¡Déjame Leer! /Yaoi/

"1"

"Otro día más"

Llegue a casa cansado y golpeado. Moretones, cortadas, ya se había vuelto algo normal en mi vida. Mis padres se encontraban en el salón hablando por teléfono en otros idiomas; no notaron mi presencia, era como si no existiera, les daba igual en que estado regresaba.

Mi Madre siempre trae vestidos provocativos, la vez que le pregunté por qué, me contestó que así podía hacer los tratos más fáciles. Mi padre tiene un aura de terror, a mi no me afecta en lo absoluto pero he oído que a otras personas si.

Subí a mi habitación, no sin antes sacar algo de comida del Refrigerador como siempre, se encontraba lleno.

La casa era bastante grande ya que tenía 5 pisos, 3 patios, 10 habitaciones, 6 baños y 3 de ellos con regadera, una piscina, y muchos, pero muchos guarda espaldas. Alrededor de la casa se encontraba un alambrado dorado, que nos cuidaba de los persistentes y frecuentres visitas de las personas que nos odian.

Solo me odian por ser hijo de las personas que han destrosado sus familias, ese no es asunto mío.

Tome un libro de una de las muchas repisas que tenía en mi cuarto. Este era mi libro favorito, se trataba de Física, mi materia favorita.

En ese momento me llama Daniel, mi mejor amigo, tal parece que tiene un sensor que detecta cuando voy a leer, y cuando estoy con él me interrumpe cada momento.

Daniel es un chico energético, siempre quiere salir a algún lado a pasar el rato con sus amigos,que son Marco, Ángel, Jorge y yo.

Yo al contrario, evitaba juntarme con alguien que no fuera unos de esos 4, ya que la mayoría trataban de matarme, ¿Tan despreciable soy? Pero no, mis amigos me protegían, a su modo, pero lo hacían.

-¿Qué pasa? -contesto fríamente y con fastidio, seguramente me pedirá los trabajos y la guía de física de hoy, ya que el no vino a la escuela.

-Bueno... ¿Te gustaría venir a mi casa, Marco me dijo que mañana habrá un examen... y me preguntaba si... -dice entre cortado esto último.

-Bien... Te ayudaré a estudiar. -digo aceptando la propuesta que aún no mencionaba, era obvio que diría eso, a veces pienso que solo me utiliza. Pero bueno... No me quejo, es el único amigo que tengo desde que tengo memoria, los demás se han acercado hace poco, Daniel se ha quedado a mi lado en todo momento... pidiéndome favores pero de algún modo me protegía más que los demás.

Después de eso colgué y me dirigí al armario, arriba de mi ropa hay una caja con vendas y medicamentos; saco unas benditas y Pomada para el dolor,

Salgo de casa sin avisarle a mis padres, ya era de noche así que con más razón no notarian mi salida.

-Sr. Hitfroe, ¿a donde irá? -preguntó el jefe de seguridad. Mientras me miraba salir de casa.

-Iré con un amigo, no necesito guarda espaldas, iré con cuidado.-digo dándole una sonrisa falsa mientras tomo el picaporte y comienzo a abrir dicha puerta.

-¿Trae su señal? -me pregunta con la misma expresión que antes.

La señal es un pequeño control que un científico creó hace tiempo para nuestra familia de Mafiosos, en él hay un botón rojo que se debe apretar en caso de que estemos en peligro, y los muchos guarda espaldas vendrán a ayudarnos con la ubicación que les muestra a ellos.

-Si lo tengo, y por favor, Llámame Nathan, Patrick. -digo sonriendome maliciosamente.

-Sabe que no puedo. -dice después de unos segundos en silencio.