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✺THE BET✺

Capítulo Único: La apuesta (Ymir x Historia)

La pecosa tragó saliva al ver a la rubia desde lejos, era tan preciosa. La chica más hermosa que había visto jamás, sonrió internamente al verla reír y se sonrojó al darse cuenta que lo estaba haciendo. Miró a su alrededor y carraspeó para levantarse de su escondite.

—Olvídalo—la chica alzó la mirada—. Ella estará conmigo antes de que digas: "Christa ¿Quieres salir conmigo?"

Ymir sonrió con autosuficiencia. Reiner siempre había sido tan seguro de él mismo y egocéntrico, creía que el mundo estaba a sus pies cuando no era así. No veía la realidad que lo rodeaba, en pocas palabras, no veía que era un perdedor y que Christa jamás se iba a fijar en él.

—¡Ja! ¿Quieres apostar? —retó la castaña con una sonrisa socarrona.

—Reiner... no creo que sea una buena ide...

—¿Qué apuestas? —interrumpió el rubio al pelinegro el cual soltó un suspiro y negó por lo bajo.

—Si tú llegas a conquistarla haré lo que quieras por una semana y me escribiré en la frente con permanente "Reiner me ganó" hasta que se borre—el chico sonrió de lado—. Pero si yo gano... te alejaras de Christa para siempre, simplemente la dejaras en paz y te escribirás en la frente "Culo acorazado" con permanente.

Reiner hizo una mueca exagerada demostrando que lo estaba pensando pero a los segundos estrechó la mano extendida de la joven. Sabía que iba a ganar, Christa era hermosa y él se consideraba lo suficientemente apuesto como para conquistarla.

De hecho... él ya sentía que entre ambos había una química. Una química que Ymir sabía que era inexistente.

Las horas pasaron y la castaña se acercó a la rubia para caminar al lado de ella a la hora de la salida, no sabía por dónde empezar. Siempre habían sido amigas pero pedirle para salir era algo completamente diferente. Christa nunca le había demostrado que le gustase alguien.

O eso es lo que creía ella.

—¿Por qué tan callada? —preguntó la rubia anotando algo en su agenda con lapicero rosado—. Normalmente me cuentas de alguna paliza que le diste a Reiner o algo parecido.

—... ¿Te gustan las historias que te cuento acerca de Reiner?

La rubia asintió cerrando los ojos y riendo un poco cubriéndose los labios. Ymir tragó saliva pesadamente ¿Qué debía pensar con respecto a eso? A ella le gustaban las historias que contaba acerca del rubio ¿Eso significaba que gustaba de él?

—¿Y por qué te gustan...? ¿Acaso a ti...?

—Sí, me da mucha risa como te emociona la idea de derrumbar a alguien tan grande.

Un gran suspiro salió de sus labios. Eso era algo que le encantaba de la rubia, siempre era muy abierta y sincera. No había secretos entre ambas... o bueno, no por parte de Christa.

El silencio inundó el camino de la escuela a la casa de la rubia. Tenía que hacer algo antes de que el rubio haga su primera jugada y pierda la apuesta.

—Christa...

—Ymir...—dijeron ambas al mismo tiempo sonrojándose y riendo.

—Tú primero—repitieron y volvieron a reír con el mismo sonrojo de antes.

La rubia negó y señaló a su amiga.

—Va, tú primero.

—No, no... tú primero, pequeña.