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Cuando me levante, recogí todas mis cosas de la casa de mi tía y me fui a mi casa, cuando llegue, mi madre me recibió, y me dio el desayuno, después beso mi frente y se fue. Pase todo el día en casa, subía y bajaba las escaleras para dejar quitarme el aburrimiento que sufría, pero que podía yo hacer, había decidido quedarme todo ese día, en el momento en que subí, por decima cuarta vez, me asome por la ventana, y vi la vida pasar, cuando de repente una piedra se estrello contra la ventana y termino rompiéndose en mil pedazos, los vidrios cayeron sobre mis manos y cara, quise ver quien había sido, pero no vi a nadie, y entonces vi sangre, fui al baño, y me vi al espejo, solo tuve una pequeña cortada en la frente, y me la cure, y mis manos, mis manos tenían cortadas, y desprendían mucha sangre, intente curarlas con algunas cosas que tenía en el botiquín, pero no sirvió de mucho, entonces opte por llamar a mi madre, ella se asusto, y regreso a casa lo antes posible y me llevo al hospital, una vez ahí, me tomaron tres punto en cada herida, luego las vendaron, y la herida de la frente le cogieron dos puntos, una vez que el doctor termino con ese martirio, converso con mi mamá, y le dio una receta médica de unos antibióticos que debía tomar, ella le dio las gracias y nos fuimos, una vez en el automóvil, ella habló -¿Quién hizo esto?- ella me dijo, su voz sonaba temblorosa y a punto de quebrarse-No mamá no lo sé, no me fije en la persona que lo hizo, todo fue muy rápido.-¿Estás segura? Sabes que puedes confiar en mi ¿verdad?-La mire por un rato, para ver sus expresiones y le dije-Sabes que si lo supiera y te lo diría.-Ella me miro por un rato y luego paso su mirada al frente ya que estaba conduciendo. Al llegar a casa, inmediatamente baje del auto, y fui a mi cuarto, una vez allí, cerré la puerta y me acosté en mi cama a mirar el techo, no quise saber sobre nada más, entonces me dormí.

Al día siguiente el despertador hizo su trabajo, en el momento en el cual ya estuve lista, baje a por mí mochila, y mi madre me miro con extrañeza, y me dijo ¿Qué crees que haces?- Yo la mire y le dije- Prepararme para la escuela, supongo. Hoy no iras a la escuela, te quedaras en casa, y descansaras. –Mamá, no quiero quedarme en casa, es muy aburrido, a demás me retrasare en mis materias, eso quiere decir que me tendré que poner al día, sabes que es un gran problema, ¿no?-Lo sé, pero debes saber también que no te encuentras bien como para que regreses al colegio.-Vale…-dije al final, subí y espere a que ella se fuera, en ese momento, en ese preciso momento, baje a toda velocidad, tome mi mochila, y me fui, camine lo más rápido que pude hacia el colegio, cuando llegue, ya todos habían entrado a sus respectivos salones, entonces, corrí al mío, cuando entre no estaba el maestro, y todas las miradas de mis compañeros se posaron en mi, cuando estaba caminando para tomar asiento Tian me dijo-¡Buuuenos días Vaquita! ¿Cómo has estado? al parecer ya te marcaron-se refería a las cortadas que tenía en varios sectores de mi cuerpo, y ahí me di cuenta que ella había tenido algo que ver con todo eso.