"¿Porque no puedo sacarte de mi mente?"
Había pasado una semana ya desde aquel beso que dejó confundido al líder de las tortugas, en esa semana los hermanos de el notaron el extraño comportamiento de su hermano mayor; rapha verdaderamente estaba preocupado sabía que algo había ocurrido durante la pelea de leo y garra de tigre, estaba decidido a investigar. Salió de su cuarto esperando que todos se hayan quedado dormidos ya y camino con cuidado hacia la habitación del mayor, se detuvo en la puerta al escuchar sollozos desde adentro de la habitación.
Decidió irse y preguntarle mañana a primera hora antes de que todos despertarán lo que sucedía, camino de vuelta a su cuarto; al dar las 6 de la mañana rapha salió nuevamente de su cuarto y camino con mucho más cuidado a la habitación del mayor, al estar frente la puerta esta vez no tocó y entró de improviso en la habitación.
Al entrar se encontró con leo dormido, camino hacia la cama viendo el rostro cansado de su hermano, rapha se iba a ir cuando vio en una de sus manos un frasco de pastillas para dormir; el de rojo le quitó el frasco de las manos y lo puso en la mesita de noche, se sentó al borde de la cama y comenzó a mover a su hermano para despertarlo.
-leo, despierta
-¿que?......¿rapha?.......¿que haces aquí? - leonardo se sentó en la cama apoyándose en el marco de la cama
-vine a averiguar que te sucede
-no pasa nada rapha, sólo me quede dormido eso es todo
-leo, anoche te oí llorar eso no es nada, dime que te hizo ese tigre sin cola
-rapha no pasa nada, anoche sólo...... Me acorde de.......un libro que leí y me emocione eso es todo
-leonardo hamato, cuando entre a tu cuarto tenías en las manos un frasco de pastillas para dormir de doni se que te pasa algo y tratas de ocultarlo
Rapha se puso recto en la cama, su mirada penetrante y sería ponía cada vez más nervioso a le ante esa mirada, odiaba que lo miraran a los ojos cuando querían saber que le pasaba ya que cuando lo miraban se ponía nervioso y al final decía todo lo que querían saber; trató de evitar la mirada de su hermano pero le era imposible.
-leo, se que a veces de sacó de quisio pero estoy preocupado algo te sucede y me preocupa, somos hermanos y ya se que no soy el hermano más genial del mundo, puedes confiar en mi
-rapha por favor, ahora no quiero hablar estoy cansado y Ya es hora de desayunar-
Raphael se levantó de la cama caminando hacia la puerta, detuvo su caminar mirando a leo y dijo:
-puedes confiar en mi......
Raphael salió de la habitación dejando en completa duda al de azul, ¿deberia decirle a su hermano de rojo? Miles de preguntas rondaban por su cabeza, pero la pregunta más complicada era ¿estaria o no enamorado de garra de tigre?.
Despejó esas ideas de su cabeza y salió de la habitación esperando que su día no fuera tan complicado como el de ayer.
