Epilogo

14 1 0
                                    

8 años después...

—¡Mason!  — llamé la atención de mi pequeño de cuatro años

  — ¿Qué mamá?  — pregunto dejando jugar con sus primos

  —No vayas a ensuciar tu ropa  — dije en tono de advertencia, a lo que él bufo y rodó los ojos

  —¡Mami! Siempre me dices lo mismo. Y ya lo sé —dijo con algo de fastidio en su voz

 —Agh, te dije que no te pusieras ropa blanca, tienes un enorme guarda ropas, donde tienes tantos tipos de ropas, pero tú te debes poner específicamente una blanca — regañé

  —Cariño, solo deja que se divierta. Después de todo, solo tiene cuatro añitos —llegó Logan rodeando mi cintura y besando mi frente

  —Bien... Mason, ve a divertirte con tus primos, cariño  — dije poniéndome a su altura y sonriendo con sinceridad

  —Okey, mami. Te amo, igual a ti papá —dijo Mason sonriendo con dulzura

  —¡Ay, ternura! Yo te amo aún más — dije besando su mejilla y luego de eso, él fue con Cody, que es hijo de Alicia y Jake, y tiene cinco años. Hanna y Cole, gemelos de 6 años, hijos de Luke y Ashley.  Blake, de 6 años, hijo de el niño y Savanah. Dakota, de 5 años, hija de Austin y su esposa y Destiny, de 4 años, hija de Brad y su esposa.

Mi Mason y Destiny, son los menores.

Estábamos en mi casa reunidos, todos los chicos y yo. Los niños ya se habían ido a jugar al patio trasero, de la enorme casa

  —Oigan, hay que hacer un brindis ¿les parece? — sugirió Ashley

  — Sí, Ash tiene razón debemos  brindar —opine dándole la razón a Ashley

  — ¡Bien! ¡Brindemos!  — exclamó emocionado el niño

  — Bien. Brindo, porque, hayan más días como este. Y porque nuestros pequeños hijos, continúen unidos. Tanto como lo hicimos nosotros — dije levantando mi copa de vidrio con vino tinto

  — Igualmente. Brindemos porque todos nos mantengamos unidos, como una sola familia que somos — acotó Alicia

  — Y porque continué la unión en  el resto de nuestras generaciones — dijo Brad

  — ¡Salud! —gritamos todos al unísono

Y chocamos las copas para luego beber un sorbo de la bebida. Y así continuó el resto de nuestra tarde, entre risas, juegos entre nosotros, bromas y chistes por parte de los chicos, lo que nos mantenía riendo. Los niños jugando y alguna que otra vez pasaban por la sala corriendo, pero volvían al patio trasero a jugar en la piscina de la casa

Hasta que oscureció y cada quien fue a su casa, que todas quedaban en el mismo vecindario, por cierto

Entonces ahora yo me encontraba cenando con mi familia en el comedor. Y con mi familia hablo de mi amado esposo Logan, y mi amado hijo de cuatro años de cabello rubio oscuro, llamado Mason.

  — Y entonces Dest —así es como Mason llama a Destiny, de cariño— llegó y nos salpicó a todos de agua, cuando se lanzó con fuerza al agua... Fue muy divertido

Mason estaba riendo junto a Logan, que estaba apretando sus mejillas con dulzura. A decir verdad, esa pequeña escena padre e hijo, me conmovió bastante

  —¿En serio? — pregunte haciendo la sorprendida— ¡Guau! ¡Que genial!

  —¡Lo sé! — exclamo riendo— Oye, ya comí. Y tengo mucho sueño

Mi Verdadero Yo ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora