1: Extraño despertar

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¿Por qué seguía bajando las escaleras tan aprisa si ya nadie corría a su alrededor? No es que los demás no pareciesen preocupados o aterrados ante el inminente ataque, sino que ya ni siquiera aparecían ante su vista. Podía notar como su pulso se aceleraba con cada escalón que descendía en aquel perpetuo recorrido, no ya por exaltación o cansancio, sino por desconcierto. Gruesas gotas de sudor frío descendían por su frente erizando los pocos vellos que aún conservaba su piel blanquecina y pura. Al intentar secárselas con el dorso de la mano, sin apartar la vista del suelo para no caer, estas desaparecían sin llegar a humedecerle siquiera los dedos. Se detuvo en cuanto fue capaz de decidir afrontar la extraña situación que vivía una y otra vez sin descanso. Levantando la barbilla después de un largo tiempo sin hacerlo, la sangre volvió a recorrer con normalidad las venas de su cabeza y un leve mareo la hizo agarrarse con mayor fuerza a la barandilla, transparente como el diamante, que tenía a su izquierda.

- ¿¡Dónde estáis!? – cuestionó intentando elevar la voz por el pequeño hueco que dejaba la escalera entre un pasillo y el otro.

La pregunta rebotó contra las desiertas paredes y le devolvió el eco de su propia voz aún con mayor intensidad que la que ella había utilizado. ¿A qué venía tanto esfuerzo en descender cuando nadie la seguía? ¿A qué venía tal exaltación cuando nadie la acompañaba? El temor por no abandonar la sede a tiempo casi había desaparecido. El ruido de puertas metálicas y gruesas amenazando con dejarles allí lapidados por mucho tiempo ya no parecía ser un riesgo real. Incluso las escaleras que debían ser elevadoras y fugaces permanecían estáticas.

Los recuerdos comenzaron a diluirse en su cabeza y se entremezclaron con su realidad. Recordaba perfectamente haber abandonado la Sala del Arca tras recibir la explicación del profesor y que todas las alarmas hubiesen saltado. También sabía que cuando comenzó a descender, las escaleras avanzaban sus pasos a la velocidad de la luz mientras evitaban más y más puertas. ¿Por qué ahora no la rodeaba nadie? Casi pudo sentir la mano de Jules sosteniéndola con fuerza y tirando de ella hacia adelante, dirigiéndola hacia la luz y evitando aquellos cegadores y desagradables destellos verdes de emergencia. Ahora volvían a cegarla sin dejarle mirar más allá de la pared que tenía enfrente. No veía con claridad y la sensación de la piel de Jules rozando la suya había vuelto a desaparecer. Todo era demasiado extraño.

En un intento por resolver el misterio que la rodeaba y del que comenzaba a dudar, sacó la cabeza por el hueco central de las escaleras y estas no parecían terminar nunca. Ni por arriba, ni por abajo. Estaba en el centro de un descenso infinito, cegador y solitario. El más absoluto silencio que la había acompañado desde que decidió detenerse comenzó ahora a convertirse en un pitido agudo y ensordecedor que la obligó a taparse los oídos. Apenas podía mantener los ojos abiertos y el infierno más cruel le pareció estar acercándosele por la espalda.

- Esto no es real... esto no es real – repetía en su cabeza, con las manos presionando con fuerza sus pequeñas orejas sobre su larga melena rubia.

Su propio poder de convicción la fue alejando de aquel sonido y de las intermitentes luces de emergencia que seguía siendo capaz de percibir a través de sus párpados y la fue trayendo hacia la cruda realidad una vez más.

Como si de una revelación se tratase, sus ojos comenzaron a desplegarse con una pesadez que jamás antes había sentido. La sensación de su pensamiento ahora era diferente. Ahora sentía de verdad. Respiraba de verdad. Vivía de verdad. Centrando toda su voluntad en los músculos faciales, fue capaz de entreabrir un par de milímetros los ojos y ser consciente del más absoluto abandono en que se encontraba. No era la primera vez que había conseguido salir de aquel profundo sueño que la llevaba siempre a querer huir con desenfreno de la sede universal, en la que algo que no conseguía recordar, la había hecho desaparecer de su vida sínul común.

Génesis y los enigmas del pasadoWhere stories live. Discover now