De niño, cada noche sin falta, veía una luciérnaga roja flotando por la azotea de mi vecino. La maldita luciérnaga se desplazaba por el aire, con toda la libertad del vuelo, burlándose de la gravedad, solo por que podía volar.
Mi vecino me contó un día, de un amor al cual amo demasiado, por alguna razón ese amor lo abandonó.
Recuerdo que mi vecino dijo que por las noches el lloraba en la azotea mientras la recordaba, yo, seguía sin saber ¿por qué la luciérnaga era de color rojo?, y seguía sin saber ¿por qué cada noche sin falta la luciérnaga roja lloraba con el?.
Lo comprendí después de una hermosa y dolorosa experiencia.
El amor que yo tenía también me abandono, ahora mi vecino se pregunta: ¿por que la luciérnaga de mi azotea es roja? Y ¿por qué cada noche sin falta esta ahí?.
—J.Stalin HE.
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La luciérnaga roja.
PoesiaEste es un pequeño escrito, de los que suelo hacer cuando hay mas que inspiración de por medio. No soy un buen escritor,pero las ganas de redactar están siempre presentes. La luciérnaga roja, es, nada mas y nada menos que: la pequeña llama de...
