Enamorando a un mujeriego

Capítulo 4 "El entrenamiento"

CHASE'S POV
Era la hora de entrenar y estaba nervioso por lo que había dicho Maia. Sabía que su padre era mi entrenador, pero que tendría que ver con algo que supiese ella.

Llegué al campo de entrenamiento, donde estaban todos los del equipo. Durante el entrenamiento di todo lo que podía para que no ocurriese nada malo como que me dejasen en el banquillo en el próximo partido.

Tras acabar me acerque al banco, donde estaban las botellas de agua y las toallas para secar el sudor. Entonces dirigí mi mirada hacia las gradas y vi como en una parte estaba sentada Maia.

-Chase acercate un momento! Tenemos que hablar!- Dijo el entrenador.

-Dígame entrenador.

-A ver como digo esto... estas fuera del equipo.

-Que?! Pero entrenador, he dado lo mejor de mi en todos los entrenamientos y me esfuerzo al máximo.- Conteste enfadado.

-A ver Chase.  Durante los últimos partidos te vienes abajo desde la semana pasada. No te veo bien, con energía.

Entonces vi como Maia me miraba y se marchaba. Tire el casco al suelo y salí corriendo hacia la salida por la que se estaba marchando.

Al llegar a donde estaba la cogí por el brazo y le di la vuelta. Ella me miro durante unos segundos y se cruzó de brazos mientras yo recuperaba la respiración.

-Era eso? Sabias que me iba a echar del equipo?!

-No sabía que te iba a echar. Solo pensaba que te dejaría en el banquillo. Solo sabía quejarse de ti y de que no lo dabas todo.

-Pues solo por eso me ha echado. Mi sueño se ha terminado aquí.  Pensaba que llegaría lejos y ahora se ha terminado.

-Chase, yo... me tengo que ir a casa.

Tras eso Maia se marcho y me quedé hay, destrozado. Pensé en que mi sueño se había terminado y que no llegaría a ser un futbolista de élite como había querido toda mi vida.

MAIA'S POV
Tras ver lo ocurrido con Chase y el equipo de fútbol me marche a casa pensando en que podría hacer. Sabía que podría haberle avisado antes para que el se esforzase mas.

Hize la cena antes de que mis padres llegasen. Al terminar la llegó mi madre, que se metió en la ducha. Tras eso llegó mi padre, que tiro sus cosas en el sofá y se sentó a ver los partidos.

-Papa... podemos hablar?

-Claro hija. Que quieres que hablemos?- Me pregunto el.

-Quería hablar de Chase.

-Te ha dicho que le he echado verdad?- Suspiro y apago la tele.

-Papa hemos tenido que hacer varios trabajos y por eso estaba desconcentrado, déjale jugar el próximo partido y verás que sigue siendo el mismo que hace unos meses. Lo va a dar todo.

-Mmm... esta bien. Pero solo tendrá esa oportunidad. Si en el partido del miércoles sigue igual se va del equipo.

-Gracias papá gracias!- Le di un fuerte abrazo mientras esbozaba una gran sonrisa.

Tras cenar subí a mi habitación y me puse el pijama. Me tumbe en la cama y me eche a dormir muy emocionada porque mañana le diría a Chase que jugaría.