Afraid [l&h] AU.

1.

UNO.
NOTA: me gusta el dolor en las fics.

Observó por última vez su reflejo en el espejo, trató de lucir lo mejor posible en aquel día tan importante, llevaba una camisa junto con jeans formales y su calzado más fino, por supuesto el muchacho de orbes azules intensos también intento peinarse pero obtuvo un resultado nulo, puesto que su cabello era un verdadero drama, por lo que se rindió, el gel se había acabo días antes.

Bajó los peldaños de las escaleras a paso bastante apresurado, tropezando un poco, provocando que su respiración se aceleré y terminé agitado. Al salir fuera del lugar, se encontró con la limusina que lo llevaría a su nuevo hogar, la pequeña pero bonita casa la habitará Lottie, hermana mayor de Louis, tras dejar la llave bajo la alfombra que tenia escrito un "Bienvenido" ya gastado, el muchacho de jugosas curvas se dirigió a la limusina, donde un hombre lo saludó de forma educada a lo que él devolvió bastante amable el saludo.

"¡No!" chilló el joven y el chófer de la lujosa limusina frunció el entrecejo.

"Joven Tomlinson. ¿Que sucede?" preguntó curioso el hombre.

"Dígame Louis, por favor. No es necesario que abra y cierre la puerta por mi, puedo hacerlo por mi propia cuenta, no me molesta"

El hombre rio levemente.

"Louis, muchachito, créeme que este es mi trabajo y como no me vean haciéndolo, deberé buscar otro, además es algo de la realeza, debe ser cumplido, seas parte de ella o no. Incluso los famosos lo hacen"

"Entiendo, muchas gracias, lamento molestar así. ¡Que vergüenza!" el joven se adentró al gran vehículo para luego echarle una última mirada al hombre, agradecido con el mismo, el resto del camino permaneció en silencio, dónde el ojiazul se preguntaba muchas cosas, las cuáles sabría al llegar al castillo de la familia Styles.

¿Que pasaba si no era lo suficiente bueno?

¿Por qué la princesa Gemma lo eligió?

¿Qué pasa si no es del agrado de todos por ser gay?

.

Louis salió de su burbuja de cuestiones cuándo sintió como la limusina se detenía, para luego ver por los vidrios polarizados como el hombre rodeaba el gran vehículo y luego abría la puerta, el ojiazul ladeó una sonrisa en agradecimiento, mirando con asombro notorio el gran castillo.

"Sígueme" ordenó un joven con traje negro, igual que el del chofer. ", lo llevaré junto con la princesa. ¿No trajiste ropa?"

"La princesa me dijo que no debía traer ropa, porque compraríamos una vez que llegué"

"Entiendo, la princesa no me informó sobre eso"

Louis asintió. Caminaron unos metros más hasta adentrarse a un gran salón, donde el muchacho le dijo que esperará, al cabo de unos cinco minutos bajo una joven con el cabello perfectamente peinado, falda rosa, al igual que sus zapatos y blusa, con una pulcra sonrisa, atrás de ella venía el muchacho de traje, el cuál era delgado y moreno.

"¡Bienvenido Louis!" Gemma le dio sonoros besos en cada mejilla y él le correspondió.

"Muchas gracias, princesa"