Niall caminaba encogido debido al frío aire que se colaba por sus prendas de ropa, Zayn estaba enfermo y no les quedaban medicamentos aptos para su resfriado.
—Por favor Niall— le había dicho—, yo haría lo mismo por ti.
Niall no podía negarle nada a Zayn, él era el amor de su vida. Era una pena que supiese que jamás iba a corresponderle. Decidió meterse por un callejón para acortar camino, ya era muy tarde y no quería arriesgarse a que alguien lo reconociera y pensase cosas raras. Trataba de caminar rápido, sobre todo cuando vio que un hombre de ojos azules y lleno de tatuajes andaba hacia el sentido contario, le pareció sospechoso. De pronto una voz femenina llegó hasta sus oídos y el hombre giró hacía una esquina, no sin antes sonreírle de manera lasciva, sintió una arcada.
—¿Niall?
—Mierda— susurro por lo bajo, pero se giró sonriendo, después de todo era su trabajo— ¿Si? ¿Quieres un autógrafo? Tengo prisa.
—No, no quiero un autógrafo. Quiero tenerte para mi sola.
—¿Disculpa?
La muchacha sacó una navaja, Niall se asustó. No soportaba a ese tipo de fans que se creían con derecho de controlar su vida o de sentirse propietarias de su existencia. No sabía cómo comportarse, ahora no estaba con los otros chicos, ni con Paul, su guardaespaldas.
—Mira…. No…—no sabía ni que decirle.
—No te preocupes cielo— se rajó la mano con la navaja—, solo te dolerá un poco.
—¿Qué?
—Y podremos estar juntos para siempre— la muchacha avanzó hacía él con una rapidez sobrehumana y agarró su cara violentamente, haciendo que abriese la boca. Una vez hecho esto vertió la sangre de su herida sobre la boca del muchacho.
Niall no sabía cómo reaccionar, no le gustaba el sabor que tenía su boca ahora. Su cara dolía por la sujeción tan fuerte de la mujer.
—¡Joceline!— otra voz femenina apareció en el callejón— ¿Estás loca? ¡Lo que te dije era broma!
—¡Pero…!— Joceline había soltado a Niall de golpe al aparecer aquella otra mujer.
—¡Pero nada!, ves a explicarle tu cagada al jefe. Después hablaré seriamente contigo.
Niall intentaba incorporarse para salir corriendo, pero no podía. Comenzaba a sentirse mareado y notaba una sensación extraña. Como si en sus pupilas se concentrara sangre. Cuando consiguió ponerse de pie un tremendo dolor lo atravesó de pies a cabeza y le hizo caer de nuevo.
—¡Mierda!— exclamó la mujer que había llegado más tarde.
—¡Niall!—gritó Joceline.
—¡Vamos ves a hablar con el jefe!
—Pero Niall…
—¡Pero Niall nada!, ¡Ves ahora mismo!
Joceline desapareció en menos de un segundo, pero Niall ni siquiera lo notó. Estaba más preocupado intentando resistir el dolor.
—Niall, escúchame— lo levantó con la fuerza suficiente para sentarlo, pero no para hacerle daño y después le cogió las manos—. Sé que duele, pero resiste aunque sientas que va a ganarte, no te rindas, ni cedas, solo aguanta y aprieta mis manos como si te fuera la vida en ello.
Niall se dedicó a hacer lo que le dijo la mujer y durante cinco minutos sintió que todo iba a acabarse en breve y que se arrepentía de no haberle dicho a Zayn lo enamorado que estaba y también se arrepentía de todas las cosas que no había hecho. Sin embargo cinco minutos después nada acabó y ya no se sentía mal, ni tenía razones para arrepentirse de algo.
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Adicto a ti: REVOLUTION
FanfictionZayn es un súcubo que se niega a aceptar el amor y Niall un chico normal que sufre sus consecuencias. Al margen de la angustia y el sufrimiento, en las historias siempre hay pequeñas cosas que tienen variantes. Solo entonces uno se pregunta… ¿Y si...