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10 años antes.

subían las escaleras de su lugar favorito sobre la tierra. era la casa del árbol de isak. estaba adecuada al gusto del menor, el techo era de vidrio, ya que amaba subir en medio de la noche y ver las estrellas.

even siempre lo acompañaba, no podía dejar a su mejor amigo solo en esas aventuras. le parecía divertido aprender sobre las estrellas, todo gracias a isak.

isak tenía el cabello algo largo, pequeños rizos se formaban en las puntas rubias; a even le parecía bonito su cabello. en cambio, el cabello del mayor era de un rubio platinado, aunque se estaba oscureciendo poco a poco. isak amaba los ojos azules de even, decía que era como ver las estrellas reflejadas en el océano.

"isak."

"¿hum?"-el menor seguía acomodando sus mantas, linternas y libros para cuando el cielo estuviera de un azul oscuro con muchos puntos blancos.

"prométeme algo."

"¿qué cosa, even?"

"siempre seremos mejores amigos."

la sonrisa que se formaba en los labios delgaditos del pequeño rubio era muy tierna. se acercó a él con su dedo meñique estirado y lo enlazó con el de even.

"prometo siempre ser tu mejor amigo,"-no borraba su pequeña sonrisa mientras miraba directamente esos bonitos ojos azules brillantes-"sin importar la edad que tengamos, o gustos, o miedos. siempre seré tu mejor amigo sin importar nada."

"también prometo ser tu mejor amigo para siempre, y si llego a ser un tonto cuando crezca, prometo no cambiar nuestra amistad por nada ni nadie."

"¿even e isak contra el mundo?"

"even e isak contra todo lo que llegue a pasar."

cerraron su promesa con una linda sonrisa, se tumbaron en el suelo de la casa del árbol mirando las estrellas que estaban apareciendo poco a poco, isak tenía un libro de astronomía sobre su pecho, estaba abierto en la página de las constelaciones, even tenía una linterna para poder leer.

"¡mira, mira, ahí está perseo!"-isak sonreía emocionado al haber encontrado una constelación, even trataba de encontrarla sin mucho éxito-"mira, así está en el libro, ¿ves? ahora búscala es el cielo... está a simple vista, lo prometo."

"creo... creo que la encontré."

"es muy bonita."

los dos rubios se quedaron viendo la constelación. estaban felices; entrelazaban sus manos como siempre hacían cuando les gustaba—o asustaba—algo.

"¿isak?"

"¿sí, evy?"

even sonrió al oír su apodo favorito, le parecía muy tierno. la única persona que tenía el derecho de llamarlo «evy» era isak-"¿sabes el mito, o historia, o lo que sea de esa constelación?"

"creo que sí."

"¿cuál es?"

"bueno, en éstas épocas del año hay una lluvia de estrellas, conocidas como perseidas. se les llama así porque parece como si salieran de la constelación de perseo, pero es pura coincidencia."-isak sonreía, amaba cuando le preguntaban sobre las estrellas o cualquier tema relacionado al universo-"en fin, según muchos mitos, perseo fue un gran héroe; hijo del dios zeus y la mortal dánae. cumplió muchas misiones, era aliado de atenea, y se dice que cuando murió, la diosa lo mandó al cielo, y lo convirtió en una constelación para que viviera eternamente. al igual que andrómeda, esposa de perseo. estoy seguro que convertirse en estrellas, y como tal, en constelación, debe ser un gran honor."

"¿te gusta pensar que cuando mueras serás una constelación o una estrella?"

"quiero ser una constelación, pero tener a alguien junto a mí; así como perseo tiene a andrómeda cerca de él."

"seremos constelaciones. nosotros dos."

isak volteó a mirar a su mejor amigo, sonrió. even sabía muy bien que el menor se alegraba muchísimo cuando él se interesaba por sus gustos.

"seremos una sola constelación."-isak lo miraba seguro de lo que hablaba, hasta que su expresión se convirtió en una mueca-"aunque, para serte sincero, no pienso en lo que me pasará cuando muera... sólo espero que cuando eso pase, me convierta en estrella."

volvieron a mirar el cielo. las estrellas brillaban más que nunca. el menor cerró sus ojos, se sentía en paz y muy tranquilo.

"¿isak?"

"¿sí?"

"la lluvia de estrellas que dijiste, uh, perseidas... ¿parecen estrellas fugaces?"

"sí, ¿por qué?"

"creo que está ocurriendo."

y así era. parecían estrellas fugaces, isak apretó la mano de even, al fin podía presenciar su más preciada lluvia de perseidas; podía verlas con su persona favorita en todo el mundo.

"esto, definitivamente, nunca lo voy a olvidar. gracias, evy."

"gracias a ti, isak."

los dos chicos se quedaron presenciando aquella maravilla, sus manos entrelazadas combinado con la emoción y felicidad que sentían era la mejor sensación que habían vivido.

todas sus promesas, su amistad, sus risas compartidas nunca fueron en vano; y era cierto, ninguno de los dos olvidaría ese día.

couple of kids ✦ evakDonde viven las historias. Descúbrelo ahora