Capítulo 10.

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- Pensé que estabas dormido, ¿Que te pasa! - exclamó JB exaltado.

- ¡No quiero que me toques más! - dijo Youngjae levantandose de la cama.

- ¡ Ven aquí Youngjae! - gritó el mayor.

- ¿Para qué? - contestó Youngjae muy serio.

- Para seguir lo de hace un momento. - dijo JB con uns sonrisa pícara.

Youngjae corrió hacía al baño, entró y cerró la puerta con seguro. Escuchó como JB se levantaba de la cama golpeaba la puerta del baño.

- ¡SAL DE AHÍ! - ordenó JB.

- ¡No! ¡No voy salir! ¡No me voy a acostar contigo! - gritaba Youngjae desde el interior del baño.

- ¡PAGUE POR TI PARA ESO! - exclamó JB enojado.

- ¡No soy un objeto! - gritó Youngjae.

- ¡CLARO QUE LO ERES YOUNGJAE! ¡ERES MI OBJETO! -

Youngjae sollozó y se limpió las lagrimas de sus mejillas.

- ¡No! - dijo Youngjae firme.

- ¡SAL DE AHÍ AHORA MISMO! - ordenó JB.

- ¡No saldré! ¡No me importa tener que dormir aquí! - dijo el menor.

JB suspiró y se pasó una mano por el cabello.

- ¡PRONTO SERAS MÍO CHOI YOUNG JAE! ¡CUANDO SALGAS DE AHÍ, VERÁS LO QUE TE PASA! - gritó JB enojado.

 Youngjae se derrumbó detrás de la puerta. - D-debo... S-salir de aquí. - dijo el menor en un susurro.

JB se había quedado despierto hasta las dos de la madrugada esperando a que saliera, los ojos se le empezarón a cerrar y se quedó dormido.

Youngjae había tomado una toalla para ponerla en el piso y otra para cubrirse, se pasó toda la noche llorando, le preocupaba su hermano y quería estar con Seung.

Cuando volvió a abrir los ojos escuchó los pasos de JB en la habitación... Youngjae sintió miedo.

- ¡Youngjae! ¡Sál de una vez! ¡No te haré nada! -

- ¡No te creo! -

- ¡No te haré nada! ¡No tengo mucho tiempo! ¡Tengo que irme a trabajar! - dijo JB desesperado.

Youngjae abrió la puerta despacio, salió y se sentó en la cama.

JB se abrochó la camisa. - Hoy volveré pronto Youngjae. - dijo seria mente.

JB lo miró. - ¿Te cambias! ¿Ok! - ordenó JB y Youngjae asintió.

- ¿ A dónde iremos? - preguntó Youngjae.

- ¡Tu solo irás! ¡ Y punto! - ordenó JB. 

- Quiero comer... - dijo Youngjae somnoliento.

- No te mereces comer, pero tampoco quiero que te enfermes... Ahora te traigo el desayuno. -

- ¡Yo puedo hacérmelo! - objetó Youngjae.

- ¡No! ¡Tú te quedas aquí! - le ordenó JB al menor.

JB salió y cerró la puerta, cuando volvió, tenía la bandeja con el desayuno de Youngjae y lo dejó sobre la cama.

- ¡Ahí está tu desayuno! -

- ¿Me vas a dejar encerrado de nuevo? - preguntó Youngjae mirando al mayor.

- ¡Si! ¡Hasta que aprendas a comportarte! - gritó JB.

Jae Bumse fue dejándolo solo, Youngjae terminó de desayunar, después se cambio, se puso una camiseta blanca, una sudadera negra encima y unos pantalones cortos.

Youngjae se pasó toda la tarde acostado en la cama, nunca se había aburrido tanto. Entonces escuchó la puerta.

Después de unos minutos la puerta de la habitación se abrió, era Jae Bum.

- Que bien que estas listo. - dijo JB mirando a Youngjae.

Youngjae no dijo nada. Vio como JB tomaba ropa mas cómoda y vio como se desabrochaba el cinturón.

- ¡Espera! ¡No te cambies aquí! ¡Ve al baño! - dijo Youngjae un poco sobresaltado y JB sonrió divertido.

- ¿Porque? ¿Te pongo nervioso? - dijo el mayor soltando una risita.

- ¡N-no! - dijo Youngjae sonrojado.

Jae Bum se empezó a quitar la ropa y Youngjae no lo miró mientras se cambiaba.

- ¡Bien! ¡Vámonos! -

Jae Bum tomó a Youngjae con fuerza de la muñeca y lo metió dentro del coche en el asiento de copiloto. El siguió conduciendo hasta que se detuvo en una tienda donde hacen tatuajes.

Youngjae lo miró extrañado.

- ¿T-te vas a tatuar? - preguntó Youngjae y el mayor sonrió cínicamente.

- No guapo... ¡Lo harás tu! - dijo Jae Bum y Youngjae río con ironía.

- ¡No pienso entrar a ese lugar! - exclamó Youngjae.

Jae Bum se bajó del auto, se dio la vuelta y tomó a Youngjae del brazo.

- ¡Vamos! - le gritó JB al menor y lo arrastró hacía el establecimiento.

- ¡Ahora verás Youngjae! ¡Lo que hiciste ayer te va a costar! -

TU NO ME AMAS (2JAE)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora