Mi nublado amor •ᵗᵃᵉᵏᵒᵒᵏ [태국]

3.Parque de atracciones, vértigo y más celos.

Varios días después de que Taehyung y Jungkook hicieran  las paces, los chicos debían volver a su apartamento, ya que se habían terminado los días de estancia allí. La verdad, había estado muy bien, los chicos degustaron deliciosas comidas, disfrutaron de las aguas termales y los hermosos paisajes que se podían contemplar desde ellas, e incluso les regalaron unos preciosos paypays de bordes dorados y estampado de flores en relieve (un poco femenino para el gusto de los chicos, pero a Jin le encantó 0.0...), con el nombre de cada uno, pues la casa se los había hecho exclusivamente para ellos.

En el apartamento, tras unos días después de haber llegado del onsen, estos muchachos volvían a estar aburridos, ya que la experiencia en las aguas termales les había dejado con ganas de más. Cosa que llevó a J-hope tener otra fantástica idea.

—¿¡Y si nos vamos al parque de atracciones!?–la voz gritona de Hoseok irrumpió el silencio de la sala en la que se encontraban los jóvenes, cada uno haciendo una actividad distinta. Todos le miraron, unos con una ceja alzada y otros simplemente con cara de wtf debido al inesperado grito del Esperanzo, que por cierto, había logrado despertar al adormilado Suga.

—¿Por qué rayos gritas?–le replicó Yoongi, pues interrumpirle antes de quedarse dormido le fastidiaba muchísimo.

—Bueno, es que se me ha venido la idea a la mente y la he dejado escapar con el mismo entusiasmo que he sentido yo al pensarla.

RapMon se unió a la conversación.

—Pues no estaría mal... estoy falto de inspiración para componer.

—A mí me pasa lo mismo, quizás allí esta vez sí se nos ocurra algo...–dijo Suga rascándose la nuca.

Jungkook y Tae se miraron, y luego a sus mayores.

—¡Sí! Vayamos, estoy aburrido aquí sin hacer nada.–(TaeTae)

—¡Eso!¡Queremos ir, hyungs!–le siguió la corriente Jungkook.

—¡Por faaaaaaaaaaaa!–miraron los dos menores a su " eomma" Jin para ver si él también estaba de acuerdo con un adorable puchero.

Él los miró queriendo parecer normal pero era inevitable no mostrar lo enternecido que estaba por las caritas de los dos pequeños.

—...¿Y-y si os perdéis?¿Quién me asegura que luego no estemos locos y desesperados por no saber dónde están?

—Bah, Jin hyung ya somos mayores.–le dijo Taehyung.

—Es verdad, podemos cuidar de nosotros perfectamente.–continuó Kookie.

—Hmm...bueno, de ti no me fío mucho, Taehyung...y de ti Jungkook...eem...a decir verdad tú eres más espabilado que Tae pero... eres muy revoltoso.–en serio, denle un premio a la madre del año.

—Pero hyung...–los dos empezaron a hacer pucheros y caritas adorables para convencer a Jinnie.

Y, en serio, él no quería ceder tan fácilmente, pero es que estos niños lo mataban y en especialmente Jungkook; ese galleto le parecía la cosita más tierna sobre la faz de la Tierra. Tras unos segundos mirando hacia otro lado o haciéndose el desinteresado, no pudo soportar más monerías...

—...¡BIEN, BIEN! Pero, iremos juntos, todo el grupo, así os vigilo.–Al fin cedió, dándose por vencido. Galleta y Taesito usaron ataque de monada total... efecto: muy eficaz. No hay hiperpoción para eso.

Y obvio que aquellos bebos se contentaron mucho. MUSHO.

—Pero, hyung, sería más divertido si vamos divididos en grupos, ¿no? Por que, imagina si unos quieren ir a una atracción y otros a otra diferente, sería un fastidio.–le dijo Kookie.