Amaneció. Después de dormir juntos. Aún recuerdo aquellas palabras, aquellos labios, aquellos besos.
Miro a Ares estando dormido, quiero acariciar su rostro que se ve tan tranquilo de lo que es en realidad. Pero no lo quiero despertar.
Salgo de las sábanas sin despertarlo, y bajo a la cocina a preparar algo de comer.
Después de preparar algo voy a bañarme, me visto, y subo con el desayuno hacia la habitación.
—Ares, despierta amor.
—Hmmm, aún no—dice más dormido que despierto.
—Te traje el desayuno, ven a comer algo—digo susurrando en su oído
—Si?, ¿Que me trajiste?
—Ven a comer y sabrás.
—Ahg, está bien.
—Abre la boca. AAAH—haciéndole avioncito.
Abre la boca y come mientras aún tiene los ojos cerrados, ósea come durmiendo.
—Vamos, abre los ojos, tenemos que ir al centro por comida, solo queda leche, algunas frutas, verduras, entre otras cosas desde la ultima vez que fuimos al centro.
—Está bien, desayuno me baño y nos vamos.
Antes de irnos me cambié de ropa y me vestí con un top de ejercicios súper holgados.
Salimos, llegamos al centro y compramos.
—Ares, tú buscas frutas, y snacks, yo pan fresco, jabones y otros detergentes, carnes, jamón, queso, y algo dulce.
—Como usted mande señora.
—Vamos.
Pagamos, fuimos a la heladería y compramos un par de tarros. Ares prefirió chocolate, fresa, y vainilla. Yo dulce de leche, chicle, y fresa.
Volvimos a la casa, vimos algunas películas y nos dormimos juntos.
ESTÁS LEYENDO
Secuestrada por el amor©
Teen FictionLa vida de ambos parecidas y a la vez muy distintas. La típica vida normal que aburre, y llama la atención hacer algo diferente. Un secuestro. Una compra. Problemas. Un amor. Ex parejas que vuelven a reclamar, conocidos que tratan de impresionar...