contra las mareas de tu oxidado corazón (ruki mukami)

exotico

Narra la escritora

La muñeca obedeció a su amo y se dirigió al baño a darse una buena ducha, la joven apenas se fue de allí, los hermanos regresaron a la realidad era como si el aroma de la sangre tuviera algo que simplemente colocaba en trance a los vampiros. Pero alguien no se quedó atrás, la joven estaba en el baño, había dejado el vestido en el suelo al igual que los accesorios del mismo para meterse en el agua de la bañera, en ese momento sintió por primera vez lo cálido del agua en su piel; la joven soltaba leves risitas mirando como sus manos por la humedad comenzaban a presentar arrugas en sus dedos, pero la presencia del mayor de los Mukami se hizo presente en el baño, no veía la sirueta de la joven por la espuma que la cubría pero este anciana ver más allá. La joven no sabía que la presencia de Ruki mirando su privacidad era malo, por lo que solamente soltó una leve risa la cual sonó muy adorable.

Ruki: no tienes ni la menor idea de como bañarte no?- los cabellos lisos de la chica ahora estaban completamente aplanados por el agua y cubrían sus ojos, este suspiro y agarro el shampoo para colocarlo sobre el cabello de la chica y comenzar de una vez a lavar su cabello, aunque tenía otro tipo de intenciones- dejaste a todos locos abajo

Maika: porque lo dices?-pregunto la chica con un eje de inocencia, ella sabía que estaba rodeada de vampiros- eso es malo?

Ruki: depende -la cabeza de la chica se llenó de espuma mientras este se aseguraba de que esa larga y abundante cabellera quedara bien limpia- ya debes saber que somos vampiros

-mi amo no me muerde- dijo ella mientras se dejaba masajear su cuero cabelludo por aquel chico- hoy por primera vez me dolió algo- la muñeca de la joven tenía un moretón visible por la manera brusca en la que Subaru la apretó- eso es normal?

Ruki vio una oportunidad de morder a la joven, si su amo no lo hacía el no iba a perder la oportunidad; nadie había reclamado aquella presa, entonces el aprovecharía cada momento incluyendo este.

Ruki: pues, en ese momento eras como una roca, así que dudo que alguien quiera morder eso- soltó una leve risa, necesitaba buscar el momento- aunque si tanto lo deseas- sus colmillos se acercaron a la clavícula de la joven y este paso su lengua por la piel blanca de esta delineando el punto donde iba a morder; la joven se sonrojo y se estremeció al tacto, el vampiro clavo sus colmillos en el cuello de la joven sintiendo como el embriagador sabor de aquella sangre pura entraba a su boca; estaba excitado y al mismo tiempo hipnotizado por el sabor de la sangre de la joven. No quería parar, pero había dejado su marca y eso la hacia de el ahora- que sabor más... exótico

La joven se alejó del vampiro tocando su cuello con nerviosismo, está simplemente se quedó quieta; como si no le hubiese importado mucho aquel mordisco sino el dolor de este.

Maika: Ruki-kun eso dolió!- se toco el cuello nerviosa y el chico desapareció entre las sombras nuevamente, la joven miro la marca en el espejo, dudando de una reacción tranquila por parte de su amo. Eso la asustaba más, una vez salió del baño se dirigió al clóset de su habitación para sacar una pijama e irse a dormir, pero ahora estaba acorralada.

Subaru: apesta -menciono acercando su nariz al cuello de la joven- te mordió un Mukami...maldita traidora- Subaru jalo el cabello de la joven tirándolo al suelo, ella estaba desnuda en ese momento- porque mierda te dejaste morder!? Sabes que eres solo mía!!!!

Maika: l..losiento!!!-se disculpo la joven entre súplicas, la culpa había sido de Ruki por morderla; aquello iba a desatar la guerra entre ambos bandos.

Subaru: no vas a volver a salir de esta habitación entendido?- la voz fría de Subaru se hizo presente, y las ventanas de la habitación fueron cubiertas con cadenas para evitar algún intento de escape por parte de la muñeca- más te vale no soltar ni una lágrima por se sucio Mukami, o vas a ver de lo que soy capaz- aquellas palabras, hicieron eco en los oídos de la joven.

Karldheinz amenazaba a Christa de aquella manera usando las mismas palabras,ya que por aquel encierro ella había enloquecido.

Subaru salió de la habitación, dejando a la muñeca tirada en un rincón de la misma; pasaron los meses y las semanas, la muñeca no podía bajar a la sala a ayudar a Reiji como siempre hacia, y tampoco podía contar las historias de su memoria por lo que simplemente las escribía entre las líneas blancas de los libros de aquella librería. Subaru entraba con comida pero ella no mencionaba ni una sola palabra, empezaba a tener sentimientos, y ella estaba muy deprimida por aquel encierro. Algo le hacía falta, la luz del sol, el aire fresco, recordaba cuando acabó metida en el sótano de los sakamaki por años supuestamente averiada y sin manera de reparar, poco a poco la joven noto que sobre sus ojos ya empezaba a haber polvo y ella los limpiaba siempre. Ya era casi de noche, Subaru había llevado la cena de la muñeca a su habitación para luego irse; y este apenas se fue apareció aquel monstruo del que ella temia y tenía pesadillas.

Karldheinz: entonces...tú eres la que causa tantos problemas entre mis hijos correcto?- el señor se agachó a la altura de la muñeca la cual estaba sentada- se supone que debías ir a la tumba de Cordelia para el quinto de tus milagros pero Subaru de repente se volvió como yo- este saco una pequeña esfera morada de su mano y la acerco a la chica- sabes que es esto?

Maika: -la joven negó- d..donde esta la señora Christa!

Karldheinz: muerta como tú dueño, con la diferencia de que ella no va a volver- el hombre destruyó la esfera dejando ver un hermoso collar de obsidiana con perlas moradas- traídas del inframundo, te traje tu quinto milagro; tan finas y delicadas como la lluvia te traje las lágrimas- el hombre le coloco el collar a la muchacha; aquel collar había sido un regalo de bodas de Gallerian a Christa- ahora cuando el dolor sea tan intenso que no puedas soportarlo...vas a llorar...

En ese momento el rey de los demonios simplemente desapareció por completo, la joven miro a todos lados y se asomó apenas por la ventana mirando como Yuma estaba en su huerto. Y de repente aquellas gotas ya no eran humedad acumulada por la lluvia, sino lágrimas reales las cuales comenzaban a salir de la tristeza; ella estaba encerrada, ella estaba triste.

El Mukami sentía las lágrimas de la chica, sabía que algo malo estaba pasando y este se teletransporto hasta la habitación de Maika, la joven muñeca cuando lo vio casi estallaba en más llanto y abrazo a su amigo con fuerza, el Mukami simplemente acarició aquellos cabellos y suspiró.

Ruki: ¿No quieres volver a esta mansión?, ¿Quieres estar conmigo?- pregunto el vampiro mientras miraba con atención la puerta, debía saber en qué momento desaparecer para que Subaru no lo viera, la muñeca asintió, Christa buscaba la felicidad para la joven, y si que estaba feliz al lado de Ruki ya que las lágrimas y el llanto cesaron casi por completo.

Maika: R..Ruki-kun, yo quiero ir con usted- laito y ayato trataban mal a la muñeca, Shu la asustaba, Subaru era posesivo, Reiji era el único bueno con ella y kanato la vestía como si fuese una reina y así fue- s..si quiero ir con Ruki-kun