de admitir que me dio miedo* yo soy Naruto, Uzumaki Naruto y tu como te llamas!?*pregunte sin dejar de sonreír*

El solo me vio con  sorpresa no entendía porque, así que me acerque a el si  dejar de ver sus ojos negros eran hermosos no pensé que alguien pudiera tener semejantes ojos y menos estando muerto

Bueno ya que te conozco quiero pedirte disculpas, no sabia que había un fantasma y también perdona por decir que todos eran horribles, eso no se aplica contigo, eres muy atractivo *dije al momento que sentía mis mejillas colorearse* bueno, podemos llevarnos bien de ahora en adelante no crees!?

Eres un ussurotankachi, yo jamás podría llevarme bien contigo y si tanto lamentas el estar aquí entonces lárgate de una maldita vez *dijo serio*

Eso me gustaría créeme pero no puedo, todos mis ahorros estáran invertidos aquí, tanto en la compra de materiales como en la compra del lugar *dije bajando la mirada*

Entonces regresa a trabajar en donde sea *dijo con fastidio*

*lo miré* No puedo hacer eso, es algo que jamás haré... dije que no regresaría y lo cumpliré te guste o no te guste, yo me quedare así que tienes de dos sopas, aprender a convivir conmigo o irte al cielo o al infierno *dije serio y decidido a no dar marcha atrás*

Eres un Dobe, pero atente a las consecuencias, te lo pedí por las buenas,  ahora será por las malas *dijo serio*

No puede ser que siendo tan atractivo, tengas actitud del demonio, teme *dije cruzandome de brazos*