Capitulo 6 (contado por Jack)

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Deperté, sentía la oscuridad, sentía lo gris de la celda antes de abrir los ojos, sabía que estaba encerrado, lo sabía, lo sentía. Esto no es tan horrible, de no ser porque ese gris me traspasaba, me traspasaba la piel, ensuciaba mi ánimo, disolvía mi fuerza de voluntad. Tal vez incluso caerme por un acantilado no sería tan horrible, ahí al menos podría gritar. La oscuridad se cernía sobre mí, lo único que sentía era dolor, me retumbaban los oídos, podría haber muerto, pero no morí. Me digné a enderezarme y abrir los ojos. Creo que pregunte donde estabamos, no sé.
Mis recuerdos son borrosos, pero recuerdo haber visto a Nico en la celda de al lado, recuerdo cosas vagas, pero lo que sí recuerdo, es su sonrisa...

Había alguien hablando con Nico, era una chica, podría decir que es la chica más hermosa que ha existido, podría decir muchas cosas, pero no serían verdad, ella era lo que todos llamarían una chica normal, pelo café, ojos cafés, nada atractivo, nada distinto, pero yo no me fijaba en lo que veía, yo solo podía pensar en que era hermosa, a pesar de parecer normal, yo sabía ver, y sabía que aunque solo fuera para mí, ella era especial, tan especial como un unicornio en una manada de caballos.

Y sonreía, con esa dulce sonrisa que afloraba en sus delicados labios, y sonreía...

Y esa sonrisa, su sonrisa, fue la luz en mi oscuridad, esa sonrisa, fue como el suave viento que aviva el fuego cuando este se empieza a apagar.

Ese momento en que la ví, fue eterno para mí, si existe el paraíso, es como lo que yo sentí en ese momento.

Miré hacia otro lado, no quería quedarme embobado mirandola, me pondría en ridiculo, creo que le pregunte quien era, Cony se llamaba.

Volví a prestar atención a lo que decían:

-hace unos meses pensaba lo mismo que tú pero ahora...después de lo que pasó...-le dijo cony a nico, y al ver que la mirábamos sin comprender agregó- supongo que para que entiendan tengo que contarles como llegué aquí. -dijo cony esperando un poco antes de continuar- yo estaba llendo a la escuela en el autobús, cuando me dí cuenta de que los profesores hablaban acalorádamente con el chofer, no podía entender bien lo que decían pero recuerdo haber mirado por la ventana y no haber reconocido donde estabamos, llevaba 5 años llendo a esa escuela, 5 años por el mismo camino en el mismo autobús. Entonces... ¿por qué me parecía tan extraño el camino? Aún no entiendo del todo que hacíamos ahí pero el camino dejaba de ser cemento y empezaba a ser un simple camino de tierra, seguíamos avanzando, todos estaban nerviosos pues no sabíamos donde estábamos, cada vez había más árboles.... y... bueno... no espero que me crean pero en uno de esos árboles estoy segura de haber visto una tierna y pequeña hada que al vernos se alejó volando muy asustada. -Cony se detuvo un momento y miro a Nico, quien la miraba incrédulo- es en serio.. -prosiguió cony- y no fui la única que lo ví, dos niñas del fondo del autobús tambien la vieron, gritaron de hecho, eso que ellas son muy calladitas. Después de unos minutos escuché que un profesor le gritaba al chofer que donde estabamos. Escuché como alguien se desmayaba y caía al suelo. Como algunos corrían a ayudarlo. Se acabó la gasolina. El autobús se quedó en pana, tuvimos que bajar, apenas bajamos nos reunieron y nos dijeron que no entraramos a los árboles, que ya eran casi un bosque. -paró un poco para tomar aire, yo la miraba con los ojos muy abiertos. Su historia era increíble, pero no se muy bien por qué, le creí- Pero antes de que empezaramos a caminar... -prosiguió- se escuchó un aullido, probablemente de un lobo, unas compañeras que decían ser valientes se echaron a llorar. Unas criaturas diminutas, del porte de ratoncitos se pusieron a corretear cerca del autobús. Creo que sonreí al darme cuenta que eran duendes, pensé que se llevarían nuestras pertenencias como en los cuentos de hadas, pero en vez de eso, empezaron a morder el autobús, se lo estaban comiendo. Mis compañeros gritaron, un par se internaron en el bosque pero volvieron a los pocos segundos seguidos por un enorme y pesado oso. -nico se rió al imaginárselo- ¡¡es cierto!! ¡¡Yo grité y salí corriendo!! Y luego no recuerdo mucho, solo corrí y corrí viendo toda clase de seres feéricos. Corrí y seguí corriendo, cada vez mas asustada, debo de haber corrido 1 hora aproximadamente cuando tropezé y caí. Lo único que recuerdo es que no podía levantarme, que levanté la vista y vi al enmascarado. -nos miró- pero bueno -se encogió de hombros- además los guardias hablan a cada rato sobre hadas, duendes, dragones, unicornios y otras criaturas fantásticas.

-wow -no pude evitar decir

- ¿Y cómo sabemos que es verdad? - preguntó Nico

-no lo saben, aunque sí es verdad-dijo ella, estaba calmada, al parecer no esperaba que nos tragáramos su historia.

-sigo sin entender que guardias... -empezaba a decir cuando se escuchó un estruendo, como la llegada de un gigante- ¡¿Que diablos...?! -solté levantandome bruscamente.

-llegaron sus queridos guardias compañeros- nos sonrió, sarcástica.

Iba a replicar cuando ví las gigantes piernas del tamaño de varias de las espaciosas celdas en las que estábamos. Me quedé sin habla

-¿e..eso son..?- empezó a preguntar Nico asustadísimo.

-Gigantes -completó Cony

Crónicas De Un Mago, ¿Magia o Ilusión?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora