Half-Life 2: Beta Recreada

Capítulo 1: Punto de inserción

-Manos a la obra, señor Freeman, manos a la obra. No quiero decir que se haya dormido en los laureles en el trabajo. Nadie se merece más un alto en el camino. Todos los esfuerzos realizados habrían sido en vano hasta que... Bueno... Digamos que otra vez a llegado su hora. El hombre adecuado en el sitio equivocado puede cambiar el rumbo del mundo. Despierte, señor Freeman. Despierte y mire a su alrededor.

• Narrador omnisciente

Freeman es despertado por la bocina del tren en el que se encontraba, estaba muy confundido después de que aquel hombre con saco se le apareciera, ¿qué demonios hacia allí? El tren tenía una pinta extraña, no sólo por la clase de pasajeros que, por sus uniformes grises, parecían prisioneros, sino por las marcas de óxido demasiado notorias y esos saltos que pegaba como si fallara, como si no hubiera sido usado por demasiados años. Junto de él se encontraban una mujer, la cual había sido despertada también; a la par estaba sentado un hombre, el cual miraba de manera extraña a Freeman, esto le incomodaba bastante. Miró por la ventanilla del lado izquierdo y vio un yermo, un yermo sumamente peculiar ya que se encontraba con un color rojizo y tuberías enormes de algún lugar que se dirigían a una ciudad en medio del desierto, por lo visto este estaba habitado por criaturas tan extrañas que ni un hombre con una mente privilegiada podría imaginar ni en sus mejores pesadillas, pero Freeman ya conocía esas criaturas, entre ellas se encontraban Bullsquids, Headcrabs, Barnacles, Houndeyes, Gargantuas, entre otros. Cuando volteo a ver la ventanilla del lado derecho, se percató de que no era el único tren, pues se encontraba otro con mas gente siendo transportada a quién sabe donde; llegó el momento en el que el tipo sentado a la par de Freeman rompió el hielo.

─Veo que no eres de por aquí, no te vi entrar en el vagón, ¿por qué no traes contigo una máscara de gas?

Freeman lo miró confundido, pues él apenas recordaba nada antes de despertar, no tenía idea de que pasaba por lo tanto no tuvo nada que decir al respecto.

─No te preocupes, toma la mía, tengo una de repuesto, era de mi hija a quien no dejaron entrar al vagón conmigo.

Freeman tomó la máscara que le ofrecía este individuo. Tenía una pinta de estar algo vieja, pero le intrigaba saber por qué tenían que usar máscara.

─Me llamo Samuel, es un gusto.

Gordon Freeman sólo se limitó a sonreírle de forma amistosa.

─Es horrible, ¿verdad? Como en sólo 7 horas se acabó todo... - Freeman miró de forma curiosa -. Creo que estas algo desinformado, déjame contarte lo que pasó. Hace 20 años hubo una lluvia de portales, nadie sabe por qué pasó, sólo sabíamos que no era algo bueno; de ahí salieron todos esos seres extraños que vagan por fuera de la ciudad. Consigo llegó una colonia de conquistadores llamada Combine, que empezaron a crear genocidios masivos; se dio comienzo a lo que llamamos la guerra de las 7 horas, de no ser por Wallace Breen, quien dio la rendición de la tierra y ofreció a esa raza la estadía en la tierra, nos hubieran aniquilado; la tierra fue conquistada por el Combine, Breen fue convertido en administrador de la tierra y se asentó en la Ciudadela de Ciudad 14. Pero con lo que paso en Ciudad 14 ahora se traslado a Ciudad 17 que es a donde nos dirigimos.

Gordon estaba en shock por lo que Samuel le estaba contando, él sabía que todo lo que pasó fue su culpa y por qué todo se fue a la mierda. Se sentía tan culpable... no pudo decir nada.

  ─Arribando a Ciudad 17  - dijo una voz que anunciaba el final del trayecto. Freeman se inclinó para ver por la ventana y vio un muro enorme que tenía un hueco para el paso de los trenes: un Gargantua golpeaba un tren pero la fuerza del motor pudo más y terminó acabando con la vida del Gargantua; también veía como Zombies Headcrabs trataban de entrar y escalar el muro. Otros muchos se peleaban entre sí. Cuando el tren logró entrar a la ciudad, Freeman se percató de que todo estaba en ruinas y desolado... de seguro fue devastada por la guerra de las 7 horas. Después el tren se adentró más en la ciudad para descubrir que la parte del centro estaba apartada por un muro de hormigón de la ciudad antigua. Cuando el tren se detuvo, Samuel tomó del brazo a Freeman.

─Aún no salgas.

En ese momento salió de debajo de los asientos un Headcrab que iba hacia la salida del vagón, de repente una ráfaga de fuego dejó hecho cenizas al Headcrab. Samuel le soltó el brazo y todos empezaron a salir. Cuando Freeman bajó, vio de donde provenía el fuego. Se quedó perplejo al ver a un ser alto con una cabeza redonda y blanca, un cuerpo cubierto con una capa negra y un lanzallamas.

─A ese le llaman Cremator, es parte del Combine -, Samuel susurró.

Unos policías Combine llamados Metrocops, quienes portaban máscaras blancas que les cubrían por completo la cara, los escoltaron. En el camino, Gordon presenció como unos de los supuestos Metrocops sacaban del grupo a varias personas para esculcarlas y golpearlas, al parecer solo abusaban de su poder. Pasaban por un pasillo con muchas puertas, el pasillo se dirigía hacia unos trenes que estaban a punto de partir. Entraban al tren de uno en uno hasta que le toco a Freeman, una cámara emitió un sonido al ver a Gordon para cerrar las puertas del vagón. De una puerta de aquel pasillo salió un Metrocop.

─ Tú, ciudadano, ven conmigo -, dijo señalando a Gordon Freeman.

El Metrocop volvió a entrar en la puerta junto con Gordon. Era una especie de pasillo que se dirigía a cuartos para interrogar a los ciudadanos, en uno de los cuartos se estaba interrogando a una persona. Gordon se acercó y miró por la ventanilla de la puerta.

 ─ ... Debe de tratarse de un error. Tengo una tarjeta de traslado normal, como todo el mundo... -, El Metrocop que interrogaba al ciudadano miró a Freeman y cerró la ventanilla.

─   Entra -, dijo el Metrocop que guiaba Freeman apuntando a una puerta abierta. Gordon obedeció. En el interior del cuarto se encontraba uno de los Metrocops esperando a que entrara Freeman.

─ ¿Necesitas ayuda con este? - preguntó el que estaba adentro.

─ No, está bien - acto seguido salió para que pasara el Metrocop que escoltaba a Freeman, dejándolos solos.

─ ¡Atrás! - le ordenó a Gordon. Se dirigió hacia una consola donde controlaba las cámaras dentro del cuarto─ Sí, necesitaré un poco de intimidad para esto. - dijo desactivando las cámaras, seguido de eso se quitó la máscara de gas blanca. - Ahora... Sobre esa cerveza que te debía... ¡Soy yo, Gordon! Barney, de Black Mesa. Eh... siento haberte asustado. Tenía que disimular por las cámaras. Estoy trabajando en secreto con Protección Civil. No puedo tardar mucho o sospecharán. Voy retrasado dando palizas a los ciudadanos. - dijo mientras contactaba con la consola una señal de vídeo.

─ Sí, Barney, ¿qué sucede? Estoy a mitad de una prueba decisiva. - dijo el doctor que había sido sintonizado por Barney.

─ Perdona, pero mira quién está aquí. - dijo haciéndose a un lado para que el doctor viera a Gordon.

─ ¡Madre de Dios! ¿Gordon Freeman? ¡Pensaba que me avisarían! - dijo con una cara de entusiasmo. Gordon no sabía que pasaba.

─ Sí, y yo también. Estaba a punto de coger el rápido a Nova Prospekt.

─ Bueno, Barney, ¿que hacemos?

─ Lo estoy pensando, ¿vale? Mira, tengo que cortar. Ya nos arriesgamos bastante.

─ Muy bien, Mmm, eh ¿Gordon? Me alegro de verte. - dijo el doctor antes de cortar la transmisión.

─ Vale, Gordon, vas a tener que ir tú solo hasta Manhack  Arcade donde nos encontraremos de nuevo para que te lleve al laboratorio del doctor Kleiner -. Después de que Barney le diera esas instrucciones a Gordon, tocaron la puerta principal del cuarto.

─ Jo, tío, justo lo que me temía. Entra aquí, Gordon, antes de que me descubran. - dijo Barney corriendo a una puerta que era una salida alterna. - Apila algunas cosas y salta por la ventana. Sigue y sal por la puerta trasera de la estación, llega y atraviesa la fábrica, verás el edificio de Manhack  Arcade. Nos vemos luego.