Llevaba varias semanas en Barcelona, sin saber nada de nadie, ni de Álvaro, ni de Dani, ni siquiera de Tryan, era solo yo
Estaba en la cama de la habitación del hotel cuando recibí una llamada de un número privado
- ¿Diga? - pregunté
- Clara al fin, soy Magi te acordarás de mí supongo -
- Si si - afirmé - ¿Qué quieres? -
- Álvaro lleva semanas sin aparecer por la discográfica, ni siquiera responde al teléfono, pensé que tú sabrías algo
- No... Yo... No sé nada, lo siento - colgué la llamada
Cómo que Álvaro estaba desaparecido, ¿donde coño estaría? Sé que lo hice mal cuando me besé con Dani, pero me alejé para que él fuera más feliz, no un fugitivo
Me tiré en la cama y al abrir mi bolso encontré la dirección del gimnasio de Diego, no me lo pensé dos veces y fui a hacerle una visita. Desde la misma estación se podía ver, entré y una joven recepcionista me atendió
- Hola estaba buscando a Diego el dueño - dije amablemente
- ¿El motivo? - preguntó ella
- Vengo de visita, es un amigo -
La chica me señaló un pasillo enorne y me indicó que en la última sala le encontraría. Estaba frente a la puerta de aquella sala, me armé de valor y la golpeé dos veces
- Adelante - dijo él - ¡Clara! No esperaba que me visitases hoy, de haberlo sabido habría recogido todo un poco
- No te preocupes - contesté observando la pila de papeles que tenía sobre la mesa
- ¿Qué tal por Barcelona? - preguntó él
- Pues es una ciudad realmente bonita, me está encantando pero añoro pequeños rincones de Madrid - sonreí
- Bueno mujer, todo es acostumbrarse - sonrió él también
Su sonrisa era tan perfecta y tan elegante...Sus ojos azules me volvían loca, tanto que me mordí el labio y el lo notó por lo que me ruboricé al instante, él se acercó a mí, me agarró de la cintura y retirándome un mechón de pelo me susurró en el oído
- ¿Qué te ocurre? - preguntó en un tono terriblemente sexy lo que provocó que mis piernas empezasen a flaquear
- Na... Na nada - tartamudeé tratando contener la respiración
- Clara porfavor - noté como se mordió el labio - no huyas de lo que sientes
- No huyo, pero creo que deberia irme porque si... - dije retrocediendo unos pasos
Pero Diego al ver mis intenciones avanzó provocando que me quedase pegada a la pared sin escapatoria ninguna y casi sin aliento buscando sus labios que no tardaron en fundirse con los mios, su boca se fue deslizando por mi cuello, estaba muy excitada, no podía pararle hasta que entró la recepcionista por la puerta y Diego se separó rápidamente
- ¡Traigo un paquete! - exclamó ella y acto seguido alucinó con la escena que se había encontrado - Lo siento Diego ya me voy
- Ya nos ibamos nosotros también, no te preocupes María -
Salimos de aquel gimnasio de la mano, tengo que reconocer que lo que pasó en su despacho fue bastante raro pero me había quedado con ganas de más, asi que lo besé en la mismisima puerta
Clara - escuché mi nombre
Al girarme mis ojos se abrieron y probablemente se iluminaron, era Álvaro, no me lo podía ni creer, me lancé a sus brazos pero le noté bastante distante
- ¿Qué haces aquí? - pregunté sorprendida aún
- Necesitaba verte - hizo una pausa y miró de arriba a abajo a Diego - pero veo que tú a mí no tanto
Me giré y me acerqué a Diego
- Luego te lo explico todo - dije
Él asintió y se fue a paso rápido, cuando se fue vi a Álvaro sonreir, quizás porque ya no estaba Diego, le volví a abrazar con más fuerza que antes y él esta vez me devolvió el abrazo
- Tienes a todos preocupados - dije seria
- Lo sé, pero estos días no tenía fuerzas para seguir con mi vida de antes
- Siento no haberte llamado ni escrito un SMS, pensé que sería peor pero ningún día he dejado de pensar en ti - dije
- Bueno... Te he visto muy acaramelada con el guaperas ese, ya me explicarás -
Nos dirigimos al hotel en el que yo estaba alojada y le invité a quedarse en mi habitación, se instaló rápido y al ser bastante tarde se quedó en unos boxers negros y se dormió en cuestión de segundos. Le observé y solo pude derretirme al ver la calma que desprendía
Una lágrima se asomó por mi mejilla al pensar en el daño que le había causado a él, a Dani, a Tryan, incluso ahora a Diego, me levanté de la cama tratando de no hacer ruido para limipiarme las lágrimas pero el suelo crujió despertando a Álvaro, al verme mal se levantó corriendo y me abrazó por la espalda
- ¿Sabes? Cuando lloras estás muy fea - besó mi mejilla
Sonreí algo más aliviada pero todavía sentía dolor y angustia dentro de mí
- Álvaro la he cagado y la he vuelto a cagar miles de veces, necesitas a alguien que te cuide cómo te mereces -
- ¿Lo dices por él chaval de antes? Porfavor Clara - se empezó a reir
- Se llama Diego - le interrumpí
- Me es indiferente, lo besas por despecho, porque necesitas a alguien a quien querer
- Pues no te equivocas - respondí
- Pero también estoy seguro de algo, y no he viajado por media españa para verte así... Quiero que vuelvas conmigo y que lo volvamos a intentar
Le abracé fuerte y le miré fijamente, con él estaba segura, no sé por qué le dejé escapar, no hay nadie que me haga sentir como él
- Empezamos desde 0 - dije yo
- En ese caso... Hola soy Álvaro - me tendió la mano
- Hola Álvaro, yo soy la loca de la que te vas a enamorar - sonreí
Terminamos abrazados en la cama, su brazo rodeándome, su aroma en las sábanas, cómo lo echaba de menos
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FOOTPRINTS #FantasyAwards2018
Teen FictionTe amo- susurró Clara a Álvaro en su póster Como siempre él no la respondía, no lo hacía hasta que un día unas simples compras cambiaron su vida, quizá a mejor o quizá no [Sigue leyendo...]