Querida mochila rosa:
No te lo tomes mal.
No lo ha hecho adrede.
No es culpa suya.
Aún así lo siento.
Quizás menos que él pero mucho.
No es por discriminar.
Bueno si.
Pero las normas no fueron fijadas por él.
Ni por mi.
Es una pena que no pueda lucirte.
Pero en fin.
¿Qué se le va a hacer?
¿Has dicho algo?
Sí, tienes razón, hace falta valentía para enfrentarse a esta sociedad de mierda.
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A todas las persona con las que me crucé
ContoQuizás tu no me recuerdes, pero yo a ti sí Historia basada en mi día a día, (todos los nombres están puestos bajo seudónimos)