Capítulo 03: Bajo Amenaza

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Dentro del Templo purificación situado en el país Arcanister, se daba una conversación entre dos seres misteriosos

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Dentro del Templo purificación situado en el país Arcanister, se daba una conversación entre dos seres misteriosos. La oscuridad cubría sus rostros, pero era claro que se trataba de un humano y un ser siniestro y de gran tamaño.
──Tienes que deshacerte de ese chico junto al lince entrometido, no pueden seguir metiendo sus narices aún mas──Manifestó con ira el ser siniestro.
──No se preocupe, el trabajo se realizara con total eficacia que quedara satisfecho con el resultado──Menciono el hombre.
──Espero que sea así, a los dos nos conviene mucho──Dijo con algo de debilidad.
Joe despertó, se levantó de su cama, tallo sus ojos para que estos le respondieran y se dirigió al baño para lavarse la cara.
──  ¡Ya no más sueños como estos, me agotan! ── Dijo Joe.
Minutos después partió hacia la universidad, llego al aula de clases y tomo su lugar; somnoliento, coloco su cabeza en la raqueta del pupitre para descansar un poco más. Pasaron cinco minutos y eso fue suficiente para que lograra transportarse a aquel mundo extraño.
── ¿De nuevo aquí? ──Se cuestionó
──Te gusta aparecer y desaparecer cuando te da la gana──Dijo Pharomachrus
── ¡Ya no debo estar aquí! ¡Quiero irme, despierta, despierta! ──Insistió el chico.
Mientras tanto en el salón de clases de Joe, apareció la maestra que imparte la materia y el seguía sin reaccionar.
── ¡Muy buenos días tengan todos ustedes chicos! ──Saludo la profesora.
Joe estaba por vivir un mal momento si no despertaba del sueño muy vivido que tenía.
── ¡Carajo! ──Maldijo lleno de rabia
──Tranquilo Joe, concéntrate, sé que en estos momentos no puedes permanecer aquí, habrá otra ocasión──Dijo esperanzado Lynx.
La profesora ya casi le estaba gritando a Joe para que se despertara. Hasta sus compañeros le movían para que respondiera, pero nada.
── ¡Jovencito, se está comportando rebeldemente! ──Dijo convencida de que le jugaba una broma.
── ¡Lo siento! ──Respondió apenado ante la situación──No me siento bien, ¿Puedo ir a la enfermería?
Dieron la una, y Joe ya no tenía más clases así que decidió irse de una vez a su casa. Cuando llego le pidió a su madre que le preparara una botana, y el comenzó  a ver la tv para no quedarse dormido.
──Debo seguir despierto, no quiero volver a ese lugar jamás──Lo dijo cerrando poco a poco los ojos, pero se dio una abofeteada en las mejillas para no dormir── ¡Esto es tan absurdo!
Mónica termino de prepararle un tentempié, quería aprovechar el momento para charlar con él.
──Te veo algo desesperado hijo, ¿Te sientes bien? ──Pregunto Mónica
──De maravilla mujer, gracias por el aperitivo──Contesto Joe de una manera sarcástica.
En Arcanister, Lynx y Pharomachrus platicaban armoniosamente sobre experiencias vividas. Resultaron muy afines, haciendo que poco a poco su amistad comenzara.
──Entonces tu estas ayudando a la reina Nepherite para terminar con el mal que asecha en Arcanister──Dijo el ave
──Si amigo, y Joe es el elegido para que juntos podamos liberarla de las garras de ese malévolo ser──Aseguro con toda valentía──Ella está encerrada en una jaula de energía que se sitúa en el templo purificación
──Todos Imaginábamos que ella ya no seguía con vida, ¡qué bueno es saber que no es así! ──Denotando emoción al saber la verdad──Entonces yo también puedo hacer algo para cambiar las cosas.
Joe tomo su guitarra y comenzó a tocar, se encontraba desconcentrado y al darse cuenta de que no lo estaba haciendo bien, la coloco en donde pertenece y mejor se puso a escribir todo lo que se le venía a la mente.
── ¡Diablos, no puedo hacer nada bien por qué solo estoy pensando en ese maldito lugar junto a todas sus criaturas fastidiosas! ──Dijo con enfado.
De pronto el teléfono celular de Joe comenzó a vibrar, le había llegado un mensaje de voz de parte de un número muy extraño. Tomo su celular y reviso el mensaje.
──Nada de lo que has vivido en Arcanister es una mentira──Mencionaba el mensaje de voz grabado aparentemente por una mujer──Te doy un consejo, toma las cosas con calma ya que tu aventura recién comienza.
── ¡Ahora resulta que me comenzaran a llegar mensajes raros que envía algún desconocido que sabe sobre mis sueños! ──Dijo seriamente molesto.
Joe elimino el mensaje y seguido de eso apago su celular para ya no tener que estar viendo esos recibimientos. Fue a tomar una ducha, terminando decidió salir a caminar un poco y en ese momento se encontró a un amigo al cual ya muy poco le hablaba.
──Hola, que genial verte por aquí──Dijo el amigo de Joe.
──Pues estamos en un parque, que podrías esperar──Respondió mientras se acomodaba el pelo que el aire había despeinado.
──Tenemos tanto tiempo sin dirigirnos la palabra, que ya hasta parecemos dos extraños──.En realidad Joe no se encontraba muy emocionado con el encuentro de su amigo Sebastián. De hecho fue algo cortante e insinuoso para que la charla terminara y cada quien tomara su camino.
──Tengo cosas por hacer sabes, tal vez después tengamos oportunidad de platicar mas──Dijo Joe finalizando la conversación.
──Pues estamos en la misma universidad, allá te veo──Se mostró con descontento el chico.
Joe sentía algo de pena por lo que había hecho, se compró un chocolate en un kiosco y regreso a su casa para terminar la tarea.
──Listo, ya acabe todo lo que tenía que hacer hoy, bueno eso creo── Se acomodó en la cama para tratar de dormir bien── ¡Nada de sueños tontos por esta noche!
Cerró los ojos y consiguió quedarse dormido como un tronco. Todo continuaba normal, hasta que apareció en ese lugar nuevamente.
──Ya no pienso enfadarme más, lo único que hare es perder el tiempo aquí──Dijo resignado ante el momento── ¿Y ahora donde te encuentras lince hablador que sabe mucho?
──Muy cerca de ti, junto a Pharomachrus──Contesto riéndose discretamente──Lynx le dio el Power Harvester había olvidado Joe para que lo utilizara.
──Te lo puedes llevar──Menciono Lynx.
──Te burlas de mí, además dudas de mi inteligencia, ja… ok no, eso no es posible amiguito──Guardando el arma para no perderla.
──Compruébalo cuando despiertes esta mañana──Aludió el lince──Por lo pronto hay muchas cosas por hacer, un enemigo al cual hay que derrotar.
Joe siguió a las criaturas con preocupación, tenía algunas dudas en su cabeza que quería preguntarle al lince Ibérico.
── ¿Puedo morir en este lugar? ──Preguntándole.
──Puede ser, pero antes de que suceda eso nosotros daremos la vida por ti──Contesto con tristeza.
Pharomachrus voló muy alto para ver si había algún enemigo cerca y descubrió que algunas bestias se encontraban cerca. Alerto a Joe y a Lynx para esconderse de las criaturas dentro de un hoyo de la tierra y así lograr no ser descubiertos.
──Desde la aparición del ave fénix han salido más criaturas de este tipo que ponen en peligro al bosque──Dijo angustiado Lynx.
──Tal vez alguien está provocándolo── Sospecho el ave.
De nueva cuenta se escucharon balazos desde lo lejos y esto puso en alarma a los habitantes del bosque Alalá.
Desgraciadamente no solo esto ocurría, también apareció una jauría de perros con aspecto bestial y horrorizante, eran más de cinco y venían con el objetivo de causar destrucción en el bosque.
── ¿De qué modo lograron entrar? ──Se cuestionó Pharomachrus── ¡Ellos pertenecen a la aldea infernal!
──Somos la jauría Demonio y venimos a terminar con ese chico entrometido──Menciono uno de los perros Demonio.
Lynx y compañía trataron de no hacer ruido pero era demasiado tarde.      




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