Tenías Que Ser Tú

Capítulo 3: Apuesta.

Me dirigí hacia donde estaba Melanie, de nuevo.

Tal vez se pregunten como me convencieron, la respuesta es: $50,000. No iba a enamorarme de ella, solo era una apuesta, Emma no se enteraría.

Estuvimos hablando un rato, me dió su número de teléfono.

Ya era tarde, estaba cansado y había tomado de más, así que decidí volver a mi casa.

**Narra Melanie**

Ya casi no había nadie, bueno ya no había nadie en casa de Emily, yo me encontraba sentada en el sillón mientras ella se despedía de sus amigos que estaban por irse.

-¿Cansada?-Me preguntó entrando a la sala de estar.

-Mucho.-Contesté.

-Si quieres ve a descansar.-Dijo Emily juntando algunos vasos que estaban tirados en el piso y los hechaba en una bolsa.

Hoy dormiría en su casa, sus padres no estaban.

-Te ayudaré.-Me levanté y junté lo que vi tirado.

-Ví que conociste a Evan.-Dijo Emily.

-Si, es muy amable. Me dijo que se conocían de un campamento. ¿Reprobada?-Reí.

-Sabes que sí.-Dijo y río.

Cuando terminamos de limpiar subí a la habitación de Emily, tenía mucho sueño y estaba cansada. Me iba a quedar a dormir, así que no debía preocuparme por llegar temprano a casa.

-Buenos noches, Em.-Dije y cerré mis ojos.

Sonó la alarma ¡Esperen! ¿Que alarma? Sentí que me quitaron la cobija.

-¡Buenos días!-Dijo Emily mientras abría las ventanas.

-¿Por qué tan temprano?-Hundí mi cabeza en la almohada.

-¿Temprano? Sí son las 11:00 a.m.-Dijo tirando de mis pies.

Emily logró hacer que me levantara.

-¿Quieres salir a desayunar?-Dijo Emily.-Yo invito.

-Que bueno... Por que yo no traigo dinero.-Dije y reí.

Entonces me cambié de ropa, no podía ir con ese vestido tan corto a desayunar. Emily me prestó un short de mezclilla con una blusa campesina. Llegamos al restaurante y yo pedí un yogurth con fruta, café y jugo de naranja y Emily pidió unos waffles con frutos rojos y jarabe. Cuando llegó la comida empezamos a comer mientras Emily y yo platicábamos.

-¿Te cae bien Evan?-Dijo Emily mientras llevaba un pedazo de Waffle a su boca.

-Si... Es muy divertido, guapo y amable.-Dije.

-Si lo es.-Dijo Emily y agachó la cabeza.-¿Y qué tal estuvo la fiesta?

-Estuvo muy divertida.-En especial por qué Evan estuvo casi toda la noche platicando conmigo y es muy divertido.
Al terminar de comer Emily me llevó a mi casa.

Me despedí de Emily y entré a mi casa, en la sala de estar estaban mis hermanos Mike y Luke.

-Hola-Dije yo cerrando la puerta. Después de haber entrado, claro.

-Estábamos preocupados por ti.-Dijo Luke parándose del sofá.

Si, claro, estaban sentados en el sofá jugando videojuegos.

-¿Preocupados por qué?-Dije sarcástica.

-De que te secuestraron, te violaran, te embarazaras y murieras dando a luz.-Dijo Mike.

¡Es una tontería! A veces mis hermanos podían llegar a ser muy sobreprotectores o dramáticos.
Solo reí ante el comentario de mi hermano Mike.

-¿Dónde estuviste está noche?-Preguntó Luke.

-En la casa de Emily después de la fiesta. Tranquilo no me acosté con nadie.-Reí.

-Eso me tranquiliza.-Dijo Mike.

Subí a mi habitación y me llegó un mensaje de un número desconocido.

Desconocido: Hola Melanie. 

Melanie: ¿Quién eres?

Desconocido: Soy Evan.

Melanie: Oh! Hola Evan.

Desconocido: Quería invitarte al cine, hoy en la tarde.

Melanie: Llevaré el gas pimienta.

Agendaste a desconocido como "Evan"

Evan: ¿Para qué?

Por si me quieres violar. Reí. Soy algo dramática. Mientras pensaba eso él me envió otro mensaje.

Evan: Envíame tu ubicación, pasaré por tí a las 7:00 p.m.

Solo le envié mi ubicación y me quedé dormida.

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