CAPÍTULO 2 (UN NUEVO DISPOSITIVO)

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El sonido de la cafetera desplegando las últimas gotas fue lo primero que escuchó Andreu al abrir la puerta del laboratorio. Junto a ella se encontraba el ODS agregando algunas cucharas de leche en polvo y azúcar.

_ ¡A la antigua! Expresó el detective.

Extrañado, el operador de software preguntó a qué se refería con lo que acababa de decir.

_ Pensé que aquí todo lo hacían con tecnología de punta. Esa cafetera no es muy avanzada a mi parecer.

_ Te sorprendería cuánto llegas a extrañar la tecnología estándar y práctica que solías tener antes de conocer todo esto. Afirmó el ODS sin dar mayor atención al tema.

Al parecer iba a ser un día lleno de cosas por hacer, pues algunas alarmas en el panel de la MDT habían saltado durante la noche. Apenas habían pasado unos pocos días de su primer "Viaje al pasado" usando este artefacto, así que desconocía prácticamente todo sobre ella.

Las alarmas parecían ir al azar, pues no tenía sentido que todas ellas se activaran una tras de otras haciendo ver que el artefacto estaba defectuoso en su totalidad, lo cuál, haciendo un diagnostico con el computador central se demostraba que esto no era cierto. Era arriesgado enviar a Andreus sin saber cómo podía reaccionar su mente a tal evento.

El detective sólo podía limitarse a observar todo lo que se llevaba a cabo para dar mantenimiento a la MDT. Mientras más contenedores se abrían, otros tres aparecían, haciendo aún más compleja la tarea. No parecía apropiado que una sola persona se encargase de todo aquello que el ODS estaba realizando. Por lo visto las cosas solían hacerse por cuenta propia en este lugar.

Al cabo de unas horas, luego de revisar casi todas las secciones y compartimientos de la máquina, finalmente algunas alarmas habían dejado de sonar. Pero una en específico se mantuvo fija, cómo sino quisiese que nadie usara el artefacto.

"Conectividad anulada"

Era la frase que aparecía remarcada en rojo en la pantalla.

Ninguno de los dos se explicaba qué era lo que podía estar sucediendo y por supuesto, mucho menos Andreu quién apenas era un recién llegado.

Había una alternativa que quizás podía funcionar, pero que al mismo tiempo podía ocasionar que la máquina entrara en modo de ahorro de energía igual que la primera vez. Pero de alguna forma había que solucionar este fallo. No podían perder más tiempo para seguir analizando algunos entornos del pasado.

Reiniciar el flujo energético de los condensadores haría que el sistema entero se reconectara por cuenta propia, pero para ello, debían hacer un respaldo de toda la información almacenada en la memoria.

Andreu por fin se sintió útil, pues al menos podía operar la computadora central mientras el técnico hacía el resto. Para llevar a cabo todo esto, se conectó la MDT a algunos sensores únicamente diseñados para equipos de las instalaciones A.I.V.S. Automáticamente, el sistema operativo del computador detectó a la MDT cómo un nuevo dispositivo, permitiendo ver TODAS y cada una de las funciones que en ella se encontraban.

12.523 TB de información almacenados.

15 procesos en segundo plano.

0 Visores conectados

2 dispositivos conectados simultáneamente.

0 Errores.

Esto era lo que se mostraba de entrada en la pantalla del computador. Andreu no tenía ningún conocimiento de lo que todo eso significaba. Por lo visto, la MDT funcionaba cómo un equipo independiente del resto. Tenía su propia memoria, su propio flujo de datos y un sistema de procesamiento único y potente que le permitía reproducir demasiada información en cuestión de segundos. Lo único con lo que no contaba era con un sistema de control, pero para eso estaban dando uso del computador central.

A.I.V.SWhere stories live. Discover now