– Ese color te asiente muy bien. –Le dijo Louis a Pau, ella lo había convencido de que la acompañe a comprar el vestido que usaría en una cena. – Te ves jodidamente sexy. –Le dijo ella se sonrojo.
– Que cosas dices Lou… –Se miro nuevamente al espejo, le gustaba el vestido y mucho.
– Sí tú no te lo compras, yo mismo te lo comprare. –Le dijo, ella río.
– Tranquilo, se que este es el vestido indicado, y sé que eres capaz de gastar tu dinero por mí. –Río de nuevo y Louis le sonrío. Ella entró de nuevo al probador para quitarse el hermoso vestido negro de lentejuelas. Se lo quito y colocó sus blue Jeans, agarro su chaqueta, y justo alguien abrió la puerta del probador, ella se cubrió con la chaqueta. – ¡Louis! – Dijo subiendo el tono de voz. – Sal ahora mismo–Le pidió pero el castaño negó con la cabeza.
El Probador era pequeño, era solo para una persona, Louis cada vez se acercaba más y más a ella, Pau estaba muy nerviosa, él solo tenía un punto, sus labios, se fue acerco cada vez más, Pau ya sentía la respiración de Louis.
– Sal Lou… –Pidió por última vez, Louis sonrío, y miro de nuevo los labios de la chica, le agarro su pequeña cintura y la beso, sí señores, Louis Tomlinson estaba besando a una chica en un pequeño probadorcamarote, en un gran centro comercial.
Pau estaba totalmente shockeada, lo que menos se esperaba de Louis era que la bese, pero, no tardo en corresponderle el dulce beso del castaño… Se encontraban en una gran guerra de lenguas, pero la falta de aire se hizo presente, provocando que ambos chicos se separen.
– Perdón. –Le susurro Louis, estaba con la mirada perdida, y estaba acariciando su cabello, se notaba nervioso, y sus mejillas tornaban al color rojo.
– No, perdóname tú a mí. –Le dijo PauIsa, Louis la miro totalmente confundido, no entendía el porqué de su disculpa.
– ¿Perdón? ¿Por qué? –Pregunto mirándola confundido, no entendía nada.
– Por esto. –Dijo y con una mano, lo agarro de la nuca, nuevamente uniendo sus labios, era como sí los labios de Louis encajaran perfectamente al de ella, Louis sonrío en el beso y la agarro de la cintura, sin querer, Pau colocó sus dos manos en el cuello de Louis. El beso era algo que ninguno de los dos podía describir con claridad. Nuevamente el aire arruino el beso perfecto. Louis le sonrío a Pau y luego bajo su mirada, se separo un poco de ella, sin subir su mirada, y luego Pau lo escucho reír. No entendía de que reía, Louis bajo hasta el piso y tomo una remera, se la entrego, está se ruborizo totalmente, estuvo todo ese tiempo en sujetador frente a Louis.
– Creó que te dejare cambiarte. –Dijo y nuevamente río, no sabía porque reía.
– Yo… –Pau no pudo terminar de hablar, estaba totalmente avergonzada, y muy roja. Se dio media vuelta, dándole la espalda a Louis.
– ¿Sabes que tienes un espejo frente tuyo, no? – Pregunto y volvió a reír, ella se ruborizo aun mucho más.
– ¿No que te ibas? –Logro decir, luego miro el suelo, seguía roja de la vergüenza.
– No tienes por qué tener vergüenza Pau… –Dijo mientras la agarraba de la cintura y apoyaba su cabeza en el hombro de Pau. Louis se acerco a su oído. – Ya te dije… Eres jodidamente Sexy. –Se susurro en su oído, Pau estaba súper nerviosa, Louis le dio un pequeño beso en el cuello y salió del camarote.
Pau rápidamente se colocó la blusa y la chaqueta, y no sabía si salir, no sabía con qué cara mirar a Louis, tenía vergüenza, mucha vergüenza. Tomo el vestido negro, y salió, sin siquiera mirar a Louis, quien la esperaba con una gran sonrisa en el rostro sentado, ella camino hasta el mostrador y le sonrío a la señorita que se encontraba ahí.
– Voy a querer esto. –Le dijo sonriendo, la señorita asintió, agarro el vestido, y busco el precio.
– Este es el último que me queda de este modelo, eres afortunada. –Le sonrío, Pau le devolvió es gesto– 55,25$ –Le dijo, ella abrió la boca, sorprendida, ¿Tanto costaba un vestido? En fin, le gustaba a ella, y le gustaba a Louis, entonces decidió comprarlo.
– Lo llevo. –Le aviso a la señorita, está sonrío y comenzó a poner los datos en la computadora, ella abrió su bolso buscando su dinero, pero no lo encontraba, luego recordó que lo había dejado todo en su otra cartera, se dio un leve golpe en la frente– Disculpe… Pero olvide la cartera. –Dijo y la señorita hizo una mueca, ella solo se encogió de hombros y salió del local, esperando afuera a Louis, quien tardaba mucho, unos 5 minutos después y este chico al fin salió, pero con una bolsa, que dejo confundida a Pau, ¿Cuándo había comprado él algo? Era lo que en esos momentos se preguntaba.
– Ten, es un pequeño obsequió de mi parte. –Le dijo sonriendo, ella lo tomó rápidamente, lo abrió y no podía creerlo, miro a Louis sorprendida. – Me debes una.
– ¡Louis no debiste! –Le dijo está, subiendo el tono de voz, él se sorprendió, esperaba un ‘gracias eres el mejor’ – Pero igual, gracias. –Dijo sonriendo, Louis la miro con ternura, adoraba a esa chica. – Te prometo que te pagare todo, te lo prometo. –Le dijo Louis suspiro.
– No me debes nada. – Le dijo, Pau suspiro, y Louis le sonrío, volvió a acercarse peligrosamente a ella.
– Igual te pagare. –Le dijo y le sacó la lengua, Louis río.
– ¿Dinero? No lo quiero, pero… ya que tanto me quieres pagar, acepto besos. –Le dijo pícaro, Pau no pudo evitar reír.
