Capitulo 6

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Sentía que se habia vuelto una rutina, en realidad mi vida era una rutina sin sentido ni proposito que había cambiado gracias a ella.

Las emociones que experimentaba iban desde una alegria cegadora hasta un miedo sin causa aparente que me sacó de mi realidad por casi un mes.

Algo que no me aburría de mi rutina era cuestionar. Cuestionar el clima, la gente, la vida, hasta la razón por la cual me cuestiono, y que haya salido de mi realidad no cambiaba eso.

Llegó otro mensaje y una enorme preocupación con un sin fin de preguntas llegaron a mí. No tuve que preguntarle nada para darme cuenta que no estaba bien, si no fuera por el maquillaje ella resaltaria por lo pálida que estaba.

Ese mensaje me dio mala pinta cuando llegó y por un momento estuve segura de que iba a conseguir una respuesta, pero cuando la ví mis palabras murieron en mi garganta.

Tenía miedo otra vez, siempre que nos veíamos recordaba lo que había pasado en ese parque frente a mi casa y me frenaba. No podía soportar la idea de ver todas sus emociones florecer y caer como lágrimas por sus mejillas.

Como ya he dicho cuestionar es una de las cosas que no cambian en mí y esta situación fue el momento perfecto para empezar, hasta que ella tomó mi brazo y corrió sacándome de la entrada de mi casa. En ese momento todo rastro de miedo y duda desaparecieron.

Sucedió lo mismo que los días anteriores pero eso estaba bien para mí. Su alegría era contagiosa y me distrajo de la realidad, pero la sentía débil. Al finalizar la tarde ella me dió un papel que decía que la vea la mañana siguiente y luego me abrazó del cuello... quería llorar, no sé por qué pero se me llenaron los ojos de lágrimas al igual que a ella, no quería que ese abrazo terminara, pero lo hizo y sentí que la perdí. Finalmente ella se fue. Pude sentir el viento de la noche secar las lágrimas de mis mejillas.

" Para Ti "Donde viven las historias. Descúbrelo ahora