Casi perfecta

Mejores amigos

Ahí estaba él otra vez mirando desde la azotea, observando particularmente hacia la misma dirección donde está esa chica rubia de ojos azules y tez bronceada a simple vista es otra chica más, ni muy alta pero tampoco muy baja con un uniforme impecable, lo cual era curioso ya que con lo extrovertida y desvergonzada que era se creería que le gustaría mostrar más de su cuerpo, pero allí estaba ella con su grupo de amigas platicando mientras comían.Una sonrisa llego al rostro del chico, la hora del almuerzo era el tiempo perfecto para observar una nueva cara de la rubia, normalmente con el es ruidosa y llamativa, pero con otras chicas pareciera otra, calmada y tímida, desde la azotea podría observar el leve sonrojo que se asomaba por el angelical rostro que poseía la chica.
La vio voltear la cabeza como si estuviera molesta, y ahí fue cuando ella por primera vez lo miro, agacho la cabeza y la levanto inmediatamente mostrándole esa sonrisa que el conocía bien, no era la típica que ella daba era esa sonrisa fingida que empezó a hacer cada vez que se encontraba triste y no quería hablar sobre lo que sea que la pusiera así, esa sonrisa que fingía para dar la ilusión de estar bien, pero ella no podría engañarlo, le hizo una seña indicándole que debían hablar y ella volvió a sonreír le dio un saludo después negó con su cabeza y volvió a su conversación.
El pelinegro mando un último suspiro al viento, desde que le pidió a la Uzumaki que empezara a comportarse como una chica su relación se había invertido, de ser el perseguido por ella terminó siendo el perseguidor y definitivamente su paciencia era demasiado corta para jugar ese juego. Miro por última vez a su mejor amiga y decidió que bajaría a hablar con Shikamaru para distraerse, sabía que lo encontraría en el patio debajo de un árbol durmiendo o liándose con la hermana de Gaara, pero necesitaba distraer su mente de su mejor amiga.

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La Uzumaki por su parte se encontraba incomoda, desde hace tres meses estaba evitando a su mejor amigo, el quería que se comportara como chica y por supuesto que lo haría, complacería a su amigo aunque fuera lo último que hiciera, lo cual era posible ya que si bien le fue fácil hacer amigas, le era imposible no sentirse incómoda usando el uniforme femenino, ella odiaba las faldas, y allí estaba sentada como una damisela procurando cubrir lo mejor posible sus piernas mientas fingía escuchar la estupida charla de chicas, era fácil solo debía asentir y sonreír pero se aburría como nunca, preferiría mil veces estar con Sasuke en la azotea y discutir sobre cuan perfecto o su insociable podía a llegar a ser, vamos que fuera distraída no significaba que fuera estupida desde hace tiempo admitió su derrota al comprender que como mujer no podría vencerlo ya que sus fuerzas actualmente tenían una gran diferencia, pero el parecía no notarlo, el la trataba normal, como a un amigo más, hasta que realmente se dio cuenta que ella era una chica, empezó a ser más cortes, le ignoraba sus provocaciones, poco a poco la evitaba y por si fuera poco la sacaba de peleas que ella sabía que podía ganar.

Flash back

"Sasuke ¿que te pasa?, estaba a punto de partirle la cara a esos idiotas" le dijo la Uzumaki desde la espalda ya que estaba siendo cargada como un saco de papas
"Baka, ¿crees que puedes ganar? Te has visto últimamente, ello son más grandes y fuertes que tú."
"Me importa poco, les iba a dar una paliza ¡dattebayo!" decía la chica golpeando la espalda del pelinegro para que la bajara "No soy débil y lo sabes, además ¿que importa si son más fuertes y grandes? Yo soy ágil podría esquivar fácilmente cualquier golpe de ellos."
"¡pequeña engendro!" la vena en la sien indicaba que ya estaba en su limite "¿que más da si eres ágil?, sigues siendo una chica compórtate como tal."
"¿Desde cuando sabes que soy niña? Siempre me tratas como niño."
"Desde que nuestras familias son tan cercanas, además bueno tu..." bajo la cabeza recordando haber entrado al cuarto de la chica cuando se estaba cambiando la pijama "dejas regado tu sujetador en todo tu cuarto, lo vi una vez que te estabas duchando"se moría de vergüenza, pero era la verdad.
"¡Teme!- le dio una cachetada después de habérselo imaginado en su cuarto jugando con su ropa interior "Pervertido aléjate de mi, y ya no hables más de eso es vergonzoso" fue lo último que dijo antes de salir corriendo.