Yo era un valiente caballero
vivía en el mundo de sueños
Mataba dragones, mataba hechiceros
Rescataba princesas, luchaba con elfos
Era valiente, era sincero
Así fui soñado por los que me hicieron
Un día maldito, la vi yo a ella
Lloraba y lloraba bajo las estrellas
Era ella una mujer sin belleza
De ojos marchitos por la tristeza
Vivía en aquel terrible planeta
Donde la cruel realidad te apresa
Yo soy sus sueños y quimeras
En la oscura realidad yo era su vela.
Mi creadora, mi Diosa: ella
Que me ama, anhela y espera
¿Por qué lloraba? ¿Por qué desespera?
Visitaré su mundo, calmaré su pena
Dejaré mis castillos para que me vea
Tocando sus sueños calmará su tristeza
Pero quien viaja a la realidad se enferma
La realidad con los sueños no tiene clemencia
Sabia que a mi mundo no había regreso
Pero igual fui hasta ella a cantarle mis versos
Ella me vio, fue feliz, me dio afecto
Finalmente realidad se hicieron sus sueños
Pero en este universo nada es perfecto
y llegó un momento en que pagamos el precio
Se cansó de mi con el tiempo
Fue infeliz aunque logró sus deseos
Supongo que la infelicidad la llevaba muy dentro
Ni un sueño real le calmó aquel veneno
Aquella noche en que se abrió las venas
Lloré y maldije, le dije "regresa"
"Preferiría no haberte conocido" me dijo, recuerdo.
"Así mis esperanzas no hubieran muerto"
¿Qué somos nosotros los simples sueños?
En el mundo real, en su duro suelo.
Tan frágiles, tan ingenuos
En este mundo es tan fácil rompernos.
¿Qué es en la tierra real un sueño roto?
Mil fragmentos de afectos dolorosos
odio, rencor, dolor muy hondo
Un sueño roto es la pesadilla ante tus ojos
