Narra Natalia
Desperté en un mueble el lugar se me hizo conocido de inmediato, era la casa de susana, me senté y empecé a buscar señales de si alguien estaba en la casa.Pero no habia nadie, tampoco veía a Andriu.
Me puse de pie y me fui hacia la cocina, tenía sed y sabia que ha Susana no le molestaría que yo tomará un poco de agua,tome un vaso de la repisa y tome agua. Cuando escuche voces, se me hacían familiares pero estaban muy lejos,empecé a seguir las voces cada que me acercaba a donde venían aquellas voces.
Hasta que logre descifrar de quienes eran, Susana y Andriu, hablaban de algo seriamente. No lograba entender de que hablaban pero si hoy de una frase que escuche del padre de Leandro, ese tal "consejo de reyes". Me sentía tan estúpida al no saber entender nada de lo que me había estado pasando.
Cuando me di cuenta que las voces estaban demasiado cerca, decidí regresar al mueble.
-Ya estas despierta.-dijo Andriu al verme sentada en el mueble detrás de él venia Susana, no me aguante las ganas de saltar encima de aquella chica que había extrañado tanto,ella siempre había sido como la hermana que nunca tuve.
Me puse de pie rápido y camine hacia ella, me lance a abrazarla , me sentía tan emocionada no podía creer que ya estaba de vuelta, ella también me abrazo tan fuerte como si se le fuera a acabar el mundo.
-Te extrañe tantoooo-dijo ella aun abrazandome.nos separamos un poco para vernos mejor, seguía igual de hermosa.
-Eres tan hermosa, no sabes cuanto te eche de menos. -Dije apunto de llorar de la emoción,la volví a abrazar. Cuando un teléfono empezó a sonar, las dos volteamos a ver a Andriu, el cual nos miro apenado por que su teléfono había arruinado el momento, mientras que contestaba se fue para el patio.
-Tienes que darte una ducha.-dijo Susana,obserbando mi ropa con manchas de sangre.
Yo asentí y la seguía hasta el segundo piso donde quedaba su habitación.
Quería contarle todo lo que me había pasado cuanto antes,tal vez ella podría explicarme algo de eso ya que sabía sobre el "consejo de reyes". No podía evitarlo me sentía engañada,siendo mi mejor amiga, no teníamos secretos entre nosotras,o almenas eso creía.
Al subir ella saco un Jean de mezclilla y una blusa negra de manga larga,y unos botines negros de su closet, me la entrego con una toalla.
Me di una ducha,quería hablar rápido con ella y volver a casa, cada vez que pensaba en el dolor causado a mi madre por mi desaparición,se me formaba un nudo en mi garganta, por alguna razón me sentía culpable.
Además tenia que volver al instituto y recuperar el tiempo que no asistí,no podía darme el lujo de repetir otro año.
Me cambie rápido cuando salí, Susana se encontraba sentada en la cama,y sería yo ya sabía que ella iba a preguntar sobre lo que paso así que me senté a su lado,me dieron ganas de llorar. En algún momento pensé que nunca la volvería a ver.
-¿Estas lista para contarme?-dijo ella poniendo una mano en mi hombro.
-Si.
-Entonces dime ¿que te hicieron? ¿que paso?
Hablo tan rápido que apenas lograba entender.
Ella escucho atentamente,todo lo que había sucedido, lo que me sorprendió fue que a ella no le mostró casi importancia cuando le conté , de aquellas criaturas y lobos.ella sabia algo que yo no.
-Susana te quiero preguntar algo y quiero que me respondas con total sinceridad.¿si?.
Ella se quedo callada y negó.Algo que hizo que me sintiera un poco triste,se supone que ella y yo nos contábamos todo,pero me estaba dando cuenta de que ella nunca había confiado en mi, y que yo no la conocía en lo más mínimo.
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DIOSA hibrida
FantasyNatalia Wronck es una joven de 17 años, estudiante de preparatoria. Ella tendrá que conocer quien es para superar,las guerras que se avecinan con su sola precencia, y por obra del futuro.