3 y último (o tal vez no)

12 4 0
                                    

-A la salida.

-Tu no te vas a ninguna parte - le respondió Ariadna de malas formas -Todavía te necesito.

-Como!? Ya no necesito agua, asi que dejame irme.

-No, necesito q hagas otra cosa por mi, algo q otra persona no ha conseguido-dijo mirando a la chica.

La otra chica estaba a pocos metros de mi.
-Quedate aqui, vendre a por ti en diez minutos - dijo ariadna.

Me acerqué a la chica.

-Hola,me llamo Josh,tu como te llamas?

-Soy Natalie.

-Natalie... que nombre tan bonito.

Josh sentía una estúpida atracción hacia aquellos ojos verdes que lo miraban con curiosidad, algo que nunca había sentido antes.

-Y dime Natalie...Tu sabes que hacemos aquí.

-No, se lo mismo que tu - dijo con una sonrisa nerviosa que hizo que algo dentro de Josh se alborotado.

-Tengo miedo - dijo Natalie. Josh veia como su labio inferior temblaba.

Josh no sabía que le pasaba pero sentia la necesidad de protegerla.

-No te preocupes. Todo irá bien... Te lo prometo - dijo poniéndole la mano en el brazo.

-¿Me lo prometes? - pregunto Natalie sonriendole y sonrojandose a la vez.

-Te lo prometo - afirmo Josh devolviendole la sonrisa.

En ese instante llego Ariadna mas enfadada q nunca porque se habia enterado de q no habia matado a billy.

-Ven con migo ahora mismo.

Josh se levanto y se fue con ella.

Le llevó a una casucha y una vez alli ariadna empezo a mirar por la ventana.

-Q estas haciendo? - pregunto josh extrañado.

-Calla y mira.

Empezaron a mirar por la ventana pero lo unico q vieron era un señor mayor con un baston.

-Ves ese anciano? - Josh asintio - pues tienes q hacerte amigo de el y ganarte su confianza.

-¿Porqué? - preguntó Josh frunciendo el ceño.

-Porque sólo las persona a las que amas pueden llegar a lastimarte realmente.

Josh le miró horrorizado.

-¿Quieres que le mate?

-Quiero que hagas algo mucho peor que eso - y al ver la cara de Josh sacó una pistola del Cinto y añadió - Recuerda lo que esta en juego.

Josh salio fuera y mirando hacia otro lado se choco contra en anciano adrede.

-Usted disculpe - dijo Josh.

-No pasa nada - contesto el anciano mirándolo fijamente y enarcando una ceja- me podria acompañar a mi casa porfavor?

-Cla... claro

Llegaron a su casa y...

-Quieres tomar algo?

-Sólo un vaso de agua, no querría abusar de vuestra hospitalidad.

-No te preocupes - dijo el anciano sonriendole - hace mucho que no viene nadie a casa.

-Ah si? - Josh se sorprendió, imaginaba que debería tener hijos o al menos familiares, luego se avergonzo de ese pensamiento, no tenía porque tener hijos, no era una obligación.

- Antes vivía con mi hija - dijo el anciano, como adivianando su pensamiento - pero nos distanciamos, desde entonces no me queda nadie

-Vaya, - dijo sorprendido - y como se llama?

-Ariadna.

-Espera, Ariadna Monterrey?

-Si, la conoces?

-Si! - grito Josh - pero si ella...

-Ella... - que le iba a decir, que ella le había secuestrado y tratado de matarle - Nada.

-¿Seguro? - dijo el anciano desconfiado -Bueno, no importa, llevo mucho tiempo sin saber de ella, ni siquiera se si sigue con vida.

-Sigue con vida - le aseguró Josh sin saber muy bien porque.

-Me alegro, al fin y al cabo, es mi hija.

-Vaya,nunca habia visto a un padre querer tanto a su hija.

-Daria mi vida por ella, si supiera donde esta - balbuceo el anciano.

-Me impresiona usted - dijo Josh con asombro.

-Bueno dejemonos de chachara, no se tenia q ir usted?

-Si! - grito de repente Josh.

-Esta bien - rió - mañana vendrás por aquí?

-Si así lo desea...

-Porfavor.

-Está bien.

Su sonrisa se ensanchó.

Josh salió de aquella cabaña pensando y analizando porque Ariadna no le había dicho que era su padre.

-Que tal todo? - la voz de Ariana se escucho detrás suyo cuando salió a la calle.

Josh pegó un salto, se giró y Ariana salió de las sombras.

-Me has asustado

-Qué tal todo? - repitió ignorando el comentario de Josh.

-Bien, supongo.

-Eso espero, recuerdalo, te estoy vigilando.

Tras decir eso Ariadna comenzó a irse.

-Espera!

Ariadna se paró y se volvió extrañada.

-Donde duermo?

Ella sonrió.

-Apañatelas.

-Venga porfavor - suplico Josh - no tengo a donde ir.

-Por que no se lo pides a mi pa... - se paro Ariadna, Josh se dió cuenta pero no dijo nada - quiero decir, a ese anciano del que tanto te has echo amigo.

-Nos acabamos de conocer!

-Y?

-No puedo hacer eso.

-Tienes que hacerlo, te recuerdo que tienes que ganarte su confianza y ese es un buen modo de hacerlo, aunque si no quieres... Siempre que la otra opción - dijo llevándose la mano a la pistola - sino lo haces por ti, hazlo por Natalie - dijo y Josh la vio irse, sin mirar atrás ni una sola vez.

Josh se apretó los labios, pero respiró hondo y se dirigió a la casa del anciano, con un para de golpes en la puerta llamó la atención del anciano quien fue a abrir sorprendido.

-¿Otra vez tu?

Josh carraspeo incómodo.

-Si, yo... Quería pedirte que si podía dormir en tu casa.

El hombre abrio mucho los ojos

-Espera, ¿como habias dicho que te llamabas?

-No lo habia dicho, me llamo Josh.

-Josh...Josh...Claro, como no me habia dado cuenta antes - dijo murmurando para si.

-Perdone pero que - Josh pregunto estupefacto, pero la siguiente mirada del anciano lo hizo callar, era una mirada de odio, una furia inmensa que Josh no habia visto en su vida.

-Se quien eres, se lo que has hecho.

Lo siguiente que supo Josh fue el puñal clavado en su estómago y los ultimos momentos de angustia antes de caer rendido a la puerta del anciano.




_Este capítulo no creo q sea el último, si todo sale bien, habrá uno o dos más._

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: May 07, 2018 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Vaqueros Entre ArenaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora