La Suertuda del Año

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Llegamos a la mansión y ya eran las 9:15 pm. Cómo ya era de noche desde el portón principal se podía apreciar las hermosas luces en la grama que iluminaban el patio y sus hermosos arbustos en forma de animales. Parecía un castillo sacado de un cuento de hadas, grande y amplio de 2 pisos, color mármol y ventanas de cristal.

Durante el camino nadie dijo nada, todo estaba en silencio y cada cual pensaba en lo suyo. Al salir del auto, Dani me tomó del brazo, se despidió de su chofer y me llevó directo a su recámara sin decirme ni una palabra.

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Luego de contarle todo lo sucedido a mi mejor amiga, ella estaba molesta. Ahora estábamos sentadas en el balcón de su habitación con vista a su hermoso patio y al cielo estrellado.

"No juzgo a tu mamá..pero eso no se hace" soltó ella con un tono de frustración "O sea, no le veo lo malo a que quiera empezar a dedicarle tiempo a su vida amorosa pero rayos...eso de mudarte en casa ajena, con gente que no conoces...no me parece nada agradable." finalizó.

"Lo sé, pero diga lo que diga vamos a terminar mudándonos igual. Lo que me molestó fue que ella tuvo que esperar a querer mudarse con él para poder decirme." Añadí de la misma manera.

"Lo único que te puedo aconsejar es que por lo menos le des una oportunidad al señor ese y a su hijo" comentó la pelinegra como si se hubiera dado por vencida en darme una solución. "Algo bueno tiene que tener para que tu mamá haya terminado tomando esa decisión sin tu consentimiento."añadió

Y tenía razón, ya que no puedo hacer nada para evitarlo solamente me queda tratar de acoplarme. No quería ser egoísta con mi madre, ella también tiene derecho a rehacer su vida. Aunque no me gusta la manera en como hizo las cosas, solo espero que después de hoy me tome en cuenta.

"Ahora..respóndeme esto..¿Acaso viste a este tal señor..o por lo menos a su hijo?" Dice Dani sacándome de mis pensamientos.

"Umm..no. No tenía ganas de ver a ninguno de esos dos." Respondí

"¿No te dio ni un poquito de curiosidad en ver cómo era el novio de tu mamá? Para ver si se veía bueno o malo...uno nunca sabe."

"Bueno si, pero no podía presentarme en manera que estaba, tampoco quería formar una escena."

"Jaja, entiendo."tomó una breve pausa "Bueno para cambiar de tema, que tal si nos vamos a dormir o prefieres un maratón de American Horror Story."

"Obviamente el maratón, no sé ni porqué mencionaste lo de dormir, jaja"contesté riéndome. Esto es una de las cosas que me encantan de ella, siempre sabe cómo animarme no importa la situación.

"Oka, vamos a dentro" dijo poniéndose de pie con una hermosa sonrisa en su semblante.

"¡Perfecto! Que no se te olviden las palomitas."

Y con eso entramos al cuarto nos pusimos pijamas y tratamos de olvidar lo sucedido para concentrarnos en nuestra serie favorita.

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Ya era sábado en la tarde, 1:45 pm para ser exacta. No recuerdo a qué hora nos dormimos pero de lo que sí estoy segura es que llegué a ver la luz del sol antes de irme a dormir.

Noté que Daniela estaba profundamente dormida a mi lado, estaba pegada a mi cuerpo y al parecer no tenía ganas de soltarme. Intento aflojar el agarre de manera sigilosa sin tratar de despertarla, se veía muy linda durmiendo y no quería arruinar esa imagen. Minutos después por fin logro salir de sus brazos; tengo ganas de tomarle una foto...pero mejor no, ella me hizo un gran favor y no sería justo hacerle esa jugada.

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